▪︎Capítulo 9▪︎

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Aiden

Desde que la ví bajando las escaleras de su casa me quedé hipnotizado por su belleza, y por el aura que desprendía.

Ella tiene la cara de un ángel, pero a su vez como ella misma había elegido podía ser una diabla.

Ella es la diosa del cielo y del infierno

Y va a ser tu perdición

Eso estaba haciendo, ¿por qué me siento así cada vez que la veo?

Todo esto que sentía cada vez que la veía no la había sentido con nadie más.

Solo es deseo, me repetía una y otra vez. No iba a llegar a más

¿Seguro?

Cuando llegamos a la fiesta intenté buscar alguna distracción para no pensarlo tanto, lo había conseguido, estaba con una morena bastante guapa.

Pero sigues pensándola, ¿verdad?

No, me estaba distrayendo, y aunque la chica me acariciaba el pelo como si fuera un perro, estaba bien.

Hasta que la vi llegar, y sentándose en frente de nosotros, intenté sacar a la chica pero ni se movía.

Cuando se fue con Adam sentí una clase de presión en mi pecho, se estaban divirtiendo juntos.

Desde donde estaba no los veía,  no quería que le pasase nada malo así que me levanté del sofá y le dije a la chica que se fuera, se fue enfadada pero ahora mismo no me importaba. Me acerqué un poco hacía ellos, pero manteniendo un poco la distancia para que no me vieran y entonces los vi.
Estaban bailando, ella estaba de espaldas a él y mi querido amigo Adam le repartía besos por su cuello mientras le sostenía por la cintura.

Seguro que a Blake no le gustaría ver eso

Si,si seguro que a Blake y no a ti

Aghhh, vale, no entendía porque me molestaba que él estuviera así con ella. Necesitaba algo para distraerme así que agarre una botella que encontré por ahí y empecé a beber como si de ello dependiera mi vida. Nunca me había sentido así, y ahora si.

¿Qué me estás haciendo rubia?

El ambiente cada vez se tornaba más sensual acompañado de la música que ponía el dj. Seguían bailando de espaldas hasta que Adam parece que le susurró algo y la rubia asintió.

Se estaban dirigiendo hacia el piso de arriba y no estaba dispuesto a permitir eso, no podían hacer eso que me estaba imaginando, iba a preguntarle a Amélie si sabía dónde estaba su hermano, pero cuando estaban por subir las escaleras nuestro querido Blake se encontraba bajando de ellas, pasando su brazo alrededor de los hombros de su hermana y mirando con el ceño fruncido a Adam.

Los tres juntos se dirigían hacia el sofá así que me dispuse a irme a el.

Cuando estuvimos todos, Blake rompió aquel silencio que se había formado

—Veo que ya conoces a Adam, hermanita.

—¿Tú eres Adam?

—¿Tú eres su hermana?— cuestionó ahora él.

Vayaa, al parecer no se habían presentado.

Se quedaron mirando por unos segundos hasta que Amélie se giró a ver a su hermano.

—¿Dónde estabas?

—Eso— apoyé la pregunta de Amélie,  porque mi amigo se había perdido por un buen rato

Amélie [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora