ADICTA A TI (Lisa y tú)

𝕰𝖕í𝖑𝖔𝖌𝖔

________ (TN):

Me encontraba en el cuarto de mis hijos despidiéndome de ellos ya que nosotras nos íbamos a una fiesta a celebrar que Lisa ya es dueña de un territorio más.

Le doy un beso a la mejilla a Megan quien está acostada en su cama lista para dormir. Sus ojos son iguales a los míos mientras que los de Jennifer a los de Lisa.

Camino hacia la cuna de mi otro hijo: Leo, es un niño hermoso al igual que a mis otras hijas que ya tienen 6 años y Leo 1, sus mejillas están rosaditas y juega con sus pequeñas manos. Me sonríe en que me acerco a él y me ve.

-Recuerden no darle problemas a Siu.- le dijo Lisa a nuestras hijas ellas solo asintieron. Dio media vuelta encontrándose con mi mirada y sonrió de lado al verme con Leo en mis brazos.

-Tu igual pequeño.- con cuidado mi esposa abrazó a nuestro hijo y lo alzó dejándolo frente a ella mirándolo feliz, lo acercó y le dio un beso en la mejilla.

Sonreí al ver la imagen de ellos dos.

-Creo que deberíamos tener otro hijo.- comenta y abro los ojos.

-Claro, tú disfrutas haciéndolos y yo sufro durante el parto.- ella río y se acercó peligrosamente a mi, me observó de arriba abajo.

-Te vez tan sexy con ese vestido.- iba a la fiesta con un vestido azul oscuro de cuello alto sin mangas, descubierto en el centro de mis pechos y tenía una abertura mostrando un poco de mi pierna.

-Estás igual con ese traje, me calienta.- le susurro en su oído y de inmediato sus pupilas se dilatan.

-Te invito a mi cama ¿Quieres ir?.- dice.

-Estoy más que dispuesta.- poso mis brazos alrededor de su cuello y le doy un beso, apenas un roce pero ella parece no conformarse y mete su lengua en mi boca.

Gimo cuando termina el beso mordiendo mi labio inferior. Mi hijo nos veía con una boca abierta confundido. Pobrecito.

Con Lisa reímos.

-A la cama pequeño.- coloca a Leo en su cuna y le da un beso, hace lo mismo con Megan y Jennifer, quienes le devuelven el beso, pero Megan le da un beso largo.- Me vas a llenar la cara de baba mocosa.- le dice y mi hija la ve con un puchero.

Apagó la luz de la habitación y salimos de ella.

El sonido de una nalgada hace eco por el pasillo y la miro con el ceño fruncido.

-Se me antojó.- reprocha y se pega a mi espalda rodeando mi cintura sin dejar caminar.- Tienes un delicioso culo.- se frota a mi trasero y siento su bulto. Me giro para encararla.

-Celebremos y cuando lleguemos haces conmigo lo que quieras.

-Podemos hacer un rapidín cariño.- acaricio su miembro por encima del pantalón sintiendo como se hace más grande.- Mierda ________.

-No.

No espero una respuesta y me subo al coche, la veo por el cristal y me da una mirada de pocos amigos. Se sube y se acomoda en el asiento.

-Pagarás por dejarme así pequeña demonio.- sonrío.

[…]

Salimos del auto y nos dirigíamos al lugar, tomó mi cintura posesivamente.

-Recuerda no coquetear con nadie.- me dice antes de entrar, enrollo mis brazos a su cuello.

-Esto me recuerda a los viejos tiempos.

-A la primera vez que te hice mía.- rodo los ojos.

-¿Tú solo piensas en sexo?.

-Es difícil no pensar en eso cuando tienes de esposa a ________.