|¿Quizás Sea Para Siempre?| [TERMINADA]

|27: Confrontación|

[Omnisciente.]

Amaimon se dirigía a paso rápido entre el reino de las tinieblas, se podía escuchar como algunas de las sombras susurraban, como si hablarán entre ellas. Él jamás había entrado al reino de Azazel pues a pesar de ser parte de Gehenna, ningún demonio se atreve a pisar dicho reino, claro a excepción de Satán.

Él miró con suma atención aquel castillo envuelto en sombras y hojuelas de flamas, con paso decidido Amaimon cruzo aquel largo puente, cada paso que daba parecía como si el fuego quisiera tragarselo pues este ardía intensamente mientras que las sombras parecían atrapar sus pies.

Cuando por fin llegó a la entrada de aquella sombría arquitectura, él se detuvo bruscamente cuando dos lobos de las sombras obstruyeron su paso.

—"A un lado estúpidos perros."

"Más respeto demonio, no estás bajo el cuidado de tu padre."—Gruñó uno de los lobos mostrando sus dientes.

Antes de que alguno pudiera hacer algo las puertas se abrieron dejando a la vista al mismísimo rey de las tinieblas; Azazel.

—"Aren, Diel; quietos."—Dijo el rey con una sonrisa cínica.—"No es manera de saludar así a nuestro invitado."

Los lobos obedecieron para después postrarse a cada lado de su amo, y la imagen solo logro intimidar un poco más a Amaimon.

—"Azazel, vine porque quiero hablar contigo."—Habló el peliverde. Azazel se encogió de hombros para girarse sobre sus talones.

—"Pues tendrás que hacerlo mientras termino de hacer mi papeleo, varios humanos están haciendo pactos."

Amaimon asintió y siguió de cerca al rey más no era el único ya que los dos lobos los seguían de cerca.

—"Planeo un ataque,"—Empezó a decir Amaimon cuando Azazel se sentó en su trono con varios papeles flotando cerca de él.—"Al campamento de entrenamiento a los Exwire. Mi meta es lástimar a mi hermanito y pues, llevarme a mi futura esposa."

—"Y por futura esposa-..."

—"Me refiero a tu hija, claro."

Azazel quitó su mirada de los contratos, sus ojos estaban ahora clavados en el medio hermano de Rin.

—"¿Mi hija?"—Amaimon asintió, a lo que el rey solo sonrió.—"¿A la que casi matas? ¿Esa hija?"

Amaimon empezó a sentirse un tanto incómodo al ver cómo Azazel se levantaba de su trono, su cuerpo poco a poco empezaba a cubrirse de aquellas llamas las cuales compartía con su hija. De igual manera noto como sombras bailaban a sus pies mientras que sus lobos empezaban a sentarse, poniendo atención a cualquier movimiento que hacía Amaimon.

—"Azazel, quiero a tu hija para mí. Ambos seríamos poderosos, ella sería más poderosa."

Una carcajada burlona salió de los labios de Azazel irritando a Amaimon pero así como empezó a carcajearse, así se calló. El aire parecía hacerse más pesado ya que para Amaimon le parecía casi imposible poder respirar bien.

—"Ella ya lo es, y no te necesita. Más bien me parece que tú la quisieras para demostrar algo a alguien."

—"El punto es que, mañana voy a hacer ese ataque. Pero no sé ni porque vine, jamás te a importado ella."—Dijo Amaimon girandóse para salir del palacio dejando a Azazel solo.

Una vez que el rey sintió como Amaimon salía de su territorio volvió a sentarse en su trono suspirando pesadamente.

"¿Alteza?"—Preguntó uno de sus lobos, Diel.—"¿Se encuentra bien?"

Azazel revolvió su cabello para después pasar sus manos por su rostro.

—"No lo sé Diel. Me siento muy abrumado, déjenme solo. Necesito estar solo."

Ambos lobos intercambiaron miradas pero obedecieron desintegrándose en las sombras dejando a su amo solo, tal como él había pedido. Azazel suspiro y creo un arco de fuego, en medio de este la imagen de su hija apareció.

Ella estaba sentada en su cama y entre sus manos tenía un marco para las fotografías, parecía que apenas estaba acomodando una en este.

—"¿Que haces Akabane?"—El hijo de Satán se hizo presente. Azazel se sentó más erguido.

—"Oh yo decidí acomodar está fotografía que me dió mi tío."—Dijo la castaña con una pequeña sonrisa. Con cuidado, Rin tomo el marco.

—"¿Ellos son-..."?

_______ asintió.—"Mis padres. Azazel y mi mamá cuando ella estaba embarazada conmigo."

Inmediatamente Azazel desintegró aquel arco de fuego, mientras algo dentro de él se removía.

Poco a poco y sin que ninguno de los dos se diera cuenta, ________ le estaba regresando su humanidad a su padre.

¡Vaya! ¿!Yo subiendo dos capítulos seguiditos?! Es lo que pasa cuando me llega la inspiración y claro, sus comentarios siempre me alegran el día! Espero y les guste este capítulo.—Caramella_Indigo✨🤍