LIAM STYLES

15. More than Fan

¡Hoy es un gran día, amigos! ¡Un gran día!

—"¡I'd walk through fire for you! ¡Just let me adore you! ¡Oh, honey!" —grité en una sonrisa subiendo aun más el volumen del auto.

Estaba feliz, estaba muy feliz.

Había dormido once horas seguidas. Mis energías estaban recargadas para el concierto de esta noche, mi mejor amigo Freddie y yo nos encontraríamos después de meses en mi show, y además, conocería a la mamá de mi girasolito.

Era la una de la tarde. Había alquilado un carro para poder moverme aquí en Georgia y poder llevar a Abby y su mamá al concierto en unas horas. Ahora conducía solo, con las ventanas abajo viendo el cielo azul y despejado, buscando alguna heladería, se me había provocado un dulce.

Mi música se ve interrumpida cuando la conexión se corta por una llamada entrante. Veo en la pantalla del tablero del carro quién era el remitente: era papá.

Contesté la llamada en altavoz reemplazando a Harry Styles cantando Adore You a todo volumen, por una conversación casual con solo papá:

—¡Buenas, Harry! —saludé animado.

—"¿Por qué estás feliz tú? Yo soy el de la sorpresa"

Sonreí aun más grande, apretando mi agarre en el volante.

—¿Qué sorpresa?

—"¿Estás conduciendo? Creo que es mejor que pares"

Giré mis ojos.

—¡Dime, pá! —exigí con diversión.

—"¡Buenas noticias, osito!"

—¡Dímelas, Styles...! —canturreé.

—"¡Ponme 'Libre soy' de Frozen, Li! ¡Tu poderosisímo padre te ha sacado del infierno de Modest!"

Me estás jodiendo.

Entré en un completo estado de shock por unos segundos, y mi pie pisó con fuerza el freno al darme cuenta del semáforo rojo a solo unos metros de mi vista.

—¡Mentira! —exclamé.

—"¡Bienvenido a Styles Récords, Liam! "—gritó de vuelta.

Por la puta madre.

Solté un grito lleno de energía y emoción golpeando el volante delante de mí. La sonrisa en mi rostro había empezado a doler.

—¡¿Qué hice para merecerte, Styles?! ¡Te amo, mierda! —chillé.

—"Lenguaje" —advirtió.

—Perdón —recordé de inmediato—. ¿Cómo lo hiciste? ¿Ya todo está listo?

—"Sí, osito, solo falta tu firma" —respondió—, "Zayn me ayudó a sacar a tu equipo de baile de ahí sin perjudicar a tu gira, tiene algunos contactos"

Por Dios, debía llamarlo y agradecerle, debía mandarle flores, chocolates y comprarle un carro nuevo.

—Mándame el contrato por correo y lo firmaré hoy mismo —pedí animado.

—"Claro que sí" —afirmó—, "no más mierda para ti, osito, eres libre. No dejaré que nadie arruine tus sueños".

Sonreí sin separar mis labios sintiendo cómo mi pecho se encogía de ternura por sus palabras. Al mismo tiempo, puse el auto en marcha de nuevo, continuando el camino.

—Gracias, pá —contesté—. No puedo esperar para contárselo a Abby.

—"¿Qué esperas?" —inquirió— "anda dale las buenas nuevas".