ᴅʀᴇᴀᴍꜱ ¿ᴜɴᴀ ᴡᴇᴀꜱʟᴇʏ ʏ ᴜɴ ᴍᴀʟꜰᴏʏ? [ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ]

Capítulo 76

[Elline Weasley]

Miraba la gran ventana que había en el dormitorio, llevaba dos meses... Dos meses sin verlo, dos meses encerrada y dos meses donde ya no aguantaba un momento más estar alerta.

-Hola-Saludó Apolo, venía con un cupcake en mano-¿Quieres? Me quedaron muy ricos.

-Okay-Dije con una sonrisa y tomé un poco del cupcake-¿Sabías que Bill se va a casar?

-¡No!-Respondió sorprendido-¿¡En serio?!

-¡Sí! Estoy muy feliz por él, se casará con esa chica de Beauxbatons, Fleur.

-Oh, esa chica es muy hermosa, en serio. Me alegro por ellos.

-Sí... Yo igual, aunque siento algo de lástima por ella.

-¿¡Qué?! ¿¡Por qué?!

-Por Molly, ya sabes.

-No, no lo sé, contexto por favor-Respondió con una risita.

-A Molly nunca le cayó bien, siempre la juzgó y decía que Fleur había enamorado a Bill por sus genes de Veela. Hermione y Molly se reían de ella constantemente... La pobre chica lo sabía, pero bueno, creo que el amor que tiene por Bill es más grande.

-Que horrible ha de ser tener a Molly como suegra...

-Ni que lo digas-Respondí riendo.

Apolo había abierto la boca para hablar, pero un gran estruendo en la planta baja llamó nuestra atención.

-¿Fue mi imaginación?-Preguntó él, yo negué.

-Iré por el arma-Bajé de la cama y me dirigí a mi buró, del pequeño cajón saqué un arma que Theo nos había otorgado el día que llegamos. Habíamos tenido varias lecciones, después de lo de Hanah debíamos estar alerta... Según lo que decía Theo, cualquier anormalidad con la magia podría salirnos muy caro.

Saqué la pequeña arma muggle y la cargué. Ambos empezamos a bajar lentamente, procurando no hacer nada de ruido.

-Tú ve allá y yo acá-Susurró. Asentí y me separé de su lado.

Caminé hacia la sala, observando cuidadosamente cualquier anomalía. Así era hasta que oí a Apolo gritar. Corrí hasta donde él estaba, apuntando a la persona con mi arma.

-¡Santo Merlín!-Exclamó Apolo.

-¡Dios mío, ma, nos sacaste un susto!-Exclamé asustada.

Lizzie me miró extrañada y con una sonrisa en su rostro al igual que Apolo.

No entendía por qué me miraban así.

Hasta que caí en cuenta que le había dicho "ma".

-¡L-lo siento! No fue mi intención...-Me disculpé avergonzada, tapándome mi enrojecido rostro.