«¡Sí!» -respondió mi subconsciente.
Procedí primero a quitarle la blusa… y lo logré. Ella se encontraba abstraída por el momento como yo… pero… si esto seguía más lejos… ¿estaría correcto hacerlo en la sala? Yo no quiero hacerlo en la sala… claro, sería diferente si hubiese sillones.
La cargué al nivel de mis caderas, y ella entrelazó sus piernas detrás de mí. Caminé hacia la habitación y cuidadosamente la acosté en la cama… la vi si blusa y en segundos admiré su bello cuerpo. Nunca vi tantas partes desnudas de su cuerpo… siempre fuimos reservados al respecto.
Quitó mi camiseta sin más. Y rápidamente se dirigió a mis pantalones. Le permití quitármelos a su manera y volví a sus labios.
Sus pantalones holgados eran tan holgados que ellos mismos se habían bajado poco a poco… hasta que yo les di un pequeño empujón para salirse de sus piernas.
Su piel al tacto de la mía era una combinación de energía que hacía que este momento nunca acabara y nunca quisiese acabar. Sus manos se encontraban alrededor de mi cuello mientras yo seguía dominando sobre ella. Mis brazos estaban a sus costados… ella tocaba mi espalda y bajaba a proseguir con mis boxers… pero un ruido fuera de la habitación nos detuvo.
Ambos miramos de golpe hacia la puerta. Al parecer alguien había entrado. Lucía asustada al igual que yo… ¿Quién habrá sido quien osa en interrumpir?
Se salió de mis brazos y caminó a la puerta colocando el seguro de ella. Al escuchar los tacones resonar con el piso finamente de madera suspiró aliviada.-Es Heather. –Susurró.
Mi corazón suspiró lleno de alivio.
-Esperemos a que se vaya… -Dijo al caminar hacia la cama y acostarse a mi lado. El colchón de la cama no tenía ninguna sábana por lo que sólo la abracé para que ambos nos relajásemos.
Sin darnos cuenta ambos quedamos completamente dormidos…
Día 94.
Amanecimos tan juntos y en la misma posición de anoche que me sorprendí de que ninguno de los dos se háyase movido.
Ambos tomamos una ducha y salimos a desayunar ya que habíamos guardado todos los cubiertos.
Aún no tenía resuelto el problema de su departamento pero lo hablé con ella mientras desayunábamos y ella prefirió buscar por su cuenta qué hacer. Me gusta que intente ser independiente.
Esa misma noche, después del salir del cine, regresamos a casa donde aún era la vivienda de ____.
La puerta de su pasillo específicamente, estaba abierta. Tal vez era Heather o tal vez era ese intruso de mi vida que no deja de molestarme. Y definitivamente acerté.
Al umbral de la luz y en el marco de la puerta se encontraba Leonel con unas flores. ¿Qué clase de sueño he tenido que se ha hecho realidad? Maldito canalla, ¿Quién lo manda a seguir aquí? ___ me pidió que me quedase atrás. Leonel no me había visto y aproveché que no lo había hecho y me escondí un poco. Ella caminó hacia él con un semblante normal, mientras él parecía enfermo a simple vista.-¿Todo está bien? –preguntó ella.
-Ya no me castigue más por favor… -Sollozó.Me divertía tanto el hecho de que esté pagando por lo que hizo, pero debo admitir que me siento mal por él.
-¿Castigarte?
-Regresa conmigo por favor…
-Leonel…
-Me haces falta. Tanta falta que he comenzado a creer que el karma me las está jugando bien… por favor ____ no dejo de pensar en ti, tienes algo que me hace necesitarte cada vez más.Maldito impostor. ¡Canalla! Déjala en paz…
-Leonel por favor…
-Supe lo del departamento. Vente a vivir conmigo… siempre te ha gustado mi departamento.Una punzada de celos invadió mi mente… ella ha estado en su departamento…
-Vete. Por favor –Dijo ella, con un tono tan suave que parecía imposible.
-Tendrás las puertas abiertas para el día que gustes un techo…
-Gracias… ahora, vete a casa, ¿Quieres?
-Prométeme que me llamarás…No. no te llamará.
Ella limpió esas lágrimas que se asomaban en sus ojos y lo abrazó.
Maldita sea, ya que se vaya. A llorar a otro lado chico, este sitio no es para lloriquear.-Te extraño. –Dijo él abrazándola aún más fuerte- soy un hombre nuevo, te lo juro… regresa conmigo.
-Tengo novio… -Se separó de él, y lo miró a los ojos- y lo amo Leonel… lo amo.Su rostro endureció. Limpió sus lágrimas e intentó calmarse.
-Te tengo que recuperar. Tú no puedes no ser parte de mi vida…
-Leonel por favor vete… cuando estés más tranquilo hablamos.¿Perdón?
-¿Significa que me hablarás?
-Lo haré. Pero vete ya… es tarde.
-¿Lo prometes?Ella lo dudó un poco. Miró hacia mí, y supe que el inconveniente era yo. Estaba siendo yo…
-Lo prometo. –Dijo al verlo.
-Gracias…La volvió a abrazar y salió del edificio. Ni siquiera me vio y ni notó mi presencia…
Estoy tan serio… no dejo de pensar en su mirada. En el rostro de ella mirándome a mí como pidiéndome permiso. ¿Yo soy tan mala persona como para que tenga que mirarme de esa forma? No puedo seguir así con esta culpa de creer que la retengo por mis miedos. Me gusta verla feliz y si es feliz aclarando cosas con Leonel y a solas… tendré que aceptarlo.-Amor… -Me interrumpió en mis pensamientos…
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Can mend your broken heart? | l.p.
Fanfiction"... Eres la primera persona que me ha hecho sentir poderosa, aunque no tenga súper poderes. Me hacías sentir como reina y sin necesidad de tener un reino. ¿Quién en su cuento de amor no quisiera que su novio peleara por ella? No eres el chico malo...