[Finalizado] A través del Tiempo [Temporada 2]

[7] Sensaciones

—Trata de serenarte, a mi también me está mareando—dijo Alhena tras recoger el cabello de Agasha dado que la florista había tenido varias recaídas—; este lugar es muy abrumador para las dos, apenas los caballeros y espectros pueden mantenerse en pie.

—Es el veneno en el ambiente—musitó la castaña de ojos jade—. Solo un poco de agua.

Pero Alhena estaba muy preocupada por su amiga, se le notaba realmente pálida, unas ojeras debajo de sus ojos y no había momento en que manchas de sangre salieran de su boca tras vomitar por lo que no le creyó en nada cuando le dijo que solo era una simple enfermedad, sus conocimientos médicos, casi nulos, le habían hecho entender que una persona no vomitaba porque fuera una simple enfermedad. Más no discutió, sino que cogió su cantinflora de cuerina y le entregó a la florista para que se quitara ese sabor amargo de la boca, no había manera en que las dos pudieran aguantar esa situación.

Y de eso fueron testigos los varones, eran muy frágiles, ninguna de las dos había sido sometidas a entrenamientos para resistir alguna clase de prueba como aquella, en cambio ellos, vivir entre venenos y situaciones riesgosas era parte de su vida y trabajo. Shion de Aries había mantenido su perfil bajo, pero no podía tolerar más esa situación, y supo que era el mejor momento para hablar con Alhena, después de todo, los demás volvieron a distraerse en sus propias cavilaciones.

—Si tuviéramos a Degel, sabría cómo ayudarte—dijo, lo cual ocasionó que Alhena se pusiera nerviosa, pudo notarlo por su mirada—. Calma, vamos a salir de aquí lo más pronto posible.

—No sé como puedes soportar este lugar—bromeó Agasha, tras limpiarse la frente con un pañuelo—. No digas nada, lo sé, me veo fatal.

—Si no fuera por este ambiente toxico, pensaría que padeces de alguna enfermedad.

Alhena quiso decir que eso podía ser la causa de tan mal aspecto, pero en ese tiempo, la medicina era algo tan atrasado que seguro iría a decir cosas sin sentido y Aspros terminaría por retarla, más eso no fue influencia en que Aries y ella intercambiaran miradas. Realmente estaba siendo incómodo esa situación, pero Agasha parecía querer descansar y él tuvo la cortesía de sentarse para que ella reposara hasta que se sintiera mejor o que los demás avisaran que era momento de seguir.

La chica del tiempo solo se mantuvo sentada sobre una roca, a unos metros de Shion, miró con disimulo el ambiente casi muerto, la vegetación que estaba marchita, de la niebla que poco a poco comenzaba a formarse, y lo único que podía cambiar ese lúgubre ambiente era una fogata, pero Radamanthys negó que se hiciera dado que era como emitir una señal al enemigo y luchar en plena noche no iba a resultar nada bueno.

—¿Tienes frio? —preguntó Shion algo nervioso o tal vez era la culpa y vergüenza que le impedía ver a Alhena. Ella solo negó—; vamos a estar bien, te doy mi palabra de que te protegeré pues ese siempre ha sido uno de mis mayores objetivos.

—Pero prefiero que no lo hagas—contestó casi en un murmuro que el lemuriano alcanzó a oír. A pesar de que se encontraban un poco apartados del grupo, no podía hacer cosas que provocara a dos hombres que seguían puesto la mirada en Shion—. Algo que siempre me molesta es que las personas toman responsabilidades cuando ya tienen una que es mucho mayor. Te agradezco mucho Shion, pero quiero que recuerdes que ahora eres padre y esposo, tanto ella como tu niño te necesitan por eso no es justo que digas eso.

—Gael e Iriel son mi responsabilidad, los protegeré también.

—Es que más que eso, ellos son tu obligación—sonrió amargamente, no podía siquiera tener una conversación tranquila—. Por favor, olvidemos todo, seamos amigos.