LXXIV

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Hoy es sábado, han pasado algunos días desde la muerte de Mary, Gilbert y Bash están preparando el funeral, en estos días no me he sentido muy bien para nada y a pesar de que le pedí a Cole que estuviera conmigo hoy, dijo que tendría que ayudar a Anne para ir a su búsqueda.
Se que lo hace por Anne, pero una parte de mi me hace creer que solo quiere ver a esa chica otra vez.

Por lo que me salí de la casa de tía Elena y me escabullí a mi antigua casa de nuevo. He llorado tanto que siento que me deshidrate. Estaba ordenando algunas cosas cuando sentí que una piedra chocó con la ventana, salí a mirar para ver a William abajo.

-¿Qué estás haciendo?-Pregunte gritando.

-¿Cuánto tiempo es para siempre?-Pregunto gritando.

-¿De qué estás hablando?-Pregunte gritando.

-¿Cuánto tiempo es para siempre señor conejo?-Pregunto gritando de nuevo.

Esta citando a Alicia en el País de las Maravillas, pensé que estaba borracho o loco.

-A veces solo un segundo-Grite riendo.

-¿Puedo pasar?-Pregunto.

-Claro, ya sabes la entrada-Grite cerrando la ventana.

Ordene algunas cosas de la habitación, además de arreglar un poco mi aspecto. Iba a bajar cuando vi que algo tocaba la ventana otra vez, la abrí para ver a William ahí.

-¡Por Dios, estás loco!-Dije riendo ayudándolo a entrar.

-Pensé que sería más romántico así, te he estado buscando-Dijo riendo.

-¿Cómo supiste que estaba acá?-Pregunte.

-Pues no estabas en tu casa, tampoco donde Cole, además de que no me atreví a ir donde Jerry, tú sabes cómo es el.

-De hecho, en un tiempo más debo ir allá, hoy me toca quedarme a dormir con papá.

-Después te puedo ir a dejar si gustas, estoy preocupado por ti-Dijo William tomando mis manos.

-¿Por lo de...Mary?-Pregunte temerosa.

-Digamos que no es fácil tener que afrontar dos muertes de personas importantes para ti. Además de que te guardas todo y eso no es bueno.

-Es solo que...-Dije balbuceando, no se como pero sabe exactamente como me siento.

-Ven acá-Dijo William extendiendo sus brazos.

Me lancé a ellos, la verdad es que intenté ser fuerte frente a Mary, frente a Bash y a Gilbert, si esto es doloroso para mi no me puedo imaginar lo doloroso que es para ellos.
Pero la verdad es que esto me afectó más de lo que pensé, porque fue igual que con mi madre, una enfermedad, unas cuantas semanas y listo.

-Se que las cosas que te puedo decir ahora quizás no valgan algo realmente. Que quizás ignores todo esto porque te duele, porque te sientes culpable, pero quiero que sepas y sientas que nada de esto es tu culpa-Dijo William tratando de calmarme.

-Es que es tan dificil, ¿por qué la gente se muere?-Pregunte.

-Cuando sacas una flor del jardín, ¿cuál sacas?

-La que me parezca más linda-Dije dudosa.

-Exacto, pero tu madre y Mary te están mirando de donde sea que estén, muy orgullosas de la persona que eres hoy en día. Que eres una chica maravillosa, genial, hermosa, que se preocupa por los demás y que le interesan los sentimientos del resto y eso no se encuentra en cualquier parte.

-No sabes cuanto te lo agradezco Will, y también agradezco que me digas "chica" y no "niña", no me gusta mucho ese apodo-Dije riendo.

-Eres más que eso, eres una princesa y yo solo soy un muchacho que se preocupa por ti.

Lo abracé con fuerza, es un muchacho de oro completamente, es una pena que tenga que irse para estudiar y ser un médico.

-¿Estás lista para ir donde tu padre o quieres quedarte un rato más?-Pregunto.

-Abrázame cinco minutos más y vamos-Dije sonriendo.

-Te abrazaría para siempre.

-Estos cinco minutos son para siempre-Dije molestándolo.

-¿No has leído Alicia?

-Tenía un ejemplar en Paris pero no lo traje.

-Ya veremos...

Will me abrazó durante cinco minutos más, hasta que bajamos para ir a la casa de mi padre junto a mis hermanos. Ellos también están preocupados por mi y no los veo hace días, al que veo más tiempo es a Jerry que es algo sobre protector.

Salimos por la entrada pequeña esta vez, no me veo capaz de bajar por la pared como lo hizo Will, y la verdad aún no entiendo como logró hacer eso. Caminamos mientras hablábamos sobre la feria del condado que llegará pronto, hasta que llegamos a la casa de papá.

-Te veré otro día "para siempre"-Dijo Will abrazándome.

-Te veré otro día conejo blanco-Dije sonriendo.

-Recuerda, eres demasiado grande, impasable-Dijo citando a la perilla de la puerta pequeña por la cual entra Alicia.

-Dirás imposible-Dije imitándolo.

-No, impasable, nada es imposible. Cuidate mucho, nos vemos en clases-Dijo William sonriendo mientras caminaba por el bosque.

Lo observé mientras caminaba con sus manos en los bolsillos, observando el bosque, la verdad es que es muy guapo y no puedo negarlo.

-¿Vas a estar ahí todo el día suspirando o vas a saludar a tu hermano?-Pregunto Jerry atrás mío asustándome.

-¡Dios me asustaste idiota!-Dije golpeándolo.

-¡Oye eso duele!-Dijo Jerry tomándose el brazo.

-Muy gracioso hermanito, ¿dónde esta papá?

-Esperándote, pero ayudame primero a alimentar a las vacas por favor-Dijo tomando mi brazo.

Camine con Jerry mientras saludaba a mis otros hermanos, sobre todo a Harry que me extraño mucho y se aferró a mi pierna. Alimentamos a las vacas, a los pavos y al perro "Bombón".

Después jugamos un momento todos juntos, Philipe ha molestado todo el día a Jean por las viceras que tuvo que sacar de un cerdo, sin un par de asquerosos.
Estaba con Harry en brazos cuando escuche a Bombón ladrar.

Camine con el para ver a Diana tirada en el suelo.

-¿Diana?-Pregunte.

-¿Diana?, ¿qué haces aquí?-Pregunto Jerry a mi lado.

-¿Emily?, ¿Jerry?-Pregunto Diana confundida, Jerry, papá y Jean se acercaron a ella.

-Lo siento, Bombón es encantador-Dijo papá disculpándose.

-¡Querida! ¿Te lastimaste?-Pregunto mamá Lissette.

¿Qué hace Diana acá?, ¿su madre sabrá que Diana está tan lejos de su casa? Ahora que lo pienso nunca había visto a Diana en una aventura sola, mucho menos para acá. Observe a Jerry, ¿habrá venido por el?.

je volerai vers toi 💌 (Cole Mackenzie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora