Y ahora somos tres... [COUNTRYHUMANS!ARGCHI]

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Me desperté cerca de 15 minutos después, creo. Aún estaba cansando luego de 10 horas de trabajo y luego de medio escándalo que metimos, debería estar más que muerto durmiendo. Maldito insomnio. Estuve unos minutos tratando de volver a dormir, pero no lo conseguí, Arge estaba raja y llegando a roncar. Di un suspiro antes de levantarme, una ducha le vendría bien, aparte debía cerrar el agua.

Mire a Nicolás que estaba en la cuna antes de meterme al baño, destapándolo un poco, estaba colorado, más de lo que era. Tal vez quisiera un biberón.

Le dolía un poco el poto.

Me metí en la ducha poniéndome bajo el chorro, podría tomar otra cerveza antes de dormir... ¡¿Y MÉXICO?! Mierda, lo voy a llamar después, capaz que ya me lo secuestraron al pobre. Me bañe lo más rápido que pude para salir. Me puse mi pijama, para buscar mi celular, estaba en mi saco.

5 mensajes nuevos, 2 llamadas y 1 solicitud. Uh, pero ninguno era México era ¿USA? Puff no me dirigió la palabra en todo el día y ahora venía a molestarme, lo ignore y llamé a México.

—¿Mande...?

—¿México, estás vivo? ¿Dónde estás?

—Si, wey... Pe-Pero no...Wait a minute baby... ES VIERNES DE AHORCAR ROCAS A LA VERGA. —Me colgó, bueno una forma sutil de decir qué se consiguió mina. Suspire, no le voy a abrir la puerta después. Tendí la cama de nuevo y fui a buscar a Arge lo levanté apenas cargando para dejarlo en la cama, le puse su camiseta antes de taparlo, ni siquiera se despertó, pero otro niño si, Nicolas amenazaba con llorar mientras intentaba voltearse.

Encendí la luz, para verlo. Puta Arge no le puso el pijama, no le costaba nada. Vi que necesitaba saciar un bajón de a las 3 de la mañana, y tal vez quiera dormir con nosotros hoy. Si, si, mi guagüita la había extrañado, me hizo mucha falta, tanto que me había dado ganas de llorar cuando se fue con Arge. Lo tomé en brazos para bajar a la cocina, yo también tenía hambre, tenía ganas de unas sopaipillas con mostaza o un rico mote con huesillos bien helado sentado en la plaza. Estaba más oscuro que la xuxa, rece por no chocarme con nada y llegar a la cocina ¿Qué harán hecho pa' comer estos weones? Puse el hervidor, abriendo el horno. OH QUE RICO PIZZA.

—Waa...—Me gimoteaba Nico, viendo sacar la charola para sacar un plato, que si él no puede comer, ni siquiera tiene dientes. El coche no se lo trajimos, la embarramos con eso ¿Dónde lo puedo sentar? Le hubiese pedido la silla a Ale...Y HABLANDO DE ESE WEON, les cuento que paso, estuvimos en la reunión piolita, compartiendo datos, puntos de vista y escuchar a OCDE hablar como cotorra y nos dieron 10 minutos de descanso por que ya teníamos el poto cuadrado de tanto rato sentados. Ya yo salí a darme unas vueltas mientras México se iba al baño y, que empiece el flashback porfa...

"—¡Chile!—Escuchó por detrás el Chileno, tuvo dudas de voltear porque sabría que lo golpearía si seguía insistiendo con su estúpido y sucio dinero. Sabía que Alemania vivió y vive cargando con las cosas de su padre, que toda su vida estuvo dando disculpas y compensaciones monetarias, lo mismo es en nuestro caso, pero es tan complicado y no sabia porque. No sabía en qué minuto todo se volvió tan desastroso.—Espera, quiero hablar contigo.

—¿Es personal?—Pregunto lo obvio. Volteándose seriamente. Estaba listo para pelear, de hecho en su mochila estaba toda la plata que le había depositado, se la devolvería o la quemaría al salir de allí.

—Si.—Murmuró el Europeo. Se quedó callado un segundo, antes de hablar mientras se quitaba los lentes para sobar sus ojos.—Mira, Chile, lo lamento.—Esto tomó por sorpresa al chileno, pensó que lo volvería a insistir.—No quise ni ofenderte, ni insultar a tu familia o pensar mal de ti, no se porque lo hice, pensé que te ayudara un poco...—Dio un suspiro.—Solo creí que te-