"La vida está llena de mentiras, e incluso la vida es la misma mentira". Esas palabras vivían resonando en la mente de Lheyra, más aún cuando conoció el significado de vivir en Lorchpey. Dónde las mentiras son la mayor realidad del pequeño pueblo sumido en secretos, Lheyra debe encontrar la verdad que nadie menciona. Rodeada de perfectas sonrisas decide ser ella quien revelé la verdad, pero nada es fácil cuando todos tienen sus labios sellados, y son capaces de sellar nuevas tumbas, por mantener la verdad en la oscuridad. Y todo es aún peor cuando conoce a los hermanos Skillek, los tres chicos más guapos que podrían existir, con sus sonrisas seductoras y sus miradas que dominan hasta las bragas más ajustadas. «El amor es el arte de destruir sin compasión, y contruir sin restricción. Aunque eso signifique matar sin consideración.»