▕ Capítulo 21: El límite en las personas

252 27 6
                                    

Las palabras del psicólogo quedaron en segundo plano. Lo único que había en mi cabeza eran las palabras de Sehun: "Me voy de la casa". Aún estaba pasmada. Mis esperanzas de volver con Sehun y recuperar mi matrimonio se fueron al tacho. Me sentía muy frustrada, enojada conmigo misma por ser tan estúpida, abrumada porque todo me salía mal. Hasta ahora no ha habido ni una cosa buena que mejore mi situación. Cada día me siento más miserable.

—He estado revisando tu análisis FODA.— igualmente eso no sirvió de nada.— Mira, Seol estamos avanzando de poco a poco, como la primera vez ¿Te acuerdas cuando llegaste a mi consultorio y estabas asustada?—asentí, ese día papá me acompañó a la primera sesión porque estaba asustada de fallar.— Tuvimos discusiones tú y yo. Tuviste subidas y bajadas. Episodios agresivos y de convulsiones. Creíste que nunca te ibas a recuperar, no te creías en ti misma pero al final sí pudiste, te demostraste a ti misma que sí podías enfrentar cualquier obstáculo por más difícil que sea. No muchas son las personas que salen verdaderamente rehabilitadas de una adicción. Estuviste años limpia. Te recuperaste, aunque tomó tiempo. Lo mismo es cuando una persona está dañada sentimentalmente como tu esposo. Solo tienes que darle tiempo.

Tiempo.

Estaba harta de escuchar esa palabra.

El tiempo solo me pone ansiosa. No soy una persona tan resiliente como piensa el psicólogo. Mi tratamiento duró mucho, sufrí en el proceso, dañé a las personas que amaba como a mi papá, pensé que dejarlo todo pero por suerte mi papá estaba allí para reclamarme y darme un sermón de que debo continuar luchando, si no fuera por él yo nunca hubiera tenido iniciativa propia. Sin embargo, ahora no tengo a nadie, solo soy yo y las adversidades que me están aplastando de poco a poco.

—Tiempo.—el psicólogo asintió.— ¿Tiempo de qué? Me cansé de dar tiempo para nada.

—Escucha, Seol. Sehun está dolido y decepcionado. Una infidelidad no es algo que se toma a la ligera. Él se va a recuperar solo debes darle tiempo, ello no se cura de la noche a la mañana. Tienes aún la esperanza de recuperar tu matrimonio, él no te ha pedido el divorcio, solo quiere un espacio para poder reflexionar, mejorar y sanar. Estas son las consecuencias de un matrimonio en el cual ya estaba fracturado y para que se vuelva a consolidar debes empezar paso a paso.

—Estoy tratando de ser fuerte, lidiar con todo el peso del estrés y la culpa, he buscado muchas alternativas para curar mi adicción, he querido reinvidicarme y dejar todo al tiempo para que las cosas mejoren pero nada funciona. Todo lo que hago, todo lo que digo, pareciera que nada ni nadie permitiera que de verdad mejore. Ni siquiera usted.— llevé mis manos temblorosas a mi cabeza y rompí en llanto.— Estoy harta.— había llegado a mi límite.

—Estabas controlando muy bien el estrés y la ansiedad. ¿Qué es lo qué pasó? ¿Acaso no estás haciendo los ejercicios de control?— los ejercicios no me ayudan en nada tampoco. Mis labios hicieron una mueca, el psicólogo se dio cuenta de ello.— ¿Has probado un cigarro?

Sí lo hice. Antes de venir a aquí compré un par de cigarrillos, estaba muy triste y fue lo primero que se me ocurrió para tranquilizarme, sin embargo me hizo sentir más nerviosa.

—Lo siento.— limpié mis lágrimas con mis dedos.—Solo fue un desequilibrio.

—Te dije que hay altos y bajos. No va a ser fácil superarlo. Encontraremos una manera de solucionarlo.

—Siento que no voy a mejorar si mi vida personal no mejora.

—Al contrario, Seol. Para tu vida personal y tú mejore debes enfrentar primera la adicción porque en la vida no todo es color de rosa, con el primer problema que te topes no vas a huir y ahogarte en la adicción si no que lo se quiere es que puedas enfrentarlo tú misma y sin asidero.— cielos, mi caso es muy desesperante.—Mira. No podemos juntar todo en un mismo problema porque eso solo lo haría más grande y difícil de sobrellevar. Nos hemos explayado mucho con tu matrimonio, ¿Qué te parece si primero mejor trabajamos en tu adicción? Nuestro principal problema a tratar será ese.— asentí, no muy convencida.

Historia de un Matrimonio © Oh Sehun ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora