Secondo Arco

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''Señor,

la jaula se ha vuelto pájaro y se ha volado y mi corazón está loco porque aúlla a la muerte y sonríe detrás del viento a mis delirios

Qué haré con el miedo

Qué haré con el miedo

Ya no baila la luz en mi sonrisa ni las estaciones queman palomas en mis ideas

Mis manos se han desnudado y se han ido donde la muerte enseña a vivir a los muertos

Señor,

El aire me castiga el ser

Detrás del aire hay monstruos que beben de mi sangre

Es el desastre

Es la hora del vacío no vacío

Es el instante de poner cerrojo a los labios oír a los condenados gritar contemplar a cada uno de mis nombres ahorcados en la nada.

Señor,

Tengo veinte años

También mis ojos tienen veinte años y sin embargo no dicen nada

Señor,

He consumado mi vida en un instante

La última inocencia estalló

Ahora es nunca o jamás o simplemente fue

¿Cómo no me suicido frente a un espejo y desaparezco para reaparecer en el mar donde un gran barco me esperaría con las luces encendidas?

¿Cómo no me extraigo las venas y hago con ellas una escala para huir al otro lado de la noche?

El principio ha dado a luz el final

Todo continuará igual

Las sonrisas gastadas

El interés interesado

Las preguntas de piedra en piedra

Las gesticulaciones que remedan amor

Todo continuará igual

Pero mis brazos insisten en abrazar al mundo porque aún no les enseñaron que ya es demasiado tarde

Señor,

Arroja los féretros de mi sangre

Recuerdo mi niñez cuando yo era un anciano

Las flores morían en mis manos porque la danza salvaje de la alegría les destruía el corazón

Recuerdo las negras mañanas de sol cuando era niño, es decir, ayer, es decir, hace siglos

Señor,

La jaula se ha vuelto pájaro y ha devorado mis esperanzas

Señor,

La jaula se ha vuelto pájaro

Qué haré con el miedo''

— Alejandra Pizarnik






©Ade

Void, void, void |Sterek| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora