Capítulo 3

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Mientras iban de camino a la empresa en el auto, Kihyun se tomaba fotos; le encantaba tomar y tomarse fotos para subirlas a sus redes. Además, tenía un considerable número de seguidores a los que les gustaba su trabajo.

Ganó mucho más seguidores después de que Hyungwon publicó en sus redes fotografías que Kihyun le tomó cuando tenían tres meses de conocerse. Desde ese día lo contactaron más de lo normal para solicitar sus servicios de fotografía.

—No luces nada nervioso. —Comentó Hyungwon, quien lo observó durante un semáforo en rojo.

—Porque no lo estoy. Es como si no me hiciera a la idea todavía de que voy camino a la empresa y que tengo la oportunidad de trabajar ahí.

La empresa Starship era una de las más famosas editoriales de moda, que además había comprado a otras, expandiéndose y tocandos diferentes temas, como su revista de deportes. Hyungwon trabajaba en esa agencia casi desde que empezó su carrera como modelo, pero hacía dos meses que estaba en ese edificio.

Al llegar, Kihyun se adelantó mientras Hyungwon aparcaba el carro en el estacionamiento de la agencia, no sin antes darle indicaciones de dónde encontrar la oficina del reclutador.


Cuando se encontró frente a la entrada principal del edificio, sus piernas no reaccionaban. Respiró profundo y las obligó a moverse, aunque con cada paso que daba le hormigueaban. Pasó por el mostrador, saludando a la secretaria, quien le indicó dónde estaba el elevador; fue rápidamente hacia él porque suponía que habría más personas esperando por una entrevista, y no quería ser de los últimos o se pondría más nervioso al ver cómo entraban y salían los demás.

Alcanzó a entrar en el elevador segundos antes de que las puertas se cerraran, lo que no pudo evitar fue chocar con otro hombre. Se disculpó al instante, pero no miró con quién se impactó, le dio vergüenza imaginar que era un empleado o un candidato para el mismo puesto y haber quedado como un torpe distraído. Así que después de presionar el botón del piso número quince hizo como si revisara algo de un folder de hojas y se recorrió a la parte de atrás del elevador.

En el piso doce subieron dos chicas que parecían ser estilistas, pero Kihyun no notó sus presencias hasta que escuchó la voz grave regresarles el saludo. Después de doce pisos, el pelirosa alzó su mirada y observó al chico que estuvo ahí todo ese tiempo, literalmente frente a sus narices.

Era alto, de piel parecía bronceada, a diferencia de su piel pálida, sus cabellos castaños lucían un corte de cabello corto. Solo podía verlo de espaldas, pero su figura era impactante. El traje que portaba parecía hecho a la medida, resaltando su cuerpo en muy buena forma. Permaneció contemplándolo desde su lugar cuando en el piso catorce el alto volteó hacia él.

—Buen día, y buena suerte —sonrió un poco, señalando el portafolio de Kihyun.

Kihyun lo vio rápidamente, pero pudo captar más detalles: no solo tenía una buena figura, sus labios eran carnosos y de un color rosado intenso, su mandíbula definida y unos pequeños ojos castaños muy bonitos. Además de la diferencia de alturas, fácilmente le llevaba dos cabezas de ventaja al pelirosa.

—¿Yo? Oh, sí. Quiero decir, gracias —el chico ya había dejado el elevador para dirigirse a donde el más bajo alcanzó a visualizar, parecía ser uno de los estudios de fotografía. Las estilistas reían bajito por esa pequeña escena.

—¿Quién era? — les preguntó sonriendo.

—¿En serio no lo reconoces? —dijo una de ellas, abriendo más sus ojos—. Es Son Hyun Woo, nadador olímpico.

—Oh, claro. Sabía que lo había visto antes —mintió. No sabía mucho sobre deportes, hacía fotos de eso también pero no estaba al tanto de esos temas— ¿Ha venido a una sesión fotográfica? —De repente tenía varias preguntas sobre él.

—Sí, viene a menudo por ciertas temporadas.

—¿Siempre viene aquí a hacer sesiones?

—Claro, el CEO debe ser el primero en tener las novedades sobre la carrera de su hijo. —Contestó una de ellas.

«¿Cómo que su hijo?» pensó.

Kihyun no preguntó nada más, ya había expuesto lo suficiente su evidente desinformación.



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𝐉𝐔𝐒𝐓 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓  // SHOWKI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora