Hibrida

Capítulo 37

-Bueno, vamos Eros que te mostraré cuál será tu habitación- le digo una vez terminamos el abrazo, él le dedica una sonrisa a nuestros padres y comenzamos a subir las escaleras, al llegar al tercer piso, dónde están nuestras habitaciones camino hacia donde está mi habitación pero me paro en la puerta de enfrente.

-Esta es mi habitación- señaló la puerta que está detrás de mí. -Aquella es la de Ari- señaló la puerta que está junto a la mía. -Y la de enfrente es la de nuestros padres- Eros asiente entendiendo. -Esta es tu habitación- abro la puerta y espero a que el pase para después pasar yo con Ari, Eros observa toda la habitación, es igual de grande que la mía pero en colores azules.

-Es muy linda- dice sonriendo, mira todos los lugares y luego observa lo que es el armario y el baño.

-Si necesitas ayuda para buscar tus cosas hay guardias por toda la casa, puedes pedirle ayuda a ellos- el asiente. -Nosotras estaremos en la habitación de esta pequeña- digo haciendo reír a Ariadna.

-Alfa- escucho que un guardia me habla desde la puerta y yo me giro para mirarlo. -Tenemos problemas en la plaza central- suelto un suspiro y salgo detrás del guardia, escucho como Eros me sigue, al llegar al primer piso veo a la niñera de Ari por lo que se la paso y salgo de la casa, me transformó en lobo y corro hasta la plaza central, al llegar me transformó en humana y observo como los guardias se pelean entre si en forma de lobo y en forma humana.

-¿Que fue lo que pasó?- le pregunto al guardia que llegó conmigo y Eros.

-No sabemos, se empezaron a gritar, a empujar y terminaron peleándose- dice el guardia, yo miro a Eros y me acerco.

-¿Sientes lo que yo?- le pregunto y el asiente, el ambiente estaba pesado y tenía un presentimiento en el pecho.

-Magia negra- dice y esta vez yo asiento, miro a todos a mi alrededor, mucha gente se estaba amontonando para ver lo que pasaba mientras los guardias se seguían peleando.

-YA BASTA- grito con mi voz de Alfa y mis ojos dorados, todos los guardias se quedaron en su lugar sin pelearse, la gente que estaba a nuestro alrededor me miraron con miedo. -Quiero a todos los guardias que estuvieron implicados en esto en mi oficina, tienen 5 minutos y si ven a mi Delta que también vaya- le digo con mi voz de Alfa al guardia que estaba conmigo, el asiente y se va hacia donde están todos. -Pueden seguir con lo suyo- le digo a mi manada y poco a poco se dispersan, cierro mis ojos y al abrirlos ya estaban normales, miro a Eros y comenzamos a caminar hasta casa.

-Eres una buena Alfa- me dice y yo le dedicó una sonrisa.

-Esta en nuestra naturaleza ser buenos Alfas- le digo ya que el debe ser coronado igual que yo como Alfa pero no como Rey, al yo ser mayor que el por minutos me corresponde el reinado.

Llegamos a casa y ambos pasamos directo a mi despacho donde yo me senté en mi silla y Eros se sentó en los sillones que están a un lado.

-¿Conoces alguna bruja?- me pregunta Eros mientras yo leía unos papeles que debía firmar, yo niego con la cabeza.

-No, a ninguna ¿Tú?- le pregunto y asiente.

-Una bruja fue la que entreno mi parte de hechicero, solo que era una bruja "buena"- dice haciendo comillas con los dedos, la puerta es golpeada haciendo que dejemos de hablar.

-Adelante- digo mientras acomodo los papeles que estaban en mi escritorio, por la puerta ingresan 10 de mis guardias junto a Yanet, ellos salieron del colegio hace unas 2 horas.

-¿Me mando a llamar Alfa?- pregunta Yanet y yo asiento.

-Primero necesito saber que paso entre ustedes- señalo a los guardias, le hago una seña a Yanet para que se pare a mi lado y así lo hace.

-Estábamos en la frontera sur y nos pareció escuchar un ruido, nos acercamos pero no había nadie en el lugar, volvimos a nuestros puestos pero otra vez se escucho un ruido mas cerca nuestro, no nos movimos hasta que apareció una señora enfrente nuestro, estábamos por atacar cuando lanzo el hechizo hacia nosotros, después de eso ninguno recuerda nada hasta que usted nos grito haciéndonos reaccionar- me cuenta uno de los guardias, yo asiento y miro a Yanet.

-¿Cubrieron la frontera que quedo desprotegida?- le pregunto y ella asiente.

-Si Alfa, minutos después de lo sucedido fue el cambio de turno- esta vez yo soy la que asiento.

-Se pueden retirar- les digo a los guardias. -Yanet, encárgate de aumentar la guardia en las fronteras y si ves a Caleb dile que venga, necesito hablar con él, tiene bloqueado el link- ella asiente y se retira cerrando la puerta detrás de ella.

Suelto un suspiro cansado y me dejó caer sobre el respaldo de la silla, me quedo pensando quien puede conocer una bruja, la primera que se me viene a la mente es mi abuela, ella es una vieja hechicera, alguna que otra bruja debe conocer, el carraspeó de la garganta de Eros me hace levantar la vista de mi escritorio donde estaba fija para ver a Caleb que estaba parado a unos metros de lo escritorio con las manos detrás de su espalda, estaba tan metida en mis pensamientos que ni escuché cuando entro a mi despacho.

-Me dijeron que necesitaba hablar conmigo Alfa- dice Caleb con una expresión neutra en su rostro, miro hacia Eros y le hago una seña para que salga un momento de la oficina mientras hablo con Caleb.

-Asi es Caleb, necesito saber cuál es su decisión- le digo y me mira extrañado. -Hoy por la tarde le di dos opciones, aceptar a mi hermano o retirarse de mi manada, necesito saberlo ahora para buscar otro Beta en caso de ser necesario- el suelta un suspiro y fija su mirada en la mía.

-No sería capaz de abandonar la manada que me dió asilo cuando más lo necesito mi familia, por más que me cueste debo aceptar la presencia de otro superior en la manada- dice serio, yo asiento, me levanto y me acerco a él.

-Se que te va a costar aceptar la presencia de Eros por todo lo que me hizo en el pasado, pero tenés que entender que es mi hermano y por más que hace poco se de su existencia, él es parte de mí, porque es mi gemelo- le digo apoyando mis manos en sus hombros. -Y me alivia muchísimo no tener que reemplazar a mi mejor amigo y Beta- le digo sonriendo, el sonríe junto a mí y luego me abraza, yo le devuelvo el abrazo, rodeando su abdomen con mis brazos.

Perdón por no publicar el lunes pasado, tuve parciales toda la semana pasada y no había terminado de escribir el capítulo pero hoy van a tener doble capítulo, este y a la tardecita voy a subir el otro.