Alfas y Omegas

Clan Danvers

El ambiente es tenso, sentados alrededor de la mesa de juntas, Lena se convierte en su principal blanco. 

Merodeo el lugar con pasos ligeros y veloces. 

Nadie habla, mi curiosidad y deseo pican por entrar al lugar. 

Se escucha el ligero remover de las sillas y me detengo en mi andar esperado algún cambio. 

Es mamá quien se asoma. Encontrándome quieta en el lugar. 

-Kara, cariño, tu y yo tenemos que hablar….  Sobre unos asuntos que te conciernen.

Sale de la habitación y me tenso. 

-Mamá. Los dejaras ahí solos. 

-Bueno, ellos tienen que tratar otros temas. Muy diferentes a los nuestros. 

-Pero… 

Mis ojos se llenan de lágrimas. 

-Siempre  terminan peleando. 

-Cariño, es su naturaleza. 

Y en este particular caso. Algo más. 

La miró sin entender. Un gruñido particularmente alto se oye al otro lado de la puerta. Mi cuerpo sensible reacciona ante ello, apretando las piernas y restregandolas. 

-Vamos. 

-Quiero estar aquí. 

Tomándome por el hombro me guía al otro lado de la casa. Su olor, no puedo dejar de pensar en su picante olor. 

Madre se sienta a mi lado y toma una de mis manos antes de empezar a hablar. 

-Creo que Alex ya te dijo que entraras en celo. 

Asiento. Por un momento me distraigo de la plática que está teniendo lugar en la otra ala de la casa.

-Bien. Supongo que tunes preguntas. 

-Sí. 

-Esta bien. 

-Bueno, pasa diferente para cada persona. En tu caso, lo que lo desencadenó fue el alfa suprema. 

-Como? 

Nunca la vi, solo durante el festejo de hace 7 años. 

-Exacto, en ese momento no se hubiera podido dar. 

Eras una niña. Ahora estás más madura. 

-Por qué no antes. Todos lo tuvieron a los 20 años incluso antes. 

-Bueno… Tu Padre a veces es un escéptico y no quiere entender esto. 

La luna se encarga de juntar a las parejas. 

-Yyy 

La incitó a seguir, su mirada se vuelve distante y su mano se aprieta a la mía con sentimiento y dolor. 

-La luna te seleccionó desde antes de tu nacimiento para ser su pareja. 

La miró con asombro aún sin entender.

-Hay una razón por la que tu pelaje es más brillante y único entre todos los clanes. 

El cambio de tiempo y su actual presencia  despertaron en ti el deseo que ahora corre por tus venas y en cada fibra de tu cuerpo. La estás llamando y ella entiende hasta cierto punto esto. Las leyendas que hablan de ella son ciertas. La luna la bendijo, como a ti te bendijo el sol. 

Hace años antes de siquiera concebirte, conocí a una cachorra de sangre pura. 

Perdida en el bosque, su pelaje negro como la noche, no poseía ningún toque ni mechón plateado. Era negro absoluto. Sus ojos resplandecían con fuego en la mirada. Eran de un verde esmeralda.