Epílogo

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Los nervios se sentian en el aire, finalmente los demonios, las brujas y mi tía llegaron, ella estaba en el centro de todos, a su derecha los demonios con Demon en el centro y a su izquierda las brujas con la suma sacerdotisa del aquelarre más fuerte también en el centro. Por otra parte, mi manada, mis padres y yo estábamos en el centro, a mi derecha Derek con su manada y a mi izquierda Eros con el reino. El rey demonio al verme me guiña sutilmente el ojo, le devuelvo una pequeña sonrisa y me concentro en Dulce.

-¿Están listos?- pregunta mi tía con la mirada fija en mí.

-Si, aunque todo esto se puede esto se puede evitar- le digo esperando que reflexione.

-No tienen opción- dice comenzando a acercarse. -Mejor dicho, si tiene dos opciones, luchan o me entregan la manada y el reino-

-Saben que jamás hariamos eso- contesta Eros a mi izquierda, mi tía nos dirige una pequeña sonrisa y luego mira a mis padres.

-Tanto tiempo querida hermana- saluda a mi madre pero ella la ignora. -Bueno, llego la hora, ataquen- dice y los demonios y las brujas comenzaron a correr hacia nosotros.

-No maten a los demonios, son aliados- digo a todos mediante el link mental y comenzamos a correr hacia ellos.

En ese momento se desato la guerra, las brujas comenzaron a lanzar hechizos hacia nosotros pero al notar que no hacían efecto alguno se acercaron para empezar a luchar, muchos lobos peleaban con las brujas y otros con demonios, al igual que los vampiros, mis padres también luchaban con brujas mientras yo buscaba a mi tía.

Sin esperarlo soy empujada con mucha fuerza contra un árbol, me recompongo rápidamente y miro donde antes estaba parada y me encuentron con Dulce sonriendo mientras me mira, comienza a acercarse por lo que me preparo para atacarla, una vez frente a frente comenzamos a luchar cuerpo a cuerpo, yo lanzaba varios hechizos hacia ella, algunos impactaban mientras otros simplemente los evitaba, seguimos luchando por un largo rato hasta que escucho muchos pasos viniendo de nuestra izquierda, todos dejamos de pelear, antes de mirar hacia el lugar del que proviene el sonido noto que Dulce sonríe. Lobos, toda una manada de lobos, miro hacia donde están mis padres y estaban igual de confundidos que yo.

-Llegaron- susurro Dulce sin despegar la vista de los recién llegados. -Les presento a la última manada de lobos salvaje que existe en el mundo- miro nuevamente a mis padres y la cara de terror era notable, comencé a preocuparme.

-Demon, ¿vos sabias de esto?- pregunto mediante un link creado exclusivamente para esta situación.

-No, no sabía nada- me contesta igual de preocupado que yo.

-Hay que unir fuerzas ahora- digo y corto el link, los recién llegados se transforman en humanos y el que parece ser su líder sonríe mientras da un paso al frente.

-Hola a todos, me presento soy Nate- el recién llegado fija la vista en mi tía y luego en mí. -Un placer conocerla majestad- sonríe nuevamente con todos los dientes amarillos.

-Diria lo mismo en otras circunstancias- digo sin bajar la guardia.

-Basta de tanto hablar- dice Dulce comienza a luchar nuevamente contra mí, escucho como todos empiezan a luchar pero esta vez los demonios luchaban contra los recién llegados, Dulce observa a nuestro alrededor y nota como los demonios no estaban luchando contra nosotros. -Eres una maldita- dice mi tía y me sigue atacando.

-¿Así es como tratas a tu sobrina?- pregunto mientras lanzó un hechizo hacia ella y le da lastimando su pierna de gravedad haciendo que caiga al piso, ella se gira y hace una señal hacia una bruja, esta desaparece pero vuelve a aparecer justo detrás de mis padres que luchaban juntos contra unos lobos, ellos notan la presencia de la bruja y se mantienen al margen, la bruja le lanza un hechizo a mi padre que pudo penetrar la protección del collar y lo dejó inconsciente, esta toma a mi madre y antes de que intente algo contra ella le lanzó yo un hechizo pero lo esquiva, me mira a los ojos y atraviesa el pecho de mi madre con su mano arrancando su corazón.

No podía creer lo que estaba viendo, mi madre comienza a escupir sangre y cae de rodilla para luego caer sin vida contra el suelo. No sabía que hacer me quedé congelada en mi lugar mirando el cuerpo sin vida de mi madre.

Todo ocurrió en cámara lenta, uno de mis guardias se acercó a la bruja que mato a mi madre y la atacó, note a Eros acercarse a nuestra madre, podía escuchar que Demon daba instrucciones pero no podía entender lo que decía, Derek se posiciona frente a mi, me toma de los hombros y me habla pero el shock no me permitía escuchar nada, las brujas y los lobos comenzaron a irse rápidamente, Demon mandó a los demonios a seguirlos y estos lo hicieron a gran velocidad.

Mis piernas comenzaron a fallarme haciendo que pierda fuerza y caiga de rodilla, veía a Eros hablarle a nuestra madre mientras lágrimas caían de sus ojos, mi padre se fue despertando lentamente, Caleb lo ayudó a levantarse del piso, al principio no entendió nada hasta que dirigió la vista hacia donde estaba la de todos, rápido se acercó a Eros para ayudarlo con mi madre pero ya era demasiado tarde. Unos brazos me envolvieron mientras sentía como lágrimas caían por mis mejillas, el que me abrazaba era Derek, lo supe por su aroma. En ese momento salí del shock y comencé a llorar apoyando mi frente en el hombro de Derek, él me abrazo más fuerte haciendo que solloce cada vez más y más, me separe de él y me levante del piso, mire hacia donde mi tía estaba, rodeada de guardias, aun herida en el piso y me acerque.

-¿Esto es lo que querías? ¿Matar a tu propia hermana?- le pregunto gritando mientras hago un hechizo para que se levante y le corto la respiración. -Eres una demente, tu castigo va a depender de las acciones que cometiste en tu vida- digo y me seco las lágrimas, miro a mis guardias para que la tome y así lo hacen. -Llevenla a la celda con más seguridad que hay- término de hablar y me giro para ver hacia donde está el cuerpo de mi madre, me acerco lentamente hasta quedar frente a mi hermano y junto a mi padre.

-Debemos llevarla a tu manada- dice Demon detrás mío apoyando su mano en mi hombro, yo asiento soltando algunas lágrimas. Algunos guardias vampiros se acercan, hacen una reverencia en honor a mi madre y levantan lentamente su cuerpo, comienzan a caminar hacia nuestra manada, yo miro a mi padre y lo abrazo, ambos lloramos y luego se une Eros al abrazo.

-Debemos irnos- nos habla Caleb, vuelvo a asentir y nos separamos, seco mis lágrimas y caminamos hacia mi manada. Debíamos dar la noticia de que su reina falleció a manos de su hermana.











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