Si no hubiera guerra

Preparación

POV. MELIODAS

Una semana.

Una semana en la que había preparado mi clan para invadir a las diosas, una semana en la que había vuelto a ser el demonio temido y respetado del clan, los mandamientos estaban preparados para la lucha y había mandado a pulir mi arma que era dos veces más grande que yo, sin embargo la manejaba como si fuera un pequeño cuchillo.

El clan estaba muy agitado, todo el mundo se movía de un lado a otro, puliendo armaduras y sacándole filo a sus armas, muchos de los guerreros estaban entrenando y manejando con habilidad su energía oscura y a cada hora que pasaba los demonios estaban más sedientos de sangre y más listos para exterminar el clan de las diosas. Zeldris se acercó caminando lentamente y manteniendo su mirada firme, no había vuelto a abandonar el clan y fingía estar enfocado totalmente en la misión, pero sabía que eso estaba muy lejos de la realidad, podía ver que su mente estaba dividida entre escaparse o matarme y luego escaparse, cuando estaba frente a mi me dijo sin ningún rastro de emoción

-Meliodas, tenemos un problema, todo el palacio del clan de las diosas está rodeado por un perfect cube.

-Imposible,¿ entonces cómo salen ellos?

-Tienen una pequeña fuga, la única entrada que tienen a su clan

maldije en voz baja para luego decir

-¿Quién colocó el perfect cube?

-No lo sé Meliodas

-No puede ser alguien de nuestro clan, investiga eso Zeldris, si me entero que alguien de nuestro clan ayudó a esas insoportables diosas va a desear con las fuerzas de su corta vida no haberlo hecho

Zeldris asintió para luego retirarse.

Todo esto era culpa de Elizabeth, por supuesto que sí había advertido a todas las diosas que los esperaba un ataque sorpresa por parte de los demonios, sentí como la rabia corría por mis venas, nunca tuve que confiar en esa diosa de segunda. Me había manipulado increíblemente y yo había caído en su juego de la forma más vil y miserable. Después de soltar un leve gruñido me encaminé a ver al guerrero que tenía la respuesta sobre este percance, porque un perfect cube no iba a evitar que invadieramos a esos cobardes que habían preferido esconderse en vez de luchar. Y para el colmo habían usado una técnica de nuestro clan para defenderse de nosotros, no puedo negar que encontré la idea algo indignante e irónica.

Finalmente encontré a mi maestro y me acerqué a él observando la felicidad en sus ojos

-Estoy muy orgulloso de usted señorito, sabía que estaba destinado a hacer grandes cosas

-No estoy aquí para que me alabes Chandler, necesito un favor

-Lo que sea señorito

Le comenté la situación del perfect cube y como las asquerosas diosas lo habían usado a su favor para crear una fortaleza

-Eso no será un problema señorito, yo me encargaré personalmente de eso

-Eso hará parte de nuestra sorpresa, quiero que esperes la señal de Zeldris cuando estén allá

Chandler parecía confundido- pero pensé que usted iba a dirigir el ataque

-Y lo haré, pero primero tengo que encargarme de algunos asuntos pendientes, no quiero dejar cabos sueltos ya que hemos encontrado la ubicación del arcángel perdido

-¿Ya la encontraste?-preguntó con los ojos abiertos

-Fue sencillo en realidad, se nota que el clan de las diosas no sabe ocultar nada, la verdad, no sabe hacer nada bien