••
"Había una vez...
Un reino en el que un sabio rey gobernaba con mano de hierro pero con corazón ciervo.
Su pueblo amaba al rey, y el rey amaba a su pueblo, el cual era próspero y feliz. Las batallas eran mínimas y es que el rey no era fan de la lucha , ni de exponer a su pueblo.
Fue entonces, la reina concibió a luz un varón . El rey estaba feliz, y su pueblo igual al verlo a él feliz.
Pero...
Las tinieblas abordaron el reino.
Pestes. Hambruna. Sed.
Sangre.
El derramamiento de sangre dejó a muchas familias sin sus hombres e hijos.
Para esto, el varón hijo del rey contaba con seis años de edad, pero, su mente daba a la de hombro que deseaba el mal.
A los siete, su madre dio a luz otro hijo, el cual, su nacimiento trajo una paz al pueblo, por lo cual, el pueblo pidió desterrar al mayor.
El rey estaba dolido, no podía desterrar a su primogénito, pero tampoco debía faltar a la confianza de su pueblo que le depositaron.
Tras pensar por unos días se tomó una decisión...
•
Yuuichi leía una, y otra, y otra vez aquel libro que, anteriormente estaba en las manos de Víctor por Hayato.
Dio vuelta a la hoja y frunció el ceño, cerró el libro con fuerza y lo dejo aún lado en la mesa pequeña. Se puso en pie y observo por el ventanal.
Tras el cristal se veía la magnífica ciudad de Japón. Una gran ciudad de la cual, los mejores héroes surgían...
Rio
—Se a confirmado –musitó Hayato a Yuuichi quien asintió y dio un último vistazo la ciudad par darle la espalda.
•
Hanta seguía sin poder digerir lo que había ocurrido unos días atrás. Se removía en la cama sin poder pensar bien.
El director Nezu le dio una semana de descanso al chico para poder relajarse y digerir aquella información que recibió como balde de agua helada.
—Así como hay una historia de "Los cuatro Ases y la reina" está su contra parte –comentó Endou ya más entrado en el asunto.
Hanta había escuchado un poco sobre aquel relato cuando era pequeño, una especie de historia entre lo real y fantasía narrando la vida de cinco seres que pudieron ser los primeros en poseer un kosei, o por los cuales tuvieron ahora.
—Los puntos cardinales –soltó Haizaki cruzado de brazos recargado en la pared –una historia más vieja y dejada en el olvido.
—Haizaki es uno de ellos –habló tranquilo y sonriente Endou dejando congelado al otro —pero, eso no quiere decir que deba de ser del todo malo.
—Haizaki desde pequeño a estado en God Edén, se le a monitoreado y es directamente descendiente de uno de los cuatro puntos cardinales –explicó Nosaka —la diferencia entre unos y otros, es que en los cuatro puntos heredan, mientras que en los otros son seleccionados.
—¿Denki...?
—Puede que sea de uno de los dos grupos –atendió Endou a lo que Hanta quería decir.
—Denki un... ¿villano?