—Sería demasiado gasto, mamá.
—Pero quiero hacerlo, ¿qué vas a hacer tú allá sola? No seas tan terca, Kristen, y deja que te pague el vuelo —insiste. Ya mi madre está planeando todo para acción de gracias y no hace poco inició el mes.
Está insistiendo en que vaya, pero es muy poco tiempo como para pagar avión de ida y vuelta si los veré para navidad. No es como si tuviéramos dinero de sobra como para darme ese lujo, es un viaje a otro continente de lo que habla, no a otra ciudad.
—No te preocupes por mí, mamá, puedo quedarme con algún amigo.
La escucho suspirar decepcionada.
—Volveré a insistir en la próxima llamada.
—Yo también te quiero —digo ignorando sus palabras.
—Cuatro bonitas palabras tuyas no me van a convencer —refuta y río.
Esa mujer es increíble. Mi madre continúa hablando un poco más, es muy buena alargando conversaciones en el teléfono. Podría pasar horas y horas con un celular pegado a la oreja y no agotar los temas de conversación. Cuando logro finalizar la llamada con mi madre ya es lo suficiente tarde como para tener que ir a trabajar.
No hay quien calle a esa mujer. Por Dios.
Llego a mi trabajo a la hora correspondiente, Maya ya se encuentra atendiendo un par de mesas y la chica con la que cambio turno se va en cuanto me ve entrar por la puerta. Le sonrío a Royce y ayudo a Maya con sus cosas.
—No te vi en toda la noche —dice subiendo y bajando las cejas.
—¿De qué hablas? —inquiero.
—La noche de Halloween. ¿Qué pasó entre tú y Ryder? Parecía que se divertían.
Niego con un gesto.
—Pues no pasó nada que no hayas visto, pasamos el rato charlando y bailando.
—Y se fueron temprano también —señala.
—Tenía clases por la mañana, no iba a pasar la noche entera ahí.
—¡Vamos! ¿Eso fue todo? ¿No se besaron ni nada? —No puedo evitar reír ante sus palabras.
Me cruzo de brazo y alzo ligeramente mi mirada hacia ella, ya saben que soy la persona más baja de la faz de la tierra, seguro mi hermana menor está más alta que yo.
—¿Acaso tú te besaste con Brayden en su primera cita?
—No era una cita de verdad.
—Por supuesto, porque él aceptó la cita doble de mentira.
Royce se interpone entre nosotras interrumpiendo nuestra conversación.
—No sé ustedes, pero hay mesas que atender —dice dejando un plato frente a Maya.
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Seis Razones Para Cada Problema [Libro I] ✔️
General FictionMaya, Ryder, Kristen, Brayden, Shawna y Garrett van a la misma universidad, recorren los mismos pasillos y no tienen una razón para ser unidos, hasta que ciertos problemas llegan a sus vidas, hasta que ellos son el problema. ¿Cómo la vida de seis jó...