Fragmentos

Cumpleaños

Todos los años esperaba un regalo;

algo digno de mis hazañas, digno de mis esfuerzos.

Mas no recibía ni un palo;

sólo migajas, y más decepciones para pintar en mis lienzos.

Tal vez fue mi error el no pedir nada.

Siempre fui considerado, mi boca permanecía cerrada.

Entendía nuestras penurias y las aceptaba.

Aunque con otros fueran más generosos mientras yo sólo observaba.

Y no, no era envidia;

de mis labios nunca escucharon una queja.

Tampoco me fastidia,

al final lo entendí y ya no me acompleja.

En cada cumpleaños esperaba un regalo, ahora no espero nada.

Ni de ustedes, ni de los demás.

Qué estúpido era antes creyendo en cuentos de hadas.

Pero no planeo hacerlo más.

Los frutos de tu trabajo darán resultado...

¿Algún día creeré en ese aforismo?

No voy a parar hasta haberlo logrado.

De la única persona que esperaré algo será de mí mismo.

Haré hasta lo imposible por darme el mejor regalo.

Pavimentaré mi felicidad a través del dolor.

No me importa si me caigo o me resbalo.

Me levantaré y encontraré el anhelado amor.