Capítulo 1

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Dos años habían pasado desde que Kihyun terminó de estudiar fotografía en la universidad, y tan pronto como concluyeron sus estudios buscó trabajo para aplicar su conocimiento en lo que más le apasionaba. Sin embargo, no tuvo mucha suerte así que consiguió trabajó en una cafetería mientras seguía intentando.

En ese establecimiento conoció a Hyungwon, un chico alto, delgado, de cabello café, piel blanca y muy apuesto. Sus facciones eran simplemente bonitas, delicadas; sus labios eran lo que le hacía sentir más orgulloso. La relación de ambos a veces era de amor-odio, pero sabían que siempre estarían para el otro. Aunque no tuvieran años o toda la vida de conociéndose, habían formado un gran lazo de amistad.

Cuando terminaron su turno en la cafetería y estaban dispuestos a ir a casa, Kihyun recordó que necesitaba la respuesta de Hyungwon sobre su cita, así que lo acorraló en los casilleros antes de que se perdiera esa oportunidad de encontrar a su amigo sin que estuviera hablando por teléfono o durmiendo.

—¿Iremos mañana a hacerte la sesión de fotos? Necesito que me des una respuesta ya, Hace una semana hablamos de esto y no me has confirmado o cancelado. Si no mejor busco a alguien más, porque mi tiempo también es valioso, ¿sabes? —Decía Kihyun mientras el otro se cambiaba la camisa del uniforme frente a los casilleros del trabajo, dándole la espalda.

—Tranquilo algodoncito de azúcar. Tengo una pasarela hoy en la noche y no sé si tendré ánimo de levantarme tan temprano para la sesión. Además, mañana por la tarde tendré una sesión de trajes de baño, por eso no he dicho nada. —Contestó sin girarse.

—Primero, ya te dije que el tinte no tenía que quedar de este tono de rosa, y segundo, ¿ni siquiera porque vivimos juntos pudiste decirme eso antes? —se paró a su lado, demandando la atención del alto—. Solo me faltan estas fotos para llevar mi portafolio al sitio que me recomendaste —Hyungwon parecía indiferente a las palabras de su amigo— ¡Necesito ese trabajo! No todos tenemos un rostro bonito para tener como pasatiempo este empleo de la cafetería, o cualquier otro.

—Para empezar —alzó su índice, mirando al pelirosa—, si a mi rostro le pasara algo, mi empleo como modelo se terminaría. Por eso me cuido mucho, por lo que mi sueño de catorce horas diarias es fundamental.

Kihyun había estado estresado toda la semana, así que en ese momento ya no podía pensar en otra cosa más que en distintas formas de golpear a su amigo.

Tal vez lo haría, si Hyungwon no fuera más alto que él; aunque la verdad nunca le gustó el rollo de las peleas físicas, por eso sus planes de callarlo solo quedaban en su imaginación cada vez que discutían.

—... pero, para que veas lo buen amigo que soy —continuó—, estoy dispuesto a dormir ocho horas y levantarme para tu sesión. Además de que sería muy egoísta negarte el placer de retratar mi belleza.

Kihyun no dijo más, sabía que, si le devolvía una respuesta, posiblemente terminarían en una pequeña pelea y no podía darse el lujo de perder a su modelo, pues la cita para la entrevista de trabajo era en dos días.

Así, se limitó a sonreír y cerrar su casillero provocando un sonoro ruido metálico. Se dio la vuelta para salir del trabajo e ir a casa mientras pensaba todo lo que le hubiera gustado contestarle a su exasperante amigo.

Hyungwon caminó detrás del pelirosa, riendo en silencio por haber triunfado en su objetivo de irritar a su amigo. Por supuesto que no era tan bestia para olvidar darle una respuesta a Kihyun, pero sí era entretenido ver que creyera eso.

Y es que desde el día que hablaron del tema por primera vez, planeó la ropa que usaría y programó su alarma dos horas antes del horario que habían asignado para la posible sesión.



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𝐉𝐔𝐒𝐓 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓  // SHOWKI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora