[50.1] A través del Tiempo

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Primera Parte


A pesar de que sentía el cuerpo pesado, a lo lejos podía oír voces, sentir corrientes de aire y un bullicio como si algo estuviera destruyéndose. Gimió al querer moverse más su cuerpo no le respondía salvo por la sensación cálidas de unas manos que parecían darle algo de fuerza.

Era la voz de una mujer, con un timbre delicado pero alterado a la vez, luego la voz de un hombre que parecía furioso como si fuera culpa suya, y poco a poco podía reconocerlos; abrió los ojos con lentitud tan solo para ver algo que brillaba por encima de aquel destruido lugar, la cual parecía tal vez una catedral en ruinas o... ¿Eso era el palacio?, se preguntó hasta que volvió la mirada hacia las caras de esas personas muy familiares.

—¡Ya está respirando! —alegó el peliazul que imponía las manos para efectuar los primeros auxilios.

—Cálmate, falta poco para cerrarle la herida—la mujer era Catalina, imponiendo las manos sobre el pecho y cerrar el hoyo—. Ha perdido mucha sangre, pero vivirá—ella miró hacia arriba—¡Él estará bien!

Aspros no entendía lo que pasaba, apenas era consciente de lo que sucedía hasta que recordó lo último a causa de las dos entidades que parecían destrozarse en poder sobre los cielos. Las paredes caían en pedazos, el escudo que alzaron apenas podía ayudarlos a protegerle, él se dio cuenta que no estaba solo con Athena y Deuteros, sino que también sus camaradas, espectros y los dioses.

—Al-Alhena—gimió el gemelo mayor—, ¿dónde está?

—Está enfrentando a Kronos ahora mismo, felizmente pudo salvarte antes de que te mataran—contestó Deuteros ayudando a sentar a su gemelo—. Él aprovechó el momento para provocar a Alhena, puede manejar el espacio y tiempo y como tu cuerpo no está protegido por ninguna armadura..., te ha lastimado.

—Debo ayudarla.

—No digas estupideces, los humanos ya no tienen por qué seguir, hasta auqui llegaron ustedes.

—Athena, yo ya no te sirvo, ahora mi deber es estar con mi esposa.

—¿Esposa?

—Es una larga historia—alegó Deuteros siendo de soporte a su hermano—, pero la señora Athena tiene toda la razón, ya no podemos dar un paso más. Los titanes y los dioses al servicio de Hades están lidiando con los titanes sobrevivientes.

El ex caballero de Géminis podía ver a todos a su alrededor, sus camaradas heridos que fueron a cuidar de los templos así como los guardianes, algunos espectros apenas de pie, Radamanthys y Pandora parecían atender a los heridos, y los caballeros dorados que seguían en buenas condiciones estaban en una posición de alerta como si esperasen alguna orden más le causó curiosidad que Asmita de Virgo se mantuviera de pie con el rosario moviéndose a su alrededor como si se tratara de algún látigo con vida propia. A unos pasos más adelante, Zeus y Ofiuco parecían los promotores de aquel escudo.

—Quetzalcóatl y Tezcatlipoca se encuentran mejor, pero necesitan un momento más para recuperar sus fuerzas—anunció Krista manteniendo sus ojos puesto en la batalla—. Okeanos y Mnemosyne se encargan de Hyperion, Phoibe y Kreios. Mientras Koios es enfrentando a los dioses del sueño

—¿Cómo es que puedes recordar sus nombres? —cuestionó Aspros algo irónico, pero cuando la chica lo miró pudo darse cuenta que esos orbes le dieron la respuesta—. Lithos.

—Thanatos e Hypnos son el apoyo de Hades—alegó Zeus en un tono más preocupado, invocando lo que parecía ser una gran lanza con adornos de estrellas brillantes, así como una esfera que en su interior parecía emanar algún rayo—. No podemos mantener a los titanes por mucho tiempo aquí, es necesario que procedamos al siguiente plan. Llamemos a los dioses que pueden partir con los humanos y vayan al Tártaros.

[Finalizado] A través del Tiempo [Temporada 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora