Historia de un Matrimonio © Oh Sehun ✓

▕ Capítulo 17: Fortalezas «FODA parte 1»

Apenas dieron las dos de la tarde y yo ya estaba guardando y ordenando todo los documentos que tenía encima de la mesa. Debería seguir revisando puesto que en cuatro días la empresa sí que ha avanzado mucho, sin embargo no podía completar el trabajo si mi mente estaba pensando en cómo encontrar al chismoso.

Salí de la oficina y me dirigí a paso largo hacia el elevador. No obstante, Baekhyun se interpuso en mi camino.

—¿Comemos? Sé que te aclaré lo que pasaba por teléfono pero quiero ponerte al tanto de otras cosas.—señaló a Chaeyoung con la mirada. Ella estaba a solo unos metros de nosotros, alistándose para ir a comer. Quizás sea el por qué está molesta conmigo.

Pero ese asunto puede esperar. Primero es encontrar al impostor.

—Sí, eh. Gracias por tu invitación pero ya tengo con quién comer. Adiós.— Baekhyun me miró extrañado, quizá habrá pensado que lo estaba evadiendo.—Otro día hablamos.

El primero en quién sospeché fue en Jiseok. Es decir era el único que sabía de lo nuestro. Aunque no estoy del todo segura que él haya sido quién le dijera s Sehun, Jiseok es muy precavido en cuanto a ese tema. Él prometió no decir nada porque tampoco quería meterse en problemas.

—Me sorprende que me hayas escrito. Siempre soy yo el que está pendiente de ti.—dijo Jiseok mientras abría la bolsa en donde se encontraba los palillos. Jiseok me había invitado a un restaurante, él había pedido de comer, yo solo veía como comía puesto que no me iba quedar mucho tiempo con Jiseok; me confirma sobre mis sospechas y me voy.

En estos momentos estoy dando todo de mí para ser fuerte. Ya no iba a caer en sus dulces palabras. También quería cerrar este capítulo que solo trajo malas consecuencias.

—¿Por qué tan seria?— preguntó con una sonrisa juguetona.

Cielos, esa sonrisa. Agité mi cabeza. Tienes que tener fortalezas, Seol.

—Esto ya no puede ser más.

—¿A qué te refieres?—frunció el ceño.

—Lo que pasó la última vez no va a volver a suceder. Es decir, nada de coqueteos ni besos ni nada de ese tipo de cosas.—dije con voz firme.

—¿Para eso querías verme?—su semblante se tornó serio.

—Me cansé de jugar a los amantes, Jiseok. Ese juego terminó aquí. No me vuelvas a buscar y yo no te buscaré. Es lo mejor para los dos.

—¿Y por qué me dices eso tan de repente?

—Sehun se enteró.—solté.

—¿En serio?— su reacción no fue de sorpresa, eso me hizo sospechar más. Lo miré con los ojos entrecerrados.—¿Acaso piensas que yo se lo he dicho?—no respondí, a cambio él río. —No fui yo, Seol. Sabes que no quiero problemas.

—No sé si creerte.

—Es en serio, Seol. Ni siquiera he tenido tiempo para mí por el trabajo como para ir con el chisme a alguien que nisiquiera me importa. —asentí. Bueno, Jiseok estaba definitivamente descartado en mi lista de sospechosos.—¿No has pensado en tus amigos?

—Ellos no lo saben.

—Tal vez nos vieron.

—Si nos hubieran visto estoy segura que me lo hubiesen dicho, además no creo que se lo dirían a Sehun, no tendrían razón. Porque no creo que me quieran dejar mal, son mis amigos.

—No sé. Si yo fuera tú, sospecharía de todos.— rodé los ojos. Ignoré su comentario absurdo.

Ya no tenía nada más que hacer aquí así que me levanté de la mesa. Iba a dar el primer paso pero Jiseok habló:— Yo también quería decirte que me voy a Canadá.—fruncí el ceño, no entendiendo.— La clínica me trasladó allá. Me mudaré a Canadá, el tiempo que me quedaré es indefinido. Así que no te preocupes por si nos volvemos a encontrar por las calles.— Oh, eso me tomó de sorpresa. Eso quiere decir que no nos volveremos a ver ¿No? Por un lado me sentí liberada de la tentación. Sin embargo, por otro lado se sentía nostálgica puesto que aún me acuerdo de todos los momentos difíciles que pasamos juntos, pero tenía que dejarlo ir. —Te quiero, Seol. Me gustó el tiempo que pasamos juntos.— Solo asentí. No quería decir nada que después me vaya a arrepentir. Salí del restaurante.