Cansancio y otros tipos de Males

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Llegue a mi habitación y sin pensarlo me deje llevar por mi cansancio y me tiré a la cama, que saqué las Vans y me acomode en las sabanas como un capullo.

En mis sueños salia corriendo detrás de Miles y un chico nos seguía luego a lo lejos se escuchaba una patrulla de policía y volví a ver hacia atrás y el chico que me seguía era Matt y estaba esposado y un policía lo tenía atrapado, seguí corriendo y corriendo hasta que el celular comenzó a sonar, era mi celular y era Hans? Hans, tenía años no verlo, era un milagro que todavía lo tuviera en los contactos, podían ser las 8:30 p.m pero para mi Hans debía morir como se le ocurre llamar mientras dormía.

-Sofia de mi vida- me dijo apenas le contesté- Espero no haberte interrumpido.

-Estaba durmiendo Hans, estoy bastante cansada que necesitas- le contesté mientras me rascaba la cabeza.

-Tenemos próximos conciertos vida mia y necesitamos una chelista.

Entonces era eso, otra reclutacion para la orquesta sinfónica.

Hans era un compañero y amigo de la escuela de música, que había estado de acuerdo en que yo me retirara de la orquesta para poder estar en paz conmigo misma y tuviera tiempo con mi familia, pero era obvio que extraña mi chello, algunas veces lo sacaba adoraba el chello y no lo dejaría nunca pero quería por lo menos un descanso de un semestre.

-Sofi me dices?- Hans seguía en la línea.

-Diles que si, cuando es el primer ensayo.

-Sabía que a mi no me dirías que no querida, y te espero el jueves a las 5, estaremos muy felices de verte.

-Okay hasta luego Hans.

- Chao bella te dejo seguir durmiendo.

Era la 5 vez que me llamaban de la escuela, el primero fue mi profesor, luego el primer violín, me llamó mi maestra de solfeo, el mismísimo director y ahora Hans y a el no le podría decir que no, aunque todos se preguntaban porque yo no quería seguir en la orquesta nunca dije nada, pero tenia tres razones la primera quería ser profesional en el campo y entrar a la orquesta sinfónica nacional, la segunda más tiempo con mi familia ensayaba demasiado, y ya no tenía tiempo, y la tercera era Sebastian ya no podía seguir teniéndolo cerca, cada vez que lo veía que dañaba más y bueno tenia que sacarlo de mi cabeza, pero ahora tengo a Miles, ya no hay complicaciones no creo que las haya.

Seguí durmiendo hasta que fueron las 6 de la mañana.

Hoy me había peinado con era trenza de medio lado con el flequito salido, una blusa gris olgada de manga tres cuartos de Forever 21 un pantalón negro unas botas cafés una chaqueta del mismo color y mi collar de Sinsajo, hoy me sentía Katniss Everdeen.

Fui a desayunar mi avenita de todos los días y me encontré a mis padres tranquilos desayunando, desayune luego fui por mis cosas y salí, no había llegado Miles y hoy apenas era el segundo día de clases...

Estaba arrancando la combi cuando entró y se subió al asiento del copitolo.

- Buenos días mi vida disculpa la tardanza- luego me besó la mejilla y yo arranque y nos fuimos al colegio.

Cuando llegamos de la mano todos lindos vimos a muchas personas en la entrada viendo un cartel, que anunciaba el próximo concierto de... La Orquesta Sinfónica local y en primera plana salía yo tocando mi Chello y decía que yo regresaba a la orquesta.

Sentí la mirada de Miles, nunca le había dicho nada de la orquesta ni del chello ni nada, el solo me había contado su gran historia de las peleas pero la verdad me sentía culpable, aunque tenia poco tiempo de conocerlo el se merecía saber todo.

Seguí caminando con el de mi mano y luego el no siguió caminado me volví a verlo, estaba serio.

-Ayer hablé con un tal Hans Parker lo conoces verdad?

-Claro que lo conozco es mi amigo.

-Me dijo que su primer paso era que entraras a la orquesta otra vez, de momento no comprendí nada, me dijo que estaba planeando algo con un tal Sebastian porque nadie le quitaba a su chica.

Dios mio, Sebastian y Hans? Sebastian contra Miles peleando por mi? Eso era nuevo.

-Tuviste algo con ese chico?- me preguntó Miles.

-No, nunca, estuve enamorada de el por más de un año pero es cosa del pasado, por eso dejé la orquesta dejé todo para no verlo más.

-Lo escuché muy seguro- dijo Miles con una cara de tristeza, mientras cerraba sus hermosos ojos como queriendo llorar- Solo no quiero perderte Sofia, eres lo único bueno que e tenido en esta vida- sin dudarlo me acerqué a el y lo besé- Ahí estarás conmigo, en todos los conciertos en todo porque tu eres mio y yo soy tuya y ninguna persona nos va a separ oíste?- no dijo nada seguía con sus ojos cerrados- por favor Miles quiero ver esos ojos que me matan y esa sonrisa que amo- abrió sus ojos me miro me abrazó me alzó y comenzó a dar vueltas riendo, hasta que los mareamos y nos fuimos a clases.

Mi Sexy VecinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora