Dodici-

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''No es quién eres, Stiles... es quiénes somos.'' 


Cuando todo se volvió oscuro, Stiles puede jurar que su corazón estaba tan intranquilo que sintió que iba a darle un infarto, o en el peor de los casos, salirse de su pecho. 

Estaba solo, no sentía ninguna presencia con el. 

Entonces...

¿A donde había ido el nogitsune? ¿Dónde estaban Derek y Braeden?

Donde...¿Dónde estaba él?

Un escalofrío recorrió todo su cuerpo. Se estremeció. Dondequiera que estuviese, realmente hacía frío.

Se abrazó a si mismo, y empezó a caminar. Realmente no sabía a donde iba, solo caminaba sin rumbo alguno, para ver si encontraba a algo... o a alguien.

 o a alguien

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Derek estaba atónito.

Todo había pasado tan rápido...

En un momento, estaba al lado de Braeden, dispuesto a atacar al nogitsune en aquel momento de lo que parecía ser debilidad. Y al otro, estaba sentado en una silla, y atado a ella.

No sabía donde estaba Braeden y le preocupada lo que aquel bicho podría hacerle.

Se removió como un gusano e hizo fuerza, pero la cadena con la que estaba atado no cedía. Es más, se sentía algo débil, cansado. Como si necesitara una larga siesta para poder recuperar sus fuerzas.

—Oh, no lo intentes. Contienen algo de acónito y muérdago, también un poco de ceniza de serbal.— Lo dijo con suma tranquilidad, el bicho parecía volver a ser el mismo de antes. Sin debilidad o algo así.

—Desátame.— Gruñó Derek.

—No entiendo porque siempre piden ese tipo de cosas.— Se quejó el nogitsune.— Como si fuera a hacerlo...

El nogitsune empezó a caminar en círculos al rededor de Derek, examinándolo con su mirada. Pudo detallar sus rasgos, afilados y toscos; pudo ver su boca, carnosa y algo rosada. Sus ojos, de un verde intenso, aunque también tenían un toque azulado. Su cuerpo, bien entrenado y ''perfecto''.

No era nada especial. 

—¿Sabes Derek?, deberías unirte a mí, seríamos realmente poderosos.—Sonrió.— Después de todo, somos parecidos en algunos aspectos. 

—¡Yo no me parezco en nada a ti!— Rugió el hombre lobo, enojado.

—¡Por su puesto que si!, mira. Ambos hacemos lo que sea necesario para sobrevivir, lo que sea necesario.— Hizo énfasis en aquella última frase.— Hemos matado a personas inocentes. Claro que, con la diferencia de que yo lo he hecho con unas miles, pero tú... ¡tu eres peor!, yo realmente no tenía ningún vínculo emocional con las personas a las que asesiné, solamente me importaba conservarme con vida, ya sabes, alimentándome de su caos mental y exterior, también del dolor.

>> Pero tú...— Soltó una risa, en parte llena de burla, por la otra, extrañamente llena de fascinación.— ¡Tu querías a esas personas!, primero, con Paige, era tu novia y tú... ¡Tu acabaste su vida como si nada!— Derek hizo una mueca, el nogitsune rió con más fuerza.

—La liberé de su dolor...

—Si, si, pero acabaste con ella. La pobre aún tenía toda una vida por delante. Luego, está toooda tu familia, chico, con eso realmente te luciste. Solo por una aventura con una chica mayor, y dejaste que ella los quemara... aunque es tu culpa, así que tú los asesinaste, Derek. Mataste a tu familia— Dijo con sorna.

Tú los asesinaste, Derek. Mataste a tu familia.

Tú los asesinaste, Derek.

Mataste a tu familia.

Derek.

Tu culpa.

Los ojos del pelinegro se llenaron de lágrimas. No, no, no... eso no había sido su culpa, el también había sido una víctima.

—Vaale, no nos quedemos ahí. También están estos chicos... ah sí ¡Boyd y Erica!, los pobres se unieron a ti pensando que tendrían una mejor vida, y resulta que lo que les esperaba era la muerte. Érica, no la supiste proteger, y la mataron, tú culpa. Boyd, bueno, lo mataste con tus propias garras, tú culpa.

Estaba cansado de esas dos palaras, ''tú culpa''.

¡No era su culpa!

¡NO ERA SU CULPA!

No... no era su culpa.

¿Verdad?, el... el no tenía la culpa de nada de eso

—No... yo no...— Susurró débilmente. Entre las cosas puestas en su cadena y las palabras del nogitsune, el estaba realmente afectado. 

—Admítelo, Derek, somos algo parecidos. Así que, únete a mi, seremos muy poderosos...— La mirada del nogitsune se oscurece y su sonrisa se llena de malicia.


Nota de la autora:

Bueeeeeeeeeeeno. Ya le tocaba sufrir a otra persona que no fuera Stiles, ¿no? u.u JAJAJAJAJAJAJAJAJA




©Ade

Void, void, void |Sterek| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora