MI TENTACIÓN

Capítulo 24(+18)

En el capítulo anterior......

BEN:__Te deseo tanto, que no puedo pensar con claridad.

CAMI:__Entonces, ¿qué estamos haciendo aquí mirando a la luna?

BEN:__Eso mismo pensaba yo -me aparté de la valla-. Vamos.

            ************

Benja.....

Ir montado a caballo en mis condiciones no era lo más inteligente del mundo, comprendí al bajar por el sendero, pero tardaría demasiado en llegar andando hasta el río.

La luna iluminaba el camino y mostraba una excitante imagen de Camila balanceando las caderas al compás del trote de Centella.

Cuando doblaron un recodo y la vio de perfil, se convenció de que no llevaba sujetador.

Y entonces se quitó la camiseta.

Él apenas podía creer en lo que estaba viendo y se preguntó si no estaría teniendo una potente fantasía.

Un momento más tarde, la camiseta salió volando en dirección a él y la agarró apenas a tiempo de que no cayera al suelo.

Camila se volvió en la silla y vi una impresionante imagen de sus senos bañados por la luz de la luna.

BEN:__¿Qué estás haciendo?

Incluso con la distancia, la provocación de su sonrisa era evidente.

CAMI:__Poniéndote caliente.

BEN:__iYa estoy caliente!

Retorciéndose en la silla, para ser más exacto. Jadeando, agitándose y muriéndose por aliviar aquella agonizante necesidad de estar en lo más profundo de ella.

CAMI:__Entonces más caliente.

BEN:__¡Maldita sea, Camila!

Su camiseta estaba impregnada del olor de su colonia y de algo aún más erótico, el aroma de Camila excitada y lista para el amor.

La apretó en un puño y se la llevó a la nariz. Oh, Dios... aquel aroma.., el recuerdo de estar echado entre sus muslos saboreándola lo asaltó de forma febril.

BEN:__¿Por qué huele tu camiseta tan... bien?

CAMI:__Un pequeño truco que he leído en uno de los libros.

BEN:__¿Qué truco?

CAMI:__Oh, se trata de buscar una forma de mandarle tu... propio perfume especial a tu amante. Dicen que funciona mejor que el aroma de cualquier colonia.

La miré encendido de deseo.

BEN:__Puede que tengan razón. No llevas bragas debajo de los pantalones, ¿verdad?

CAMI:__No.

BEN:__Entonces te has quitado la camiseta y la has puesto...

CAMI:__En un sitio muy especial y después te la he tirado. ¿Sabes? El movimiento del caballo es muy... agradable.

Lance un gemido.

BEN:__Ten piedad de mí, Camila. Soy un hombre desesperado.

CAMI:__El libro dice que la anticipación lo es todo.

BEN:__Sí y también te mata.

Escuché el gorgoteo del río. Ya casi habíamos llegado y los caballos se dirigieron a la conocida orilla.

Bajé la mano, saqué la manta de la bolsa de la silla y metí allí la camiseta.

No tenía intención de perder el tiempo en cuanto llegaran al río.