Desde lo más profundo de tu coño

Comienzo de un todo. -II parte-

Éste -como siempre- se fuma un cigarrillo cada que puede, con sus 22 años aproximadamente ha sido bastante reservado con respecto a su entorno. No suele hacer conversación a diferencia de nuestros otros vecinos, a mi en lo personal suele saludarme y preguntarme como me ha ido en el día, pero no aguanto el olor a tabaco que siempre emana y prefiero alejarme cada que puedo.

Ambas sabemos que ese hombre no llegará a ningún lado si continúa así... La verdad, no sé quien podría llegar lejos con semejante adicción, creí que las drogas son las más malignas al referirnos a adicciones -pues así nos lo dejan ver- pero en mi opinión creo que no.. El cigarro te mata lentamente... Suavecito, se encarga que ni lo sientas al ingresar a tu cuerpo, y te carcome... Es como una plaga, ingresa y es muy difícil expulsarla -claramente hablamos de una adicción avanzada como la de nuestro vecino- pero en fin, en casa siempre fuiste tu la que fumó mami, y nunca comprendí realmente porqué... Siempre supuse que fue por estrés, luego mi hermana -la madre de Mía y Rachel- adoptó éste hábito, sin embargo mi hermano nunca a notado interés por éste y yo tampoco, aunque no puedo negar que he probado a ya mi corta edad y no estoy orgullosa de escribirlo, pero si puedo decir con mucho orgullo que no me causó ninguna impresión, la monería se pasó rápido y mis 5 minutos de chica mala se esfumaron. ¿Porqué siento esa pequeña impresión de ser observada?

- Feliz año nuevo... - sonó en un ligero eco por el edificio.

- ¡ME DISTE UN TERRIBLE SUSTO CARAY! Digo... Yo... - Había olvidado por completo la presencia de este chico- Feliz año para ti también... Eh... Ahm - oh, buen trabajo Taylor ¡ni su nombre te acuerdas!

- Faiver. El nombre de... -oh no, esta mirando el diario...- tu reservado vecino de 22 años del cual te alejas porque no aguantas el olor a tabaco que emana.

- No, eso... No es nada. No me refería a ti.. Es decir, me refería a otro vecino fumador de 22 años (? -¿¡ES ENSERIO TAYLOR!? ¿¡ES LO ÚNICO QUE SE TE PUDO OCURRIR!?

- No te preocupes, Taylor... ¿Cierto? -Asentí- la próxima vez que me acerque a ti me aseguraré de llevar un chicle de menta.

- Y-Yo -tartamudeé- no quise decir.. Tu sabes.. Que tu aliento.. -agaché la mirada- lo siento. -Para cuando pronuncié esas palabras, él ya se había ido.

Excelente, es la primera vez que mantengo una conversación de más de 5 minutos con él y ya metí la pata. No es que busque su agrado es simplemente el hecho de querer ser amable con todos, mamá tu me enseñaste a tratar de llevarme bien con las personas, y mira lo estúpida que he quedado delante de él. Tal vez... Aparenta ser un don nadie pero quien sabe ¿que tan mal puede estar? La última vez que hablé así de tanto con él fue cuando falleció su madre.