✞𝕾𝖊𝖔𝖓𝖁𝖎𝖑𝖑𝖆𝖌𝖊✞ ｎｃｔ•

✞𝕯𝖎𝖒𝖊𝖓𝖘𝖎𝖔𝖓✞

—¿Dónde están Jeno y Jaemin?— preguntó Yukhei.

Renjun, como habían esperado, había desaparecido después de cruzar el portal, sin embargo entre los presentes tampoco había rastro de la pareja que les había acompañado.

—Quisa escaparon mientras tú andabas de Romeo— le contestó Johnny— no puedo creer que de verdad estemos haciendo esto.

Seo entonces había aprovechado y había noqueado a Doyoung con una llave que le hizo perder el conocimiento, de tal forma que afortunadamente no pudo escuchar cuando Renjun le había dado las indicaciones de que hacer a Lucas.

—Sus caballos siguen aquí...— mencionó el más alto— ¿Crees que...?

—¡Ya no importa!— le interrumpió John— dónde quiera que estén seguro están mejor que nosotros, es momento de huir.

—¡Pero...!

—¡Lucas!— llamó firme el coreano señalando entonces al montón de defensores a lo lejos que me iban a toda velocidad en dirección hacia ellos— los buscaremos después, ahora tenemos ese para nada pequeño problema que si no resolvemos nos costará más que nuestro trabajo.

Wong simplemente suspiró. No estaba contento de no saber dónde estaban los chicos exactamente, pero John tenía razón. Ahora no había más tiempo que perder, así que rápidamente subieron a sus caballos y cruzaron la puerta que daba a la capital, dejando a Jaehyun y Doyoung tirados, con Johnny sintiendo la culpa subiendo por cada parte de su ser por haber traicionado a Jaehyun, su mejor amigo y sobre todo, por no haberle seguido hasta el final.  Supieron que el portal debió cerrarse en cuanto Renjun cruzó pues a ellos no los transportó a ningún lugar, si no que los dejó en la capital, dándoles tiempo de sobra para cerrar tras ellos la puerta y bloquearla momentaneamente para que les diera más tiempo de huir.

Una vez se sintieron más seguros, llegaron a la conclusión de que el portal debió llevarse a Jaemin y a Jeno junto con el artesano pues ambos estaban cerca y por alguna razón ellos terminaron siendo víctimas de una mala situación.

Avanzaron rápido y rodearon la ciudad hasta llegar a la puerta que daba con la aldea del agua, de esa forma los buscarían un rato en la capital antes de buscarlos en las demás aldeas. Cruzaron sin problemas y se dirigieron al punto establecido por Huang. Justo ahí, lograron ver a Haechan mirándolos con los ojos bien abiertos y aparentemente con desconfianza.

A su lado estaban dos chicos más con prendas del templo aire. Todos observan atonitos.

—Llevenme a mi— fue lo primero que dijo Donghyuck— yo oculté a Renjun, ellos no tienen nada que ver.

Desde el principio se mostraba así de fiel a sus amigos, Lucas entendió porque Ren le encargó algo tan importante.

—¿Haechan?— inquirió Johnny— no venimos a arrestarte, en realidad veníamos a unirnos a ustedes.

El mencionado soltó un bufido parecido a una mofa, pero demasiado vago para considerarse divertido.

—Si claro, y yo les voy a creer.

Lucas entonces extendió su palma, mostrando en ella un collar de oro, el mismo collar de Renjun, el que Taeil le había dado al chino.

—¿Quién te dió eso?— dijo el moreno intentando arrancarle la pieza de las manos, pero Yukhei fue más rápido y se alejó.— eso no es tuyo, debes devolverlo.

—Renjun me lo dió.

—¡Eso no...!

—Me dijo que sería la única forma en la que confiarías en nosotros, también me dijo que te buscaramos aquí y que dejó una nota con todas las instrucciones bajo tu almohada.