Capítulo 12

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[Elline Weasley]

Cuando Theo se fue me dio una mirada de que lo lamentaba. Me quedé un rato ahí y me senté. Agarré una roca que estaba cerca y la lancé al lago.

-¿Por qué tiene que arruinarlo todo...?-Lancé otra roca, esta vez salpicando más agua-Si tan sólo no fuera tan... Malfoy, pudimos haber funcionado.

(*. *. *FLASHBACK DE ELLINE *. *. *)

Era un día muy friolento en el primer año, Molly y Arthur Weasley habían ido a visitar a su hijo mayor Charlie, a Rumania. Así que el primer año de los más jóvenes Weasley se quedaron a pasar la navidad.

Por la mañana su hermano gemelo bajó para ver el regalo que su madre les había mandado. Eran dos suéteres; Uno con la letra "R" y otro con la letra "E". También había dulces y pastelillos de chocolate, por otro lado era la primera navidad de su amigo Harry y un mes antes la pequeña de los Weasley contactó a su mamá para que le tejiera un suéter a su nuevo amigo Harry Potter. Esa navidad fue tranquila, sus otros tres amigos se habían ido a sus casas para pasar las fiestas. En el castillo había pocos niños, entre ellos los Weasley's, Potter, dos chicas de Ravenclaw que eran amigas de los gemelos y unos cuántos de Hufflepuff. La mayoría de los Slytherin's habían ido a sus casas para pasar las fiestas.

Elline estaba sola en su dormitorio, mientras se ponía su lindo suéter navideño y sus medias negras, con su bufanda de los hermosos colores que representaba su casa y un gorro de lana gris. Se acomodó muy bien su bufanda y salió cuidadosamente de la torre de Gryffindor.

Ella empezó a caminar por los pasillos, le gustaba ver los copos de nieve caer, estar en Hogwarts para esas fechas era una completa fascinación. Empezó a subir las escaleras para la torre de astronomía y vio a un rubio platinado sollozando, sentado y cubriéndose los ojos con sus piernas, en verdad se veía mal el pobre niño.

-¿Te encuentras bien?-Dijo Elline mientras se inclinaba y ponía una mano en su hombro.

El niño subió la mirada y ella pudo notar sus rasgos, sus ojos llenos de lágrimas y rojos, al igual que sus mejillas y nariz, su labio inferior temblaba y sus diminutas pecas se marcaban más, su piel era blanca por completo.

-Malfoy... -Dijo la niña al darse cuenta de quién era, su bully desde que había entrado.

-Largo!-Gritó enojado-No quiero verte, ni a ti, ni a nadie-Imitó su posición anterior.

A ella le dolía el alma verlo así, se sentó a un lado de él y le puso una mano en su hombro.

-Tranquilo, si no quieres hablar no lo hagas-Él volteó a mirarla, ella sólo sonrió sincera-No le diré a nadie, tranquilo-Levantó el meñique.

-¿Qué haces?-Miró a su meñique.

-Es algo... Muggle, para sellar una promesa-Sonrió-¿Qué tienes?

-Alguna vez haz sentido que no perteneces a tu familia?-Miró al exterior de la torre, mientras seguía sentado.

-Bueno... En reali-

-Mejor no respondas-Rió triste-Esto está mal, eres una Weasley y yo un-

-Malfoy, lo sé. Pero ser un Malfoy no quiere decir que tengas que ser como tu padre.

-Lo último que quiero es ser como él-Sus ojos se volvieron a cristalizar, haciendo que la pequeña lo abrazara y él recargara su cabeza en el hueco entre su hombro y su cuello.

-¿Te hizo algo, Draco?-Ella nunca lo había llamado por su nombre, eso era bueno. Quizá este era el principio de una bella amistad.

-N-no... Pero-Tomó aire-No sé porqué te lo cuento a ti, no somos amigos.

-Puedes confiar en mí, somos... Amigos-Sonrió-y los amigos no se juzgan, los amigos no mienten y los amigos... Se apoyan y guardan secretos-Sonrió y eso generó confianza en el pequeño rubio.

-Me llegó una carta de mi padre, diciendo que estaba muy decepcionado de mí... Por mis notas-Bajó la mirada-y por haber ido a un castigo con Potter y no poder lograr que fuera mi amigo... Dijo que era un inútil-Empezó a sollozar-y que no valía nada, que sólo era un estúpido niño idiota y que no me quería ver esta navidad-Empezaron a caer lagrimas de su rostro-Finalizó su carta diciéndome que era una decepción... Y que si por él fuera yo no sería su hijo.

Las lágrimas del pequeño Draco empezaron a caer deprisa, Elline se tapaba la boca con sus pequeñas manos mientras varias lágrimas rodaban por sus mejillas.

-Pero, Draco... Es tu padre, ¿Cómo un padre puede decir eso de su hijo?-Preguntó triste.

-Él no es como los demás papás, no es como el tuyo... Mi papá es realmente un monstruo-Limpió su lagrima-y yo un estúpido y la decepción de mi padre-Miró la torre de astronomía y se paró, yendo a la barandilla de la torre-Hay días que en verdad ya no puedo con esto... Que me encantaría estar-

-No-Dijo acercándose a él-No, Draco...-Lo abrazó mientras ella lloraba, este tipo de afecto era algo extraño para él pues no estaba acostumbrado. Pero no pasó mucho tiempo para que cediera a su cálido abrazo-A partir de hoy vendremos aquí todos los fines de semana a las 8 ¿Ok?

-Nos pueden ver... Y sabes lo que piensa mi padre.

-Entonces nos cuidaremos de que nadie venga ¿Vale?, si necesitas verme antes sólo dame señales y nos veremos. Pero mientras yo esté tendrás apoyo de mi parte ¿Ok?-Lo abrazó otra vez, fuertemente.

-Vale-Dijo en el cálido y frío oído de la pequeña.

Eran sólo niños inocentes que no veían la gravedad de sus encuentros, no había malicia en sus intensiones... Eran sólo... Niños.





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Von amor, Liz.

29/12/20

ᴅʀᴇᴀᴍꜱ ¿ᴜɴᴀ ᴡᴇᴀꜱʟᴇʏ ʏ ᴜɴ ᴍᴀʟꜰᴏʏ? [ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora