No podía aguantarlo más. No podía seguir sin contarle esto a nadie.
Ni siquiera a mis mejores amigos, ni a mi mánager, ni a Gia...
Ni siquiera sentía que podía contárselo a papá.
Necesitaba a mi mamá.
Mi corazón empezó a latir fuertemente cuando su rostro con una sonrisa apareció en la pantalla de mi celular. Ella había contestado mi llamada sin importar que sean las cinco de la mañana en Inglaterra.
—"Ey, bebé, ¿cómo estás? ¿Qué haces despierto a las siete? Creí que todavía entrabas en ensayos al medio día"
Le di una diminuta sonrisita sin separar mis labios.
—No he podido dormir, má —confesé—. Estoy algo preocupado.
—"¿Por qué? ¿Por el hecho que vayas a cantar frente a veinte mil personas?" —rió.
Sophia Evans no era la mejor alentadora.
Reí quedito acomodando mi espalda contra el resbaldar de la cama de mi habitación de hotel. Mucha luz entraba por el gran ventanal, alumbrando el ambiente.
—No... es... debo contarte algo.
—"Claro, dime".
¿Cómo se supone que le diga esto a mamá?
Carraspeé antes de tomar unas profundas respiraciones. Rasqué mi cuello, rasqué mi cabeza y despeiné el poco cabello que tenía.
—Perdí mi virginidad hace unas noches —solté.
Oh, mierda acabas de decirlo. No hay vuelta atrás.
Creo que mamá intentó pretender naturalidad, pero sé que se sorprendió. Sus cejas se alzaron ligeramente y su rostro trató de mantener esa pequeña sonrisa característica suya.
—"Oh... oh, ¿sí?" —dijo.
Asentí despacio.
—Y yo... tengo miedo... temo... —balbuceé bajando la mirada— ¿y si la dejé embarazada?
Ella soltó una risita mirando a sus lados. Luego, regresó sus ojos a mí y negó con su cabeza.
—"¿Usaron protección?"
—Sí.
—"¿Entonces de qué te preocupas, osito?"
Arrugué mi ceño y mi mandíbula se apretó sin pensarlo. Mamá lucía tranquila y eso, de alguna manera, me tranquilizaba también.
—No lo sé... es que siento algo en el pecho, má —me quejé—. Siento que algo ha cambiado entre nosotros.
—"¿Qué opina Gia? ¿Lo has hablado con ella?"
Mierda, era verdad... ella aún no sabía...
—Oh, diablos, mamá... yo... debo contarte otra cosa.
Ella sonrió y sé que lo hizo con burla. La vi acomodarse en su sitio y dejó su celular sobre algún lugar, ya que se cruzó de brazos.
—"¿Bueno?"
—Yo... yo no estoy con Gia, má, ella no es mi novia —dije—. Jamás lo fue, fue un contrato de Modest!
Sus labios se separaron un poquito con impresión.
—"¿C-cómo? ¿En serio? Pe-pero Gigi me dijo... y tú... tú no me dijiste nada y te veías tan feliz con ella..."
Mhm, a veces a ella se le olvida que me puso en clases de actuación por tres años cuando era niño.

ESTÁS LEYENDO
LIAM STYLES
Fiksi Penggemar¿Quién dijo que ser el hijo de Harry Styles sería fácil? Fama, dinero, conquistas... las tres cosas que él más desea. Y a ella, por supuesto. Liam Styles es el heredero de la estrella del rock, Harry Styles; y su madre, Sophia Evans, una de las mejo...