Karla llevaba semanas rara, su madre lo notaba perfectamente con solo mirarla, no lograba hacer que le contara y eso la tenía preocupada.
- Habla conmigo cariño, algo te pasa.
- Si, igual que halas tu cuando te pasa algo, ¿no? -reprochó cortante.
- ¿Yo? ¿Que me pasa a mi? -cuestionó Lauren.
- Nada, a ti nunca te pasa nada, mamá.
- Ey -llamó su atención Lauren, agarrando la cara de la menor para que la mirara-. ¿A que viene esto?.
- A que nunca me cuentas nada, pero yo te tengo que contar todo lo que me pasa siempre. Pues no funciona así.
- No entiendo, ¿Que es lo que no te cuento, a ver? -preguntó con tono paciente su madre.
- Lo de Camila, por ejemplo -soltó y su madre rodó los ojos.
- ¿Pero sigues con eso? ¿Por eso estás así?
- Pues si.
- No me lo puedo creer, es una simple libreta, hija. Olvídalo ya, en serio.
- Mamá es algo que es obvio que te afecta. Yo también me preocupo por ti y me molesta que no confíes en mi.
- Ay.... está bien -se resignó la Ojiverde-. Es alguien de mi pasado, ¿está bien?, una persona que fue muy importante para mi en un momento de mi vida y que bueno por... cosas... no mantuvimos el contacto pero me gusta seguir escribiéndole canciones.
- ¿ Y ya? -cuestionó alzando las cejas.
- Y ya, no te preocupes, no es algo que me haga daño o algo parecido -tranquilizo besando su frente-. Estoy bien, ¿si?.
- ¿No me vas a decir nada más? -preguntó y Lauren negó con una sonrisa triste.
- Los detalles no tienen importancia, fue hace muchos años y está más que olvidado.
- ¿Una ultima pregunta? -pidió.
- Dispara, pequeña chismosa.
- ¿Te gustaría volver a verla?
- No creo que fuera buena idea -descartó su madre tras un suspiro-. Karla, siento que lo hayas pasado mal por esto... era lo ultimo que quería. Pero igualmente, gracias, por preocuparte por mi. No todas las adolescentes salen de su burbuja para preocuparse de sus madres así que tengo que sentirme afortunada -trato de bromear.
- Siempre estoy aquí para ti mami.
Tras la conversación con su madre, Karla seguía pensando que su madre, dijera lo que dijera, necesitaba ese encuentro.
Y aunque casi había pasado un mes, ella intentaba no perder la esperanza de que la morena acabara habla dando su corazoncito.
Y así fue.No podía creerlo. Un mensaje de cinco palabras por parte de Camila Cabello había hecho que casi le diera algo de la emoción.
"¿Sigue en pie esa cita?" Fue la escueta pregunta que la artista le envió una madrugada del lunes, tras semanas dándole vueltas al tema.
Las joven respondió de manera más que afirmativa la mañana siguiente y simplemente le proporcionó un día, una hora y lugar; ella se ocuparía de la parte difícil, tal como había prometido.
Reservó una mesa para dos un viernes por la noche en uno de sus restaurantes vegetarianos favoritos de New York, ya que Camila le había informado de ese dato y ella quería que todo lo que estuviera en su mano saliera lo mejor posible.
- Mamá tengo una súper noticia -interrumpió Karla a su madre nada más entrar por la puerta luego de una larga jornada de trabajo-.
- Hola cielo, ¡Que contenta estás! -exclamo al verla sonriente-. ¡Dime!
- ¡He aprobado todo! -anunció abrazando efusivamente a su madre.
- Ay, que bien cariño, felicidades - se alegro su madre.
- Y para celebrarlo... ¡Te invitó a cenar este viernes!
- ¿Tu a mi? -se extrañó su madre-. ¿No debería invitarte yo? Eres tú la que ha aprobado.
- Bueno yo invito y tú pagas, está bien - propuso y Lauren acepto el trato, pasar tiempo con su niña siempre le parecía el mejor plan.
Karla terminó de arreglarse su elegante mono negro que ella había elegido para ella, para la, inexistente para ella, ocasión y salió a buscar a su madre. En menos de una hora tendrían que star en el restaurante.
- Mamá, ¿pero como vas a ir así? No, no y no ponte guapa -la regaño.
- Oye perdona, yo siempre estoy guapa -bromeó su madre-. ¿No crees que te has pasado un poco tu? No que fueras a cenar con Brad Pitt. Que vas conmigo.
- ¿Y te parece poco? -le reclamó indignada-. Aquí la que no va acorde era tu. Ponte ese vestido negro que me encanta, anda.
- ¿Como me voy a poner ese vestido, cariño?.
- Pues poniéndotelo, toma -le tendió la prenda de ropa, instándole a que se cambiara.
- No seas exagerada, voy bien así.
- Créeme que no vas bien así.
- ¿Pero donde has reservado, en un gran restaurante - rio Lauren.
- Es mi cena de felicitación, ¿no? Pues me haces caso. Ponte el vestido y luego ven a mi baño, que parece que has perdido habilidad para el maquillaje con la edad.
- ¡Oye! -protestó golpeando suavemente el trasero de su hija con la camiseta que se acababa de quitar al cambiarse de ropa con la insistencia de su hija-. Con tu madre no te metas, no vaya ha coser que vas a terminar cenando sola.
- Venga que llegamos tarde a la reservación -la apresuro, chequeando la hora en su móvil-.
- Ya voy, tranquilízate, ¡Cualquiera diría que vamos a celebrar tus buenas notas!.
____________________________________
Espero estén disfrutando del libro.
Estaré actualizando poco ya que después del huracán que hubo aquí tenemos poco tiempo y muy mala señal en la red y el internet.
- Su escritura.
![](https://img.wattpad.com/cover/234789830-288-k911316.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Karla Michell
FanfictionMichell no Parara hasta descubrir quien es esa Camila a la que su madre le escribe canciones desde hace años a escondidas. Fanfic Camren Adaptación