dicianove-

2.4K 277 59
                                    

[m da una flojera increible hacer la imagen con el nombre del título, así q después la pongo jslkdjalksj]


El comienzo del caos, parte 1.

De todo y nada podía pasar en un minuto.

—¡Cora!— Gritó Isaac desesperadamente, tratando de acercase a la joven loba. El nogitsune la había arrojado junto al cuerpo de su hermano, pero se acercaba a ellos a paso lento, como un depredador que asecha a su presa.

La susodicha gimió de dolor y apretó fuertemente su estómago, también jadeó en busca de aire. El acónito quemaba y ardía, y los golpes recientes no ayudaban en nada a mejorar el dolor; levantó la cabeza y le dio una pequeñísima sonrisa al beta y como pudo, se arrastró hacia donde yacía el cuerpo de su hermano. Recostó su cabeza en el pecho de este y suspiró.

Lydia yacía en el suelo, inmóvil y con los ojos cerrados. Aún no estaba muerta, pero no faltaba muy poco para que lo estuviera. Los onis también usaban katanas y lamentablemente, ella estaba frente a uno de ellos cuando empezaron a atacar; Liam trataba de despertarla, alarmado al escuchar su latido tan débil.

Kira estaba llorando y sostenía su katana de forma temblorosa apuntando a un oni con ella. —Por favor, Stiles...— Lloró, mirando por un momento al castaño.

Malia estaba transformada; sus ojos brillaban en un azul eléctrico, sin embargo, parpadeaban del azul a su color normal a cada segundo. Su rostro lucía una expresión de genuino dolor y jadeaba por el cansancio. Peter ayudaba a su hija y se le veía preocupado, aunque el no estaba nada mejor; cortes que empezaban a ponerse de un enfermizo color negro se veían por su rostro y cuerpo, también algunos golpes que, a causa de las heridas ocasionadas con el acónito, no se curaban. Pero, el estaba más preocupado por su hija, que por el mismo.

¿Quién esperaría esto de un psicópata?, pensó el nogitsune.

El nogitsune rió. Que escena tan conmovedora y dolorosa... era justo lo que ansiaba, lo que necesitaba.

Ambas katanas estaban en sus manos, y ambas estaban cubiertas de sangre, oscura, espesa y rojiza, al igual que el cuerpo de quien las portaba. Su rostro poseía una calma que se antojaba imperturbable, rompiéndose un poco esa calma con la sonrisa divertida y maliciosa que distorsionaba su rostro de manera espeluznante con ayuda de las gotas de aquel líquido rojizo que lo cubría.

—¿Quieren jugar?, pues vamos a jugar.

—¿Quieren jugar?, pues vamos a jugar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Una hora antes...


Su olor los había llevado a una vieja construcción en ruinas a las afueras de Beacon Hills. Rodeada por un espeso y profundo bosque; una pequeña y desgastada puerta de madera estaba entreabierta y algo rota, no obstante, estaban seguros de que era allí, ya que en el lugar había una fuerte concentración del olor de Stiles y Derek.

Void, void, void |Sterek| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora