Y ahora somos tres... [COUNTRYHUMANS!ARGCHI]

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Abrimos la puerta, encontrándonos con medio mundo en la sala. Salude con la mano sin residir mayor gesto de vuelta. Fui a la cocina, debía prepararle el biberón a Nico antes de que se volviera loco. Puse el agua caliente, ignorando por completo si había alguien más ahí, quería dormir. Y despertar solo para ir a la oficina y ahogarme en la indiferencia de una gran habitación. No demoró mucho. A veces me gustaría ser un bebe de nuevo, sin preocupación...ni conciencia. Y que chile me cuidara. Subí a la habitación encontrándome con gente, que no me tome el tiempo de identificar. No quiero más interacciones sociales hasta las 5 de la mañana, Gracias.

Cerré la puerta detrás de mí. Nico sollozaba un poco ¿Nos extrañó?

—Cuba dijo que no pudo calmarlo.—Aún estaba en la cuna. Lo tome y me recosté para darle de comer, apenas sintió que le acerque la parte de plástico, empezó a tomar. Maldición estaba hambriento. Lo siento, fue patético de mi parte irme corriendo. Mi bebe no volverá a pasar, lo prometo. Te daré un poco de mermelada luego. —¿Te bañas mañana o ahora?

—Mañana.—Odiaba ir a bañarme temprano, pero no tenía fuerzas. Cerró la puerta con llave, antes de empezar a desvestirse. Mi flaquito, seguía siendo un palito. Miré a Nico quien empezaba a posar sus manos en el biberón solo, aunque necesitaba un poco de ayuda. Ya iba por la mitad. Este niño comía como si no lo hiciera nunca.

Cerré los ojos. Dando un suspiro, si me dormía daba igual...

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—Ya, dejemos a tu papá dormir.

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¿Saben el típico frío que hace en la madrugada, que es como húmedo? Pues eso sentía en las bolas. Los pájaros estaban empezando hacer su quilombo de mierda con los "Pio pio" Abrí los ojos, viendo a Chilito con su teléfono.

—¿Qué hora es?—Pregunte acomodándome para quedar sobre su brazo.

—Cuatro y media.—Respondió dejando su teléfono a un lado para abrazarme dejándome esconderme en su pecho.

—¿Dormiste cierto?—Susurre. Olía muy bien, su perfume era muy varonil. Rico.

—Mmhm~—Eso era un sí.—Aspire su aroma de manera sonora sacando una risita.—Oye...—Lo mire por unos segundos. Recuerdo que teníamos algo pendiente aún, podríamos darnos un pequeño break de todo esto. Tome su mentón, para unirnos en un beso un tanto ansioso, tome el cubrecama para, digamos, escondernos del frío o de algún imbécil que nos interrumpiera. Pase mis manos para acariciar su costado, subiendo su camiseta mientras atrapaba sus labios de manera juguetona con los dientes. Los chasquidos se hicieron presentes, sacarlos una risita cómplice. Tenían 15 minutos para regalonear un poco más.—Te amo mucho.—Mi precioso, me separé para darle un beso en su manzana de Adam, sacándole un suspiro. Tenía una idea, una que después me ganaría alta piña en la cara. Comencé un recorrido de besos hasta llegar a su costado, pero antes tomé sus muñecas, se intentaría escapar. —Ni se te ocurra tenemos que...PERO WEON.—Atrape su piel entre mis labios succionando con fuerza, lo quería bien marcado, era difícil hacer un chupetón si tenía la piel tan roja debía dejarlo morado para que se notara más. --Ya po' me van a retar—¿Y qué mierda me importaba lo que dijera la OCDE o la ONU? No lo solté hasta que lo sentí suficiente. Una linda marca. No la pude apreciar mucho, porque me botaron de la cama. --¡Ya! Te pusiste tonto... Anda a bañarte.