Capítulo 8

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—Creo que te luce mejor que a mí. —Señaló la camisa.

—Que chiste tan cruel —Kihyun se avergonzaba en esos momentos de su cuerpo, tan pequeño a comparación del otro.

—Lo digo en serio. —Se acercó al pelirosa provocándole un escalofrío, que para su mala suerte fue evidente. Pero no se alejó, le sostuvo la mirada

¿Por qué no se hacía a un lado? ¿Qué pasaba con él? Al parecer no tenía intenciones de moverse, tenía curiosidad por lo que pasaría.

—La verdad es que me pareces muy lindo —continuó—. Tu estatura es parte de tu encanto.

Estaba sorprendido, no sospechó en ningún momento que aquel chico gustara de los hombres, si es que su suposición era cierta. Pero algo le sorprendió más, que no se moviera cuando el nadador comenzó a acercar su rostro al suyo.

Hyunwoo sonrió, como si estuviera provocándolo. Ambos recorrían el rostro del otro con la mirada, desde los ojos hasta los labios, sin atreverse a hacer más que eso. El pelirosa ya no se estaba nervioso, al contrario, sentía cierto deseo de colgarse del cuello del otro.

«¿Acaso no soy tan heterosexual como siempre he creído?» pensó, «¿Y si él solo está jugando? ¿Y si somos simples curiosos?»

Tenía una guerra interna. Sabía que esto no estaba bien, era hijo del CEO y posiblemente después su jefe. Siempre creyó que las relaciones en el trabajo estaban mal...

«¿Por qué no me puedo alejar?»

El otro volvió a sonreírle —Hay que recostarnos —alejó su rostro y se irguió, terminando con esa intensa guerra de miradas. Se recostaron uno al lado del otro en la cama.

—Y dime ¿qué te hizo ser tan bueno en natación? —tenía mucha curiosidad cosas sobre él.

—Es curioso, yo quería ser un Idol, pero mi padre tenía otros planes. Me inscribió a diferentes disciplinas y en las que sobresalí fue natación y baile.

—¿Entonces al final preferiste natación? — giró su cuerpo en dirección al de al lado encogiendo sus piernas.

—No, fui engañado —soltó una risita apagada mientras veía el techo—. Se me dijo que, si ganaba ciertos concursos de natación me dejarían seguir con el baile y canto para después audicionar en empresas, pero a mi padre nunca le convenció la idea de los idols, así que heme aquí.

—Lo siento por preguntar, no tenía idea de que tu carrera tuviera un trasfondo tan... privado —se sentía bastante mal por él, era obvio que no parecía un recuerdo agradable.

—No deberías disculparte tanto. Además, si decidí contártelo es por algo. —giró el rostro hacia Kihyun, de nuevo quedando a una mínima distancia.

—¿Y cuál es ese "algo"? —Tragó duro.

—Me pareces alguien confiable. —Al escuchar eso se sintió un poco decepcionado.

«¿Qué esperaba oír?»

Suspiró desviando la mirada a un punto cualquiera más allá del hombro del mayor.

—Sí lo soy —Miró a Hyunwoo.

El mayor giró su cuerpo recostándose de lado también. Acercó su mano acunando el rostro del menor para acercarlo al suyo. El pelirosa fue tomado desprevenido, pero no quería que se detuviera, de hecho, lo imitó y posó su mano en su mandíbula.

Recorrió el labio inferior del mayor con su pulgar, sus labios carnosos le provocaban tentación. El moreno abrió un poco su boca soltando un suspiro y cerrando ligeramente los ojos, lo que le gustó a Kihyun, pues sonrió y acercó sus labios, dándole besos suaves que recorrían su mandíbula. Hyunwoo lo detuvo, tomando su rostro entre sus manos, viéndolo por unos segundos hasta que decidió darle un beso en los labios.

𝐉𝐔𝐒𝐓 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓  // SHOWKI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora