"Me gustaría que todo esto acabara", la voz tan dulce y calmada era lo que le motivó a girar la cabeza y dejar de ver su propio reflejo a través del lago, el cual por cierto le dio una apariencia muy joven, casi de un niño.
Necesitaba desechar esa imagen. Era un hombre, no un crio como para dejarse ver de esa manera, pero cuando quiso ver a la persona de tan hermosa voz, solo halló a una pequeña niña vestida con pantaloncitos negros, un abrigo extraño para él más ese rostro era inconfundible.
"¿Tú también quieres que todo esto acabe?", le preguntó con grata inocencia casi apegándose a él lo cual le causó un terrible sonrojo.
"¿De verdad eres Alhena?, te ves...muy niña", indagó Aspros arrodillándose frente a ella, tocándole la cara y jalándole las mejillas casi haciéndola llorar. "¿Dónde estamos? ¿Acaso estamos muertos?"
"No, no lo sé", la pequeña se talló las mejillas mirándolo con cierto enojo. "Estoy aquí porque tú quieres que estemos aquí ¿no?", se cruzó de brazos y se sentó tranquilamente mirando aquel lago.
Aspros enarcó una ceja, pero se sentó a su lado tranquilamente, claro que le sorprendió ver solo un lago y todo a su alrededor era blando, sin ningún otro color salvo ellos. Cerró los ojos, se tocó el pecho eliminando todo el aire retenido en sus pulmones. Era consciente de que eso era alguna clase de visión y al parecer ella lo creía de igual manera.
"Voy a morir, Aspros", comentó la niña dejando caer su cabeza sobre el brazo del muchachito, el cual solo miró con angustia ese pequeño cuerpo. "Hades dijo que si me ves así es porque ya no puedo quedarme en este mundo", se encogió de hombros, "...y la verdad es que ya me cansé, aunque sí puedo decir que no me quiero ir de aquí enojada contigo"
"No digas tonterías, tú no te vas a ir", se expresó conmocionado a tal grado que sujetó de los hombros a la menor, "¡no te vas a ir! Si yo te amo..., ¿no puedes quedarte conmigo?"
"Claro que no, no puedo seguir interfiriendo en tu época, además tú tenías otro designio aunque me molestó mucho que no me confiaras eso"
"Solo es una maldición, Alhena"
"Y te está matando", se frotó los ojos, no quería verlo. "Si me voy, tú vivirás, me lo prometió Kronos"
"¿Qué? ¿Le harás caso a ese titan? ¡No seas tonta, creerle a él es condenarnos!"
"Él lo prometió y eso es algo serio para un titan de su clase", ella frotó el rostro sobre el pecho del muchachito.
"Eres muy ingenua", suspiró al tocarle los cabellos cortos, luego cogió su mentón para besarle la frente, "No harás tonterías porque mientras estés conmigo, no lo necesitarás. Prometiste que esto lo haríamos juntos y así será"
Más la pequeña Alhena negó y tiernamente se acercó tanto a él solo para besarlo, se levantó muy apresurada para salir corriendo de la presencia del chico, el cual solo se quedó pasmado casi queriendo gritarle que volviera a él..., pero ella había desaparecido.
Aun los oídos le zumbaban.
El dolor de cabeza arraigó con tremenda fuerza que lo dejó un poco perdido entre la realidad y el sueño. No, no podía sumergirse en la utopía que por uno instantes deseó con fervor, más se percató de que aquello fue un maldito deseo que cargaba desde que la tuvo entre sus brazos, pero el ardor descomunal le hirió enormemente que deseó gritar abruptamente.
Tosió ligeramente, unas manos cálidas tocaron su rostro y algo suave amortiguaba su cabeza, a lo lejos oía mucho bullicio, choques estruendosos como si fuera alguna case de explosión; temió abrir los ojos, quería a como diera lugar creer en la tranquilidad de ese sueño más era imposible de no dejar de oír murmuros que cada vez se hacían insistentes.
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[Finalizado] A través del Tiempo [Temporada 2]
Fanfic¿Qué es el tiempo? Si me lo pregunta, lo sé. Pero si tuviese que explicárselo a alguien no sabría como hacerlo. Cuando Alhena cree que su vida en el Siglo XVIII solo fue un sueño, sabrá que nunca antes estuvo más viva y que sus acciones tendrán una...