Maratón 2/3 (+18)

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Cami.....

Me senté con las piernas cruzadas en la manta y esperé a que Benjamin subiera a mi lado.

La noche era cálida, pero me sentía estremecerme de delicia.

Estabamos sólos, como cuando eramos pequeños, apartados del mundo y listos, en cierto sentido, para jugar.

BEN:__El cielo está tan limpio -me susurró al saltar a mi lado. Vamos a echarnos de espaldas para mirar las estrellas como solíamos hacer.

CAMI:__¿Y no hacer nada más?

Lo deseaba intensamente.

Benjamin me dio un beso en plena boca.

BEN:__Te contaré mi sueño.

CAMI:__¡Estupendo! -estire la falda debajo mio y me eché en la manta para mirar al firmamento-. Estrella Polar, la Osa Mayor, la Osa Menor...

Benjamin estaba echado a mi lado con el brazo y el muslo rozando el mio.

BEN:__Orion, las Siete Hermanas.

CAMI:__¿Y?

BEN:__Y nada. Ésas son todas las que sé.

CAMI:__Pues yo creía que habías dado clases de astronomía.

BEN:__Aprendí algunas cosas para el examen, pero ya las he olvidado.

CAMI:__Cuéntame tu sueño.

Él se quedó en silencio por un momento.

Entonces, con un leve suspiro de rendición empezó.

BEN:__A ti te habían invitado a una fiesta de Halloween y me pediste que te prestara a la yegua porque querías aparecer como lady Godiva.

CAMI:__¿Y tenía el pelo largo como ella?

BEN:__Hasta la cintura. Querías practicar sin el disfraz para ver cómo te sentías antes de ir a la fiesta, así que me pediste que te acompañara al camino del río. Montaste a pelo con un vestido suelto sin nada debajo. A mitad de camino, te quitaste el vestido y lo tiraste a los arbustos.

Me estremecí. Era una imagen muy sexual.

CAMI:__Pero el pelo me tapaba, ¿verdad?

BEN:__No del todo. Y ya sabes cómo es el viento en el sendero, así que cuando iba detrás de ti, vi varias imágenes de lado. Estabas... estabas preciosa. Y montada, así, balanceándote sobre el lomo del caballo, empezaste a excitarte.

CAMI:__¿Y cómo podías saberlo?

BEN:__Tenías la piel sonrojada, la respiración más agitada y... los pezones muy erectos - Benjamin me agarró de la mano y se aclaró la garganta.

Aquello describía lo que  estaba sintiendo en ese mismo momento.

Como Benjamin no seguía, pregunté:

CAMI:__¿Y te despertaste entonces?

BEN:__No.

CAMI:__¿Qué pasó?

BEN:__Que tuviste un orgasmo.

CAMI:__¿Qué?

BEN:__Lo que me excitó tanto que te desmonté del caballo y te hice el amor allí mismo en el suelo.

No estaba segura de quién estaba apretando más, si yo a él o él a mi.

CAMI:__¿Fue bonito?

BEN:__Ésa no es la palabra. Fue salvaje y primitivo, sin barreras. Te mordí en el cuello y tú me clavaste las uñas en la espalda. Fue... fantástico.

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