don't leave me (Cedric Diggory)

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Narrador omnisciente:
Tortura.

Eso era lo que les estaba haciendo pasar Umbridge. Un período de tortura.
-Estoy harta de esto.- dijo Cora.

Los gemelos y ella, decidieron ir a consolar a los niños más pequeños que pasaban por los castigos medievales de esa bruja.

-Os ha quedado claro? Los niños malos...deben ser castigados.- dijo con una sonrisa arrogante.

-Sabes George, siempre he pensado que nunca se nos han dado bien los ámbitos académicos...sabes a lo que me refiero?
-Fred, estoy pensando exactamente lo mismo que tú.

-Se puede saber que vais a hacer ahora?- les preguntó Cora de brazos cruzados.

Fred y George se miraron y asintieron.
-Cora...nuestro tiempo en Hogwarts se ha acabado.- empezó George.

-Si, queremos empezar nuestro negocio cuanto antes...- dijo Fred.- Lo sentimos pero...

Cora los abrazó a los dos. Sabía que se tenían que ir de Hogwarts y sabía que le iba a doler pero eso no importaba. Si ellos eran felices, ella los iba a apoyar en todo.
-Os voy a extrañar, lo sabéis no?- dijo a punto de llorar.

-Cora...no hagas esto más difícil.- dijo George sonriendo.

Quisieran aceptarlo o no, Cora era muy importante para ellos.

-Además...nos veremos cuando acabe el curso.- dijo Fred.

-Lo sé...- dijo la chica apartándose.- Solo...que aún recuerdo el primer día que nos vimos, más bien el día que me hablasteis...y vaya, cuanto me habéis cambiado.

-Y como no acordarnos...eras más bajita que ahora.- dijo George despeinándola.
-Si, me acuerdo que dijiste que no éramos tus amigos. Y te fuiste sin más....aunque ahora no se si puedas decir lo mismo.

-Gracias por todo chicos.- dijo secándose las lágrimas que le empezaron a caer.

Así pasaron lo que quedaba de día, Cora ayudó a los gemelos con los últimos retoques de su gran salida, tenía que ser perfecta según la chica. Y muy ruidosa.

Querían que el apellido Weasley se recordara por mucho tiempo.

[...]
Cora:
Estaba en pociones, junto con Adrián. Pero no estaban los gemelos.

Sabía que había llegado el momento de su ida.

De repente se escuchó una fuerte explosión de lejos.
-Que ha sido eso?- preguntó Snape.

-Puedo ir a comprobarlo profesor.- dije a lo que el me asintió como aprobación.

Salí corriendo del aula y me apresuré para verlos por última vez.

Al llegar donde estaba el comedor, aún no habían terminado con el espectáculo.
-Listo Fred!?
-Listo George!

Entonces, lanzaron la cajita donde contenía el dragón.

Básicamente era un dragón gigante hecho de luces que se movía.

Este, se dirigió hacia Umbridge, quien no dudó en correr. Pero fue en vano ya que el fuego artificial explotó antes de que pudiera salir, rompiendo todas las normas que habían colgadas.

Fred y George salieron con sus escobas volando.
-Y RECORDAR! SORTILEGIOS WEASLEY ESTARÁ ABIERTO DENTRO DE NADA!
-TENDRÉIS UN DESCUENTO SI USÁIS NUESTROS PRODUCTOS PARA MOLESTAR A UMBRIDGE!

Todos aplaudíamos, realmente son asombrosos. Al igual que su despedida de Hogwarts.

Y ahora? Me tocaba sobrevivir a lo que quedaba de curso.

[...]
Narrador omnisciente:
La chica se encontraba en la biblioteca, sola.

Jeremy estaba con Jason así que...no le quedaba nadie con quien estar. Y quién mejor que tú mismo?

Mientras escribía uno de los tantos ensayos y presentaciones que les habían puesto empezó a recordar....

Cora había cambiado mucho.

Demasiado.

Pero para bien. El destino quiso que se encontrara a unas personas maravillosas. Y así fue.

Había tenido mucha suerte, sentía que les debía su vida a ellos. Por qué sin ellos, hubiera estado perdida. Sola.

Las lagrimas amenazaban con salir.

Había perdido a su hermano y a su madre por culpa de su...padre.

Sin embargo había seguido luchando hacia delante...con ayuda de todos, de una manera o otra.

Cora había aprendido a no confiar en todo el mundo, por muy inocente que se vea...gracias a Cho y Elizabeth.

Había aprendido que es bueno ser diferente y único, gracias a su amiga Luna.

También había aprendido a no hacer caso a los comentarios de odio, de envidia, gracias a Crabbe, Goyle, Angelina, entre otras.

También pensó en Fleur. Que habrá sido de ella? La extrañaba junto a sus amigas que la acompañaban...

Y después teníamos a Jeremy...quién la estuvo apoyando aunque ella al principio no le hacía caso...que no se había separado de ella.

También tenemos a los Weasley, la familia que la había acogido como una hija más, que le había dado cariño y amor, el amor que necesitaba para continuar adelante. Sin duda la ayudaron a superar varios obstáculos...

Y el más importante, Cedric. Aunque fuera una apuesta...así lo quiso el destino, el destino quiso que estuvieran juntos...y por muchas peleas, discusiones...siempre acababa en una disculpa.

Cedric le cambiaba la forma de ver el mundo. Los dos habían creado un vínculo especial...como predijo la profesora de adivinación...amor verdadero...

Unas palabras que en ese momento no supieron valorar.

Una vez se secó las lágrimas, y terminó el trabajo, se dirigió hacia su sala común. Habían sido...unos días agotadores.

De repente la chica escuchó unos sollozos provenientes del baño de Myrtle la llorona.

-Por qué lloras? No deberías....
-DÉJAME EN PAZ!

-Oh chico...te ves tan roto, tanto por fuera como por dentro.
-ME DA IGUAL QUE PIENSES QUE ESTOY ROTO, HE DICHO QUE TE LARGUES.

-Si así lo pides...

Cora entró y se encontró con la persona que menos se esperaba en esa situación.
-Draco?

El chico se giró inmediatamente secándose las lágrimas que recorrían su pálida piel.
-Lárgate!- dijo desesperado.

-Que te ha pasado?- Cora ignoró el hecho de que Draco solo la estaba insultando.

El chico estaba muy mal.
-He dicho que te largues! No es tu asunto ni te importa!

-Lo cierto es que han metido a su padre en Azkaban...- dijo Myrtle.- Por eso está llorando.

-Que sepas que esta me la guardo...- dijo Draco mirándola.- Y no, no estoy llorando.- intentó pasar para irse de allí pero la chica fue más rápida y lo abrazó.

Draco no sabía que hacer, no necesitaba un abrazo pensó.

Pero después de unos segundos se hundió y se aferró a la chica con todas sus fuerzas. Estaba demasiado dolido.
-Siento lo de tu padre.

El chico se separó de ella y la miró.
-No lo hagas. Gracias por preocuparte, pero no hacia falta.

Cora sonrió disimuladamente. Sin duda tenía mucho orgullo.
-Está bien...
-Ni una palabra a nadie de esto.- dijo volviendo a su postura de siempre.

-Mis labios están sellados.- dijo rodando los ojos.

Ese día, Cora también se dio cuenta que no todas las personas son lo que aparentan ser, gracias a Draco Malfoy.