Miles
Se vino de la actividad familiar por mi, no se si estaba enojada conmigo o que, seguro piensa que soy un maldito desgraciado que quiere hacerle daño, no entiende que cada vez que le digo lo linda y hermosa, bella, y que aunque apenas la conozco la adoro, lo digo de corazón, porque la amo, ella piensa que yo soy como los otros, y tengo miedo, voy a llegar a una nueva escuela, y me van a rodear los buitres y si ella piensa que soy como ellos.
Apenas llegamos al hotel, presentó la tarjeta de débito y dejó la cuenta abierta, me dijo que comiera lo que quisiera que ella se quedaría en su habitación por cualquier cosa.
Esta enojada o no se, se siente mal, tiene miedo a amarme, o de todo no quiere nada conmigo.
Entré a su habitación por la ventana, porque cuando la conocí, fue perfecta, ella era hermosa, y no le importó que parecía que llevaba pijamas, ella estaba tan ocupada con ella misma que no le importa como la miren los démas, pero si le importan los demás, o por lo menos eso me hizo creer al venirse conmigo, pero lo único que ella quiere es ver mañana a Thomas y Thomas y Thomas, parece como enamorada, yo no se como será el tal Thomas pero ya me cae mal.
Trató de dormir pero tengo hambre así que me voy al restaurante del hotel y pago con mi tarjeta, ya también pago mi estadía, no quiero seguir dándole problemas a Sofi, si pudiera alquilo un auto y me voy sin que ella sepa nada.
Regreso a mi habitación, y me doy cuenta de que esta entreabierta, como entró alguien.
Pasé temeroso de encontrarme con un asesino o con quien sea en mi habitación, pero me llevé la mejor sorpresa de mi vida, era ella, Sofi había entrado a la habitación yo no se como, pero estaba ahí sentada en la cama, esperándome.
- ¿Como entraste?
- Te vi al salir, luego entraste al restaurante entonces fui y le dije al joven de recepción que mi novio estaba dormido y necesitaba entrar y me abrió y entré.
- Eres Terrible - dije mientras me sentaba en el silloncito de la habitación.
- Quiero pedirte una disculpa, en serio, la verdad es que casi no te conozco y no se que pensaste de mi ni nada, solo que tengo miedo a que actúes diferente y no me quieras ni hablar llegando a el colegio, ni tampoco quiero que me veas como tu sombra la chica que siempre le sigue, ni nada de eso, quiero que me veas como una amiga, y que seas parte de mi grupo, Thomas y Kate son súper especiales, ellos te caerán excelente.
- Otra vez Thomas, mira, ya el niño me tiene cansado, yo solo que me enamoré de tí, que te amo, y si pueden ser celos, pero no me cae nada bien ese Thomas.
- ¿Estas Celoso?
- Si, te lo estoy diciendo, suelo ser muy posecibo, y su no quieres nada conmigo tranquila, no hay problema pero nada me llenaría más de dicha que pensar que tu también me quieres.
- Yo te quiero, pero creo que es muy pronto para decir que te amo.
- Déjame decirte algo, una vez, tenia ocho años y una chamaca me rompió el corazón con mi mejor amigo, desde ese día no tengo a nadie en serio, pero una chica con mirada perdida, camiseta de los Beatles y pantolón escoses, se robó mi vida, mi corazón y no creo ser capaz de amar más a alguien de lo que en estas 24 horas la e amado a ella, yo se que es muy pronto, pero lo único que quiero es que sea mía, y cuando llegue al colegio el lunes no cambie su manera de pensar de mi, que no me haga convertirme en el bicho raro, y que no me haga tener un triangulo amoroso con el tal Thomas.
Se fue acercando a mi, puso sus abrazos alrededor de mi cuello, yo cerré los ojos.
- Solo nunca pienses que soy una puta, porque yo quiero exactamente eso que tu quieres que pase.
Y luego se eso sentí sus labios rosar los mios, eran suaves, luego ella comenzó a abrir su boca y yo sin miedo introduje mi lengua, y luego ella me mordío el labio, la verdad era que el beso estaba muy excitante, ahí los dos sentados en el pequeño sillón, en un hotel, ella en mis piernas, con los abrazos alrededor mio, mis dientes en mis labios, mi boca con su boca, pero si hacia algo más era obvio que me creería un puto desgraciado.
- Te deseo Miles.
En ese momento mi camiseta de John Lennon calló al piso, no era yo, era ella, lo único que pensaba en este momento era que ella no me usara y que luego me cambiara por el tal .
Ella empezó a bajar la mano por todo mi pecho, era suave, sus movimientos eran rápidos, nunca nadie me había hecho sentir como lo ella no estaba logrando,de hecho yo nunca había estado con nadie, no se ella, pero para mi ella era la primera. Bajó sus manos y me apretó el trasero, y por acto reflejo yo me puse de pie, la tomé de la cintura y la tiré a la cama, luego me coloqué sobre ella y comenzé a darle besos por el cuello, la clavicula, le quité la camiseta, ella con sus mismos pies se quitó los zapatos y las medias yo hize lo mismo, ella que quitó la faja, y me atrajo a ella, me comenzó a besar mientras sus manos sacaban el resto de mi ropa, y luego yo hice lo mismo, y ya lo siguiente fue magia, lo que sentí con ella fue unico, entrar en ella, fue excelente, y ella pensaba lo mismo.
- Te amo Miles.- eso fue lo ultimo que dijo.
ESTÁS LEYENDO
Mi Sexy Vecino
RomanceMi vida solía ser aburrida. La escuela, mi familia, la vida era común y corriente, siempre llevando las cosas con orden y calma, sin salirse de la estructura, hasta que llega Miles... un chico con la capacidad de poner mi mundo al revés. La gran nov...