Capítulo XLIV - fugitivo

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-al cabo de un rato me desperté mareado en medio del monte, el hecho de despertar sin recordar nada y el dolor de cabeza se está convirtiendo en una amarga rutina.

Aunque esta vez no había cadáveres a mi alrededor... Al menos a mi aldededor.

Por instinto buscó mi teléfono pero no lo encontro así que decido bajar la montaña a pie.

Al bajar me di cuenta de que esta es la montaña de la cual me desperté en mi primer día de celo, con la playa de fondo.

Una mar de recuerdos de lo acontecido hasta ahora me inundan como el agua salada los barcos hundidos que se hallan en el fondo del mar.

Al revivir todo me doy cuenta de todas las emociones vividas en tan poco tiempo y también recuerdo donde me hallaba antes y decido correr había hacia la civilización en busca de un teléfono o algún medio de transporte.

Al bajar y encontrarme a los pies de la montaña lo único que me sapara de las casas ubicadas en al playa y yo era una autopista muy transitada.

Sabiendo el posible caos que podría generará me colocó en el borde de la misma, inhalo con lentitud y exhalo de la misma manera antes de empezar a correr hacia el otro lado de la autopista paralizando a cualquier coche el cual me pudiese dañarme provocando que se abollaran de tal manera que pareciera que impactaron contra un muro.

Sin mucho esfuerzo pero con el corazón en un puño llegó al otro lado en el cual una mujer graba la escena y yo amablemente le pido prestado el móvil el cual cogo con telequinesis para llamar a mi omega, Horacio -

¡Horacio, no te vas a creer lo que me pasó ayer!

-empecé a decir acelerado nada más empezar la llamada-

¿Gustabo? ¿Eres tu?

-el tono de Horacio parecía sorprendido y muy alterado -

Si si si déjame decirte... Verás

- y antes de que pudiese seguir una voz ronca y muy cabreada retumbo en mis oídos -

¡Capullo! ¿¡Que coño cres que haces!? ¡Estás en busca y captura por el CNI, eres un capullo y un anormal pienso convertirte en cenizas cuando te vea mariconetti!

-las noticias expuestas por Conway me dejaron de piedra, no entendía el por qué me buscaba el cni -

¿Que por que me busca el CNI? ¡Estaba secuestrado me habían puesto un collarin que daba descargas cuando usaba mis poderes!

-ante mi exposición de los echos Conway se limitó a suspirar cabreado -

Capullo eran del cni! Y ahora dime quien es pogo y por qué eres tan subnormal... *Ya*

-por mi mente pasan mil mentiras e ideas pero he podido comprobar que no era buena idea mentirle y me decante por decirle parte de la verdad -

Es una bocecilla en mi cabeza y cuando toma el control yo lo veo todo oscuro

-Conway se manténe en silencio para luego insultarme en voz baja antes de continuar -

¡Tienes múltiples personalidades y no estás en tratamiento anormal! ¡Los poderes generan adicciones o generan secuelas pas cuáles son defensas del cuerpo capullo debiste decirmelo... Yo pensaba que el tullo era ser gilipollas!

-de los comentarios de Conway, omitiendo los insultos se podía sustraer algo de información pero ahora mismo estaba más ocupado en pensar en cómo solucionar esta mierda -

Y ya que hago?

- dije alterado y algo cabreado sin saver mi posición actual -

Dejame hacer unas llamadas... Luego irás a un puto psicólogo! De momento no dejes que te lleven o te sacaran fuera de mi jurisprudencia capullo...

-sin más el viejo me colgó dejándome con una duda latente y es donde mierdas me escondo? En la ciudad sería muy obvio y en el norte también... Podría quedarme por esta zona...

Sin pensármelo mucho me acerco a una de las casas y empiezo a aporrear la puerta.

Al no escuchar respuesta habro la puerta con mi telequinesis, la casa era bonita y elegante a demás de estar muy organizada es posible que sea la casa de veraneo de algún ricachon la cual pueda usurpar unos días.

Sin pensármelo mucho busco la cocina y me sirvo una buena copa de vino y algo de comer.

Una vez he dejado de ratear comida busco la habitación principal la cual cuenta con una amplia cama de color blanca, color el cual predomina en la casa.

Y como si la casa fuese mía me tumbó en la cama con mi ropa sucia llena de barro manchando las blancas y suaves telas.

Era realmente cómoda y estaba tan fatigado que no tardaria en dormirme ... Sin duda tenía que aprender a controlar esa voz o acabaría conmigo.

Aunque ahora mismo solo podia centrarme en lo cómoda que era la cama y un pensamiento se hizo presente en mi mente antes de dormirme -

~Que bonito es esto en colarme en casas que no son mías~

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