𝕮𝖆𝖕í𝖙𝖚𝖑𝖔 4

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Bestia.

Despierto muy temprano y su gran brazo está alrededor de mi cintura, me trato de levantar pero no lo consigo, se pega más a mi culo y le puedo sentir su enorme cosa bien erecto, me remuevo incómoda.

-Maldita sea, quédate quieta.- gruñe.

-Suéltame, estoy que me orino.- chillo y frunce sus labios.

-Hazte encima.- ruedo los ojos y la golpeo en el hombro, pero mierda no debí porque me atrapó las muñecas con fuerza.

-No me haces ni cosquillas pequeña.- dice burlándome.

-Quieres dejarme ir a mear, antes de que mi vejiga explote por tu culpa.- digo con fastidio y de un rápido movimiento se sube encima mío y aquí vamos de nuevo, es que no se cansa de hacer lo mismo todos los días, desde hace dos semanas que estoy acá, me besa, me manosea a su antojo y después se va a tener sexo con otra, ¿Qué cómo lo sé?, Pues una noche salí de la habitación, escuché ruiditos, más bien gemidos de ella y con otra mujer, ¿Qué pretende? no sé, ¿Qué saca de todo esto? tampoco lo sé, pienso en otra cosa para no hacerme encima, mi vejiga no soporta y esta troglodita no razona, sólo usa su cabeza pero de abajo.

-Esta noche quiero que estés lista, vendré por ti a las ocho.- me suelta y me agarro las muñecas, es una bestia no mide su fuerza me deje marcas con tan solo ejercerla un poco.

-¡Que diversión por fin saldré del castillo!.- dije sarcástica y rodó los ojos.

-Siu te dirá que debes usar.- se levanta y camina hacia el baño, pero corro rápidamente antes de que ella llegué y cierro la puerta en su cara.

-Como digas.- digo cuando me desocupo por completo.

-Me las pagarás pequeña.- dice y reí divertida. Por supuesto que iré con ella a esa estúpida reunión pero se arrepentirá de hacerme pasar por todo esto y que no me ha dejado ver a mi tía, quiere guerra, guerra tendrá, todavía no conoce mi lado más "Dulce".

[...]

-Buenos días mi niña.- saluda Siu y me da un abrazo, esta señora es muy amable.

-¡Buenos días! ¿En qué te ayudo hoy?.- solté emocionada y me miró con sospecha.

-Sabes que no tienes que hacer nada para eso están las empleadas, tú solo ve y lee un libro o la televisión que sé yo, lo que hagan ustedes los jóvenes.- se encoge de hombros y niego con la cabeza.

-No me gusta quedarme quieta, desde muy pequeña me valgo por mí misma.- dije y sonrió.

-Como digas tú eres la que manda aquí.- murmuró y me cruzo de brazos.

-Claro que no, aquí la jefa es esa maldita bestia.- dramaticé y Siu río pero se quedó seria por unos momentos.

-Hablas de ti misma ¿Verdad?.- susurró en mi oído y respiré hondo para no perder mis estribos.

-No, hablo de una puta troglodita que no sabe mantener su pene dormido por cinco segundos.- espeté y me frotó su cosa frente a Siu, que vergüenza debo estar roja.

-Hazte cargo ya te lo he dicho.- susurró y mi piel se eriza, sí, maldita sea me estremezco con tan sólo su aliento chocar mi piel.

-Nunca.- dije y salí de la cocina, maldita idiota, jamás me acostaré con ella y darle mi primera vez a esa bestia no, no, no y mil veces NO.

LISA:

Esa pequeña niña me las pagará, ella es la que se pone esas mini pijamas donde su redondo y perfecto culo queda al descubierto y trato de contenerme pero la niña estúpida me la pone cada noche y luego se hace la inocente ¡Joder! Por más que esté con otras, mi polla sólo la desea a ella y ahora solo se la pasa parada, no me complace nada de lo que me hagan.

-Señorita, le sirvo el desayuno.- me interrumpió Siu mis pensamientos.

-No, iré al club, llévala a que se mida los vestidos para la reunión.- ordené.

-Sí.- respondió y yo salí.

Llegué al club, di las órdenes para que todo estuviera perfecto para la reunión "Familiar", solo espero que ________ se comporte y no haga ninguna estupidez.

-¿Cómo vaz con tu pequeña mujercita?.- inquirió Rosé.

-Bien supongo.- me encogí de hombros, la verdad todo va mal, mi deseo es más grande cuando estoy apunto de cogerla, y que estupidez me está matando.

-Supones, que hay de Wheein.- insinuó.

-Wheein trabaja aquí no hay nada con ella, nada más que sexo.- admito, tiene buen cuerpo es hermosa me lo hace poner bien duro, pero hasta allí aunque hay veces que se toma retribuciones que no debe.

-Sólo decía. ¿Quién crees que gane ________ o Wheein?.

-¿A qué te refieres?.

-Ya sabes una pelea por ti.- se burló.

-Y ¿Qué hay de tú y Jisoo?.- digo y ella arquea una ceja.

-Como sea, por cierto hoy llega Jiwoo.- dijo y se pasó la mano por el cabello.

-Esa perra.- murmuro, salí de la oficina, el resto del día sólo fue trabajo aburrido, ya quería que llegara la hora de ver a ________, quiero que conozca mi mundo, aún no le he dicho quien soy en realidad...

[...]

-Siu ¿Ya está lista?.- dije mirando la hora, falta poco para las ocho y no ha bajado.

-¿Quiere que valla por ella?.- dijo pícara.

-No, iré yo, avisa que salimos en diez minutos.- subí las escaleras y toqué la puerta, pero qué mierda... esta es mi casa, entré y estaba parada frente al espejo, me quedé sin habla y tragué grueso ¡¡Hermosa, preciosa!! Si por mí fuera le arranco ese sexy vestido que lleva.

-¿Te gusta?, Porque lo escogí sólo para ti.- dijo coqueta.

-Mucho.- balbuceo y sonríe triunfante.

-Bien, si es así lo dejaré.- dijo y tomó su pequeño bolso.

-Cámbiate.- pensándolo bien habrán muchas mujeres y hombres por su puesto, que la verán con deseo con ese vestido plateado hasta medio muslo, con la espalda descubierta y en medio de los senos también, la tomo por la cintura y la pego a mi pecho.

-No, suéltame llegaremos tarde.- se para de puntitas y me da un casto beso en los labios y esto es raro nunca lo hace.

-¿Qué tramas?.

-Tengo que fingir ser tu mujer ¿No?.

-Eres MI mujer.

-No, tú me tienes secuestrada. ¿Se te olvida? así que vamos "Cariño" ¿Te gusta que te diga así?.

La tomo fuerte del brazo y me acerco a su rostro.

-No juegues con fuego querida.- le doy un beso rudo con la lengua y ella me golpea el hombro, la suelto de un tirón y salgo de la habitación dejándola atrás... maldición.

Continuará...

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ADICTA A TI (Lisa y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora