:Capítulo 19:

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Mire al chico a mi lado buscando una explicación de lo que estaba diciendo el rubio a mi espalda porque de verdad necesitaba escucharla venir de él porque si antes ya me sentía insegura ahora las preguntas en mi cabeza me hacían sentir peor de lo que ya estaba.

Ryan se tensó ante las palabras de Christopher lo que no me ayudaban en nada a descartar las respuestas a las preguntas de mi cabeza.

Pero era sensata y le daría la oportunidad que me respondiera porque no iba a permitir que me mintiera porque si era verdad que él si sabía los planes de la chica con la que salió y tras de eso no me dijo nada seguramente lo mataría.

- Mejor me voy a presentar - deje de ver a Ryan y miré la mano que la chica me extendía -: Soy Tatiana Sullivan.

No estaba para nada impactada de la clase de mujer suela que tenía de frente porque al parecer ya nada me sorprendía.

- ¿Te pregunte?- la chica se sorprendió y miré a Ryan -: dime que no es lo que creó - pedí porque sentía que algo se quebraba dentro de mí.

- Eso lo dicen los hombres infieles - eso me trajo vagos recuerdos -: podemos hablar en un lugar más privado.

Pidió pero no tenía tiempo para esperar y mi respiración se estaba acelerando por la rabia que recorría mis venas.

- Dilo ¿a qué le tienes miedo? - ataque con la rabia que se estaba apoderando de mí.

Ryan suspiró y lamió sus labios con sus ojos negros neutros en los míos.

- No es necesario que todos sepan nuestros problemas - me tomó de la mano y me halo hacía la puerta del auto -: entra - pidió una vez que abrió la puerta y me quede parada mirándolo -: París...- pidió como si estuviera soportando -: ok.

Dicho eso me tomo en sus brazos y me metió al auto e intenté levantarme pero el fue más rápido, me puso el cinturón e iba a quitarlo de mi cuerpo cuando el cerró la puerta.

- ¿Qué pasará conmigo?- chillo Sullivan viendo indignada a Ford quien giraba el auto para entrar por la otra puerta.

- El edificio no está lejos - respondió lo que la pelinegra lo fulminó.

Por un momento me sentí feliz al ver como había tratado a esa perra pero seguía enfadada por la manera en que me metió al auto y también por aquello que me estaba ocultando. Ryan le dio vida al motor y en todo el camino me mantuve callada con los brazos cruzados sin importarme a donde me llevaba en estos momentos.

- No te estoy engañando - dijo pero no lo miré. Él suspiró -: París...

- ¿Creés que te voy a creer solo porque me lo estás diciendo? - lo miré -: sí es así eres ingenuo.

- Se que no lo harás - respondió mirando al frente -: se que estás enojada pero si te decía que estaba informado sobre lo que trama Tatiana te ibas a enojar porque aún sabiando saldría con ella.

- Y crees que ocultandomelo sería mejor - reí con sorna -: entonces eres de verdad un...

- Estúpido lo sé. Pero en mi clase me asignaron estudiar con ella y si rechazaba me quitarían puntos.

- Quiero que detengas el auto.

- Niña...

- Detén el auto o abriré la puerta y saltare - dije sin vacilar lo que Ryan sujetando el volante con fuerzas obedeció.

No quería escucharlo decir nada más y muchos menos estar con él porque solo escucharlo me daban ganas de golpearlo hasta asfixiarlo si era posible por lo que estaba haciendo; lo cual una explicación no iba a librarlo y tampoco hacer que me relajera porque después de tanto que me había preocupado al parecer era menos que eso.

Tiempo Perfecto ©✔[+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora