Siempre fuiste tú #2 Saga Amor Destinado

Maratón 2. Capitulo 50: Desacuerdos

Estoy feliz, Jorge acaba de llamarme para decirme que el pequeño Julen ya ha nacido. Me alegro tanto por Celia y él. En unos meses llegará el bebe de Emma y Max. La pobre lo está pasando un poco mal este primer trimestre del embarazo. Mia está feliz cuando le he dicho que esta tarde iremos a conocer al bebé.

- ¿Le puedo hacer un dibujo?: Adoro que quiera ser tan detallista.

- Por supuesto. Le hará mucha ilusión. Pero lo harás después, ahora iremos al centro comercial a comprar un regalo para Celia y para el bebé. Después vendrá papi e iremos a comer. 

- ¿Puedo hacer el dibujo en el restaurante?- Mi hija a veces es más lista que yo.

- Coge tus colores favoritos y unas hojas.

- Me llevaré la mochila que me regaló al abuela.- Se va corriendo a su habitación.

Mientras Mía llena su mochila de colores, guardo un sacapuntas y una goma en mi bolso, conociéndola sé que no lo habrá metido en su mochila. Suerte que soy precavida. Aprovecho para meter un pequeño neceser con tampones y compresas, hace un par de días me vino el periodo y me gusta llevar siempre algo de higiene femenina en el bolso. 

Me miro en el espejo del recibidor para retocar un poco con los dedos el labial rojo. Llevo varios minutos esperando a Mia, esta decidiendo que zapatos se pone. Lleva un tiempo que quiere elegir ella misma su ropa. Hay días en lo que va muy bien y otros en los que parece que puede llevar una zapatilla de cada color. En mi opinión es bueno que decida y experimente a ser como ella quiera.

- ¡Mia vamos!

- Ya voy mami.- Corre hacia la entrada de casa.

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Pido a la dependienta que envuelva el regalo para Celia, le he comprado un vestido de lactancia y al pequeño Julen un conjunto de pelele con gorrito en color amarillo, una ternura. Me ha dado tanta nostalgia de cuando Mia era pequeña. Recuerdo como si fuera ayer cuando fui con Alma a comprar su primer conjuntito, no sabía aún el sexo y me decanté por un conjunto en color verde menta, era todo tan pequeño. Fue lo primero que le puse a Emma al nacer, estaba tan tierna. Ay, creo que me estoy emocionando.

-¡Papiiiii!- Mi corre directa a los brazos de Enzo quien no duda en llenarla de besos.

- Hola cielo- se acerca a mi para besar castamente mis labios. Aún no me ha acostumbro a besarlo delante de Mía. Ella lo lleva tan natural- ¿Qué tienes?

- Ay nada. Que ver toda esa ropa de bebé y me acordado de cuando ella era un bebé- Acaricio el rostro de Mía.- y bueno me ha entrado un poco de nostalgia. Me he acordado de cuando fui con Alma a comprar su primer conjunto.

- Princesa. Donde te apetece ir a comer?- Le pregunta Enzo a Mía.

- Quiero hamburguesas.

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Saco el móvil del bolso para hacerle una foto a Mia y a Enzo. Ambos están concentrados el dibujo de Mia y tienen exactamente la misma expresión de cara. Es muy gracioso. Ahora que conviven más, me doy cuenta de lo mucho que se parecen tanto físicamente como en carácter.

Hago un par de foto mas y cierro la cámara.  Tengo un mensaje de Claudia. Quiere hablar conmigo del cumpleaños de Mía. Queda poco para que esta princesa cumpla ya 5 años.

- ¿Puedo ir a jugar a los toboganes?- Nos pregunta Mia a ambos.

- Si. Cariño.

Desde que hemos salido de la tienda, Enzo está extraño, algo distante, muy seco conmigo.