|37: Ciertas Verdades|

1K 183 122
                                    

[_______ pov.]

Ambos estábamos callados, ya habíamos regresado a mi habitación pero ninguno de los dos decíamos nada. Podía sentir la mirada de Azazel en mi pues yo estaba sentada en mi cama y el había optado por estar recargado en la puerta de mi cuarto sus lobos y mi familiar aun seguían dormidos. Al menos ellos tienen un poco de paz y tranquilidad.

—"Si vas a matarme, hazlo."—Alcé mi mirada. Él ahora se encontraba cerca de mi ventana, viendo hacia afuera.

Fruncí un poco mi ceño y mordí el interior de mi mejilla. Se que había hecho esa promesa, pero después de todo lo que había pasado y de lo que él acababa de mostrarme más el pequeño encuentro que tuve con mi difunta madre y Keith... Vaya, tengo mis sentimientos hechos un desmadre.

Solté un pequeño suspiro y dije;

—"Creo que tengo otras prioridades un tanto más importantes que el asesinarte."

—"¿Enserio? ¿Que acaso no ibas a convertirte en una excelente exorcista y matar al maldito hijo de puta de Azazel? Esas fueron tus palabras no las mías."

Mis ojos se agradaron y pude sentir como el calor empezaba a subir a mis mejillas tiñendolas de un color rojo vibrante. Pude ver como una pequeña sonrisita aparecía en su rostro por el reflejo de mi ventana.

—"Y-Yo... Pues yo... ¿¡Estuviste ahí!?"

Asintió.—"Odio la puta lluvia, pero si. Estuve ahí escuchando cada palabra y viendo cada movimiento tuyo. Obviamente Mephisto no logro sentirme pero vamos, que esperabas es Mephisto."

—"Dios,"—Noté como se tensó al escuchar esa palabra. Me reprimí mentalmente.—"Digo, maldición. Bueno el punto es que yo no pienso matarte. Ya no."

—"Tenía ese presentimiento."

—"Pero eso no quiere decir que te perdono por asesinar a mi papá."

—"Padre adoptivo."—Dijo con pesadez rodando los ojos.—"Si, si bueno eventualmente me vas a perdonar y todas esas cosas bonitas y rositas."

Suspire y antes de que pudiera decir algo sarcástico la puerta de mi dormitorio se abrió de golpe y bruscamente. Sentí como fui jalada bruscamente y me encontré con la espalda de Rin, este último tenia la katana desfundada la punta de esta a unos cuantos centímetros del cuello de Azazel.

—"¡SI LE HACES ALGO JURO POR DIOS QUE-!"

Pero Rin se quedo a media oración pues Azazel tomó la hoja de la katana con su mano y como si fuera un palito la lanzó a mi cama. Rin se sorprendió pero aún así mantuvo su compostura y me escudó aun más.

—"Ah ya, esas llamas. Tu eres el mocoso de Luci~."—Dijo con voz cantarina pero su porte gritaba peligro. Tenia que hacer algo antes de que Azazel le hiciera algo.—"Por los mil infiernos, te pareces a él. No mucho pero algo es algo."

Al ver como él tomaba un paso hacia adelante y como las sombras en mi habitación parecían oscurecer aun más el lugar, supe que tenia que intervenir.

Me moví rápidamente delante de Rin poniéndome en medio de los dos, esta acción sin duda alguna llamo la atención de mi contraparte y progenitor. Con sumo cuidado tomé la mano de Rin y al hacerlo, mis llamas se activaron.

—"Si quieres que nos llevemos bien, tienes que controlarte. Note como las sombras hicieron eso raro. Y tú,"—Me gire un poco para ver a Rin. Él miraba a Azazel con suma atención como si tratara de intimidarlo.—"Rin,"—Él me miró.—"No me hizo nada, estoy bien lo que sentiste fue porque vi... Vi los últimos momentos de mi madre y pues una cosa llevo a otra."

Las facciones de Rin se relajaron y cuando finalmente puso las piezas en una sola imagen me tomó en sus brazos.

—"Lamento mucho no poder haber estado ahí contigo Akabane."—Susurro abrazándome aún más.—"Y también lamento mucho todo lo que pasó, todo esto yo.. Yo pensé que te perdí y casi pierdo mi humanidad y luego tu casi te mueres y-..."

Coloqué mi dedo índice encima de sus labios callandolo. Un chicotazo en mi pierna causó que me separara de Rin, Azazel me había golpeado con su cola.

—"Uy, se movió por si sola."—Dijo encogiendose de hombros, pero cuando me tomo del brazo y me movió a su lado no pude evitar sentir un poco de sorpresa.—"La cosa es esta mocoso, se perfectamente que tu y ella están fusionados pero eso no quiere decir que te da el derecho de que actúes así."

—"¿Así como?"—Preguntó Rin arqueando una ceja. Azazel chasqueo su lengua con irritación.

—"Como si la amaras."—Espetó. Esas palabras sin duda alguna nos tomo tanto a mi y a Rin por sorpresa.

El silencio reinó en mi habitación, podía sentir como poco a poco la incomodidad se acentuaba en todo el lugar. Rin me gusta, hasta puedo decir sin duda que yo a el lo quiero más que solo un amigo, y sabia que él también a mi pero ninguno de los dos-...

—"¿Y si digo que sí?"

Salí de mi trance al escuchar esas palabras. ¿¡Pero que esta haciendo!?

Azazel se irguió y su semblante cambio radicalmente. Podía sentir como la seriedad se apoderaba de sus facciones.

—"¿Qué si, que?"

Vi como Rin pasaba saliva y con una exhalación dijo las siguientes palabras que causó que mi corazón se acelerará.

—"Que si la amo."

|¿Quizás Sea Para Siempre?| [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora