:Capítulo 35:

1.4K 117 5
                                    

Dedicado a ElaBel21
Al participar en la dinámica.

┏━━━━━°❀•°:🎀 🎀:°•❀°━━━━━┓

— ¿Te gusta?

Rayden asintió con sus mejillas llenas de pastel de chocolate y reí al verlo.

Estábamos en un restaurante después de salir de mi apartamento. Mis padres me insistieron para que saliera del hospital y durmiera un poco, por mi parte tenía todas las intenciones de quedarme y esperar a que Smith abriera sus ojos, pero mi madre me sacó a patadas diciendo que lo hiciera por Rayden. Así que no me quedo de otra que salir del hospital e ir a mi apartamento para darnos una ducha — la cual fue difícil pues nunca había bañado a un niño — y comer algo.

Después de desayunar, llevé a Rayden a comer algo dulce pues sé como son los niños ya que viví por tres años rodeado de uno — Benjamin — quién le encantaba comer cosas con azúcar.

Rayden iba muy animado en los asientos traseros de mi camioneta sentado en su silla hablando de muchas cosas las cuales pocas entendia, y solo respondí con monosílabos ya que no quería ignorarlo. Llegamos al hospital y el niño no dejaba de brincar aún sujeto de mi mano, era muy imperactivo al parecer pero no me quejaba porque todos tenían lo suyo.

— ¡Lyan!— deje de ver a mi hermano para ver a un niño rubio venir corriendo hasta mí. Reí al verlo y lo tome en mis brazos, Benjamin estaba más grande que la última vez que lo vi, su cabello lo tenía cortado en forma de hongo con sus ojos azules brillantes como de costumbre.—: Al fin esta aquí — sus palabras eran más clara, y apesar que era un niño tenía una lengua muy fluida. Sus ojos azules bajaron mirando al niño que nos observaba —: Hola.

Baje a Benjamin y los presente aunque fue gracioso ver como Rayden no decía nada como antes y esta vez fue Ben quien le decía muchas cosas las cuales mi hermano solo me miraba y después a él.

— ¡Vamos! — Benjamin me tomó de la mano y con la libre sujetó a Rayden—: Palis ya despertó.

Sentí un golpe contra mi pecho y levanté la cabeza viendo la habitación que estaba solo a pocos centímetros. Mi respiración se aceleró, y con pasos largos fui a la habitación para confirmar lo que mi cuñado me estaba diciendo y dejando que los niños entraran primero lo confirmé.

Todos estaban en la habitación, pero mis ojos se concentraron en la chica que estaba sentada en la camilla hablando con su madre quien la sujetaba de la mano. Sentí un fuerte golpe y un nudo en la garganta cuando sus ojos azules se encontraron con los míos ¿de verdad estaba despierta? Sentí que todo volvía a su normalidad cuando me dio una sonrisa en aquellos labios los cuales quería besar pero me daba miedo quebrarla. Tomando valor fui a ella y sabiendo que nuestras familias estaban presentes se sentía como si solo fuéramos nosotros dos.

París cambió su expresión a preocupación cuando me acerqué a ella y suponía que mi rostro le decía muchas cosas y antes que me dijera algo la besé. Lo menos que deseaba era hacer algo que hiciera perder lo que ella un no sabía de su existencia o eso creía.

— Ryan...— acuno mi rostro entre sus manos y pegué mi frente a la suya evitando que viera el dolor que sentía por hacer que estuviera ahí —: ¿estás bien?

— Mucho mejor ahora que despertaste — besé su frente y me alejé dándole una sonrisa.—: ¿ya la reviso el doctor?— mis suegros y padres asintieron —: ¿ya lo sabe?— tragué saliva.

Oliver quién estaba apoyado contra la ventana de cristal de brazos cruzados observó a todos como todos se observaron y negaron.

— ¿Saber qué? — preguntó París viéndo a todos dejando su mirada clavada en la mía —: ¿qué me están ocultando?

Tiempo Perfecto ©✔[+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora