je volerai vers toi 💌 (Cole Mackenzie)

LIX

💌2 Semanas después💌

Salí temprano de nuestro hospedaje, hoy se supone que llega el correo de mis amigos. También iré a comprar regalos para ellos.

Abrí la carta de Anne y los demás, la verdad es que lo extraño mucho a ellos. Si pudiera los hubiese metido a todos dentro de mi maleta. Guarde la carta muy decorada, me imagino por Anne, en el mismo sobre. La otra carta es de Cole, la abrí y en unas cuantas palabras mi estómago se llenó de mariposas, es asombroso lo mucho que causa el en mi.

Guarde las cartas en sus respectivos sobres y entre de nuevo al hospedaje, después podré escribirles con tranquilidad. Mi madre está igual que cuando llegue, pero cada vez se ve más pálida y más delgada. Cada día me cuenta más cosas de su amor con mi verdadero padre, a quien tengo muchas ganas de abrazar.

Salí del hospedaje junto a una bolsa grande para poder llevar las cosas que compraré. Tengo planeado comprar un gran cuaderno hermoso y un bolígrafo para Anne, para Diana un disco de los más bellos conciertos de piano o tal vez algo relacionado a ello. Para Ruby algo rosado, tal vez un peluche, no lo tengo claro. Para Gilbert una brújula o algo relacionado a la medicina, para Moody un Banjo, se que le gusta mucho la música y para Cole algo para crear sus esculturas maravillosas otra vez.

Camine por las bellas calles de Paris, me encantaría que mis amigos pudieran ver todo esto. Logre comprar todas las cosas, además de comprar unos deliciosos pasteles para desayunar junto a mi tía Elena.

-¡Tía Elena ya llegue!-Dije entrando al hospedaje, son las 11:30 de la mañana, aún es temprano.

-Por acá estoy querida-Dijo la tía Elena saliendo de la cocina.

-Traje esto para que desayunemos-Dije mostrando los pasteles.

-Que delicia, aunque para ser sincera extraño los huevos de mis gallinas en Avonlea-Dijo la tía Elena sentándose.

-Yo también extraño mucho Avonlea.

-Yo creo que tu extrañas al pequeño Cole-Dijo mi tía Elena traviesa.

-Obvio que lo extraño, digo, ¿cómo no hacerlo?-Pregunte.

-Lo extrañas porque lo amas.

-No es nada parecido.

-Vamos sobrina, solo admítelo.

-Es que no hay nada que admitir, simplemente extraño su olor, su sonrisa y como se elevan sus ojos cuando sonríe. Su cabello, sus chistes, sus abrazos...

-Acabas de decir que lo amas sin decirlo.

-Bueno.

-¿Bueno? Emily por favor, date cuenta que lo amas.

-Es que yo no se que es eso.

-Vamos, debes de aceptarlo, porque muy enamorada estás. Se te ve a kilómetros.

-Bueno...tal vez si estoy enamo...

Me detuve de hablar, ya que entro de manera precipitada la señora James al hospedaje.

-¡Tienen que venir pronto! La señora Vincent está muy mal-Dijo muy alterada.

Tomamos nuestras cosas rápido y partimos hacia la casa de mis padres. Para ver a mi padre caminando de un lado a otro nervioso.