三十四

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Minutos antes...

—Si que es grande como lo describieron –habló Hyura tomando nota —Kaminari está en el dormitorio de la clase 1 A

Haizaki solo le seguía con las manos en los bolsillos —no entiendo por qué prefirió esta mierda que God Edén –resopló.

Todo estaba tranquilo aquella hora de la tarde, al parecer la mayoría de los alumnos ya se habían ido a casa por lo que sabían.

Río leve por aquel comentario —recuerda por lo que ha pasado, es normal que decidiera estar en un lugar más... de su gusto, iniciar de nuevo.

Ante el último evento causado por Denki, Aizawa llamó a Akio por el asunto, y este a otros colegas quienes tienen un poco más de conocimiento sobre el asunto. Una cadena.

—Algo no anda bien –frunció el ceño Haizaki y apresuró el pasó, siguiéndole Hyura.

Fue en el inicio de los escalones del segundo piso que vieron a Denki con Sero contra la pared y aquella aura oscura y negativa emanando de Kaminari.

—Omega Lock –de la palma de la mano salió una esfera roja que al tocar a Denki le encerró volviéndose el triple de su tamaño como también cambiar su color a oscuro y rodearse de tres cinturones negros a su alrededor.

Sero había caído al suelo de nalgas y fue que Kirina se le acercó ofreciéndole el chocolate.


La huída de Hanta se vio frustrada por un hecho que se volvió mayor. En la dirección de la escuela: el director Nezu, AllMight, Aizawa, MidNight, Kirina y Haizaki rodeaban a un nervioso Sero que, solo quería irse del lugar a su hogar con tranquilidad.

—Joven Hanta, no debe ni tiene por qué estar nervioso, no ha hecho absolutamente nada malo. Beba ese té de jazmín, me gusta su sabor, es muy relajante y...

Aizawa tosió leve, el pequeño director estaba hablando de más —directamente, eres quien más tiempo pasa con Denki últimamente, y, no eres ajeno al evento sucedido en Hokkaido.

Trago saliva, bajo la mirada y asintió —Denki ha estado muy agresivo, arisco con el grupo, ha perdido su brillo y esa esencia risueña que tiene –habló con desánimo —dice... que es más fuerte de lo que pensamos...

La puerta se abrió dejando ver al director de God Edén, Endou Mamoru y Nosaka Yuuma, con quien estuvieron en los eventos ocurridos.

Aquel hombre traía puestos unos audífonos de aviador naranjas, ropas de estilo maestro de educación física, una banda naranjas en la frente y su PSP en mano sin soltar.

Nosaka parecía ser más adulto, ropa formal, zapato lustrado y una mirada sería.

—Profesor Endou, a pasado tiempo –saludo Nezu con total confianza.

Se retiró lo audífonos y sonrío con una ancha sonrisa —es igual de pequeño –soltó como si nada —que hay –salido al resto.

—¿Y Denki? –cuestionó Yuuma.

—Lo tengo prisionero –respondió Haizaki —trató de hacerle daño a su compañero.

—No es... como Denki debe de comportarse –musitó Hanta —¿que es lo que le está pasando? ¿Qué está pasando?

—Denki solo está sacando aquel lado que le fue obligado ocultar del mundo –respondió Endou.

Yo contra el mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora