10: ¿Protección o traición?

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Hoy era jueves 26 de Octubre de 1989, la mañana fue lluviosa y la tarde nublada, a juego con el estado de ánimo de JaeHyun, quién se aseguró de irse antes de que Doyoung se despertara para que no viera los restos de lágrimas que quedaron en su rostro.

En el caso de Doyoung, este estaba más bien emocionado, porque hoy vendrían su abuela y su tía a cenar y por fin conocería a la familia de su madre que había dado por perdida. En la mañana se quedó haciendo la tarea que estaban haciendo sus compañeros en clase estos días que no estaba yendo a clases, igual que sus amigos. Por la tarde recibió visitas de sus compañeros que querían saber como estaba, les dijo que simplemente le dio un ataque de alergia, excusa que también usaron Woo y Rosie, y parece que funcionó.

Poco antes de que anocheciera quedó con Rosé en la casa de JungWoo, tenían mucho de qué hablar. Acongojado, llamó a la puerta de los Park, en menos de dos minutos fue recibido por Park Jung Soo, este le miró con una sonrisa corta y se apartó para dejarle pasar.

— ¿Cómo estás?– preguntó el alfa–

— Bien, pero avergonzado. Lo siento mucho por lo de ayer, estaba fuera de mi mente– dijo el chico con timidez sentándose en el sofá del salón y siendo observado por el señor Park desde la distancia–

— Lo sé, Jong Woon también lo sabe. No creo que te lo puedas imaginar, pero hemos vivido situaciones de este tipo antes, cuando teníamos tu edad pasamos por demasiadas cosas.

— ¿Cómo hago para controlarme?– cuestionó realmente angustiado–

— Tiempo al tiempo, hijo. Me ha dicho tu madre que esta noche os visitarán su madre y hermana, tu abuela es una de las personas más inteligentes y sabias que llegarás a conocer, es la persona indicada para ayudarte, así que no te preocupes.

Le dedicó una sonrisa al amigo de su hija a modo de intentar darle optimismo, era como un hijo para él, le había visto crecer y le entristecía que tuviera que pasar por esto siendo tan joven. No es fácil descubrir que no eres lo que creías ser, que perteneces a una especie que se considera mítica siendo más bien legendaria, que en la jerarquía de tu especie te encuentras en el último eslabón y que una voz en tu interior está sedienta por un chico que apenas conoces y te has encaprichado de él de manera ilógica.

En medio del silencio, la chica bajó las escaleras rápidamente, vestida con ropa holgada y una cara muy seria, Doyoung casi podía oler su descontento desde la distancia. Rosé fue hacia donde estaba su amigo, le agarró de un brazo y le arrastró hasta la puerta.

— Adiós papá.

Padre e hija se despidieron y Rosé se llevó a la fuerza a Doyoung por el camino, casi haciéndole daño en la muñeca y a un paso muy rápido.

— Rose...Rosie...¡Park Rose Anne!.

La chica paró en seco y soltó la muñeca de su amigo, la inspeccionó y se reprendió por lo enrojecida que la había dejado.

— Lo siento Doie, no sé que me pasa- la chica arrastró una mano por su rostro y Doyoung pudo perfectamente apreciar como de sus bonitos ojos brotaron lágrimas-

— Hey, ¿estás bien?, anda ven aquí– dijo para después atraparla en un abrazo que ella correspondió desesperadamente, era obvio que necesitaba consuelo–

— Doyoung...hueles raro.

— ¿Qué?, me he duchado esta mañana.

— No, me refiero a que no hueles a ti, apenas noto tu olor usual. Déjalo, seguro que sólo son imaginaciones mías.

Sin más que decir, fueron caminando hacia la casa de su amigo. Por el camino fueron en silencio, pero uno cómodo, con Rosé todo se sentía cómodo.

Traidores | JaeDoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora