Trapos sucios

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CAPÍTULO 19

Narra Astrid

~dos semanas después ~

Salgo del examen de historia de la música. Estas dos últimas semanas he estado todo el rato de exámenes y estudiando para éstos. La verdad es que para algo que me interesa me lo curro bastante, prácticamente es mi vida.

Al acabar mi último examen salgo saturada, seguro que esta noche sueño con monjes y canto gregoriano y códices y tetragramas y polifonía... Ya, cerebro, no pienses.

Voy a mi habitación y, al entrar, encuentro un sobre que han colado bajo la puerta. Lo abro y encuentro una foto mía de hace años en la que está toda mi familia unida, antes de que muriera mi hermano. Hay una nota y un recorte de periódico. "Así que, un papá famoso. ¿Qué dirá toda la academia cuando descubran a la niñita de papá?". El recorte de periódico era una foto de mi padre y su hermano mayor junto con mi abuelo. En el artículo se contaba la disputa que tuvieron...

¡Alguien está sacando lo trapos sucios de mi familia! ¡Esto es indignante! No conozco a nadie tan cruel cómo para hacer algo así, no, espera, conozco a Melanie.

Voy a buscarla y me la encuentro en las escaleras de la residencia.

-¿A qué viene la carta esta? -Le digo mientras levanto el sobre en alto delante de su cara.

Ella de despide de Sarah, la chica nueva se ha convertido en su última incorporación al séquito (más bien secta) que está a su alrededor.

-Tris, mi amor, Tranquilízate. No es nada- dice con voz melosa.

-¿Qué pretendes con esto?

-En verdad, nada. Tengo todo lo que quiero y todo lo que tu quieres, soy casi feliz.

-¿Casi?-empiezo a temer cómo va a acabar esta conversación.

-Si, solo me falta que tú seas infeliz, que estés avergonzada y que te sientas una mierda.- tengo los ojos como platos- ya te quité a Daniel, ahora te voy a quitar tu vida social y lo próximo será tu amada música.-dice con una sonrisa malvada.

-Pero, ¿yo qué te he hecho?

-Eso da igual ahora. Todo el mundo va a saber quién eres en realidad. Debo admitir que me sorprendió un poco cuando Dan me contó todo esto.

-¿Te lo contó Daniel?- obviamente había sido él, era el único que conocía a mi familia.

-Ajá, otra traición que añadir a la lista, ¿verdad?-Será zorra, manipuladora y arpía. Tengo que reconocer que ha sido un buen golpe, ha dado donde más me dolía.- Bueno, te dejo, no tengo nada que hacer, pero seguro encuentro algo mejor que estar contigo.

Gruño y me voy echando pestes a mi habitación.

~a la mañana siguiente ~

Ayer pasé la tarde a la defensiva, esperando su momento de atacar, pero no pasó nada.

Salgo de mi habitación sola, las chicas todavía duermen, es sábado. Desayuno y me voy a tocar. El lunes tengo examen de chelo y de cámara, el de piano es el miércoles.

Entro al aula. Saco el chelo con parsimonia mientras me concentro. Toco tres estudios, pura técnica. Es un coñazo, pero es imprescindible para poder tocar bien. Paso a Schumann, mi querido genio loco. Su vida fue una telenovela, enamorado perdidamente de su mujer, Clara Schumann, profesor de Brahms (que también estaba enamorado de Clara) y bipolar. Acabó en un psiquiátrico y Brahms fue el que mantuvo a su mujer y sus hijos. Esa es la versión oficial, pero seguro que hubo bastantes más líos...

Me dedico a ver pasajes concretos, justo lo que no me sale. Toco la "escala maldita". Nunca la clavo. Doy bien las ocho primeras semicorcheas, pero siempre desafino en el cambio de posición. Repito la escala lentamente unas treinta veces y luego la toco una vez rápido. Paso las primeras ocho notas, voy bien, afino el cambio de posición, subo al "la" y mantengo esa nota. ¡Si, por fin me salió! Lo repito varias veces para fijarlo y asegurarme de que no ha sido suerte. Guardo el chelo y miro el reloj, ¿ya es la hora de comer?

Entro en el comedor y se hace el silencio. Todas las caras se giran en mi dirección pero no escucho los chismes.

Cojo mi comida y llego a mi mesa. Ya sé que Melanie ha informado a todo el mundo de mi vida, solo que no quiero verlo.

En la puerta de entrada al comedor hay un cartel con mi foto y el lema "¿Princesa caprichosa busca triunfar en la música estafando?". En la esquina derecha de abajo esta escrita una página web.

-¿Es esto verdad?- me dice Matt. Yo tomo su teléfono y leo por encima lo que dice la página. No me da tiempo a responder, puesto que antes llega Melanie.

-Astrid, no me esperaba esto de ti. -Dice como si estuviera decepcionada conmigo- Esto dice que tu padre mando a tu tío al hospital para quedarse con la herencia de tu abuelo, un noble alemán. Seguro que tu tío mató a tu hermano como venganza. A demás, todos sabemos el porqué estás aquí. Es obvio que tus padres han pagado para que te admitan, porque sino, no veo posible que entraras aquí por tu cuenta. Pero, sabes, esto no es un psiquiátrico al que ir para recuperarte del divorcio de tus padres y de la muerte de tu hermano.

Auch, eso duele. Y ahí va mi vida privada al completo. La mitad de las cosas son mentira. Es verdad que mi familia paterna es rica y noble y que se han peleado. Es verdad que mi hermano ha muerto y que mis padres están divorciados. Es verdad que Melanie me ha hecho daño, pero ahora me toca contraatacar.

-Tienes razón, yo perdí a mi hermano. Pero cuando mi hermano se fue, tú perdiste a tu amor platónico. ¿O ya no te acuerdas de cuando venías a mi casa solo para verle, sentarte en su regazo y que te prestara toda su atención? Sé que eres tonta y que tu cerebro no da para mucho, pero seguro que recuerdas lo que pasó hace seis años. Tenías diez años y él dieciocho. Te lanzaste a él y le besaste delante de su novia. Con diez años y haciendo esas cosas, nena, no me esperaba eso de ti, aunque, viendo lo que eres ahora supongo que por algo se tenía que empezar, puta incluso a los diez años.- respondo sarcástica y como si toda esta situación me diera igual y fuera insignificante a mi lado, pero de verdad me ha dañado fuerte.

La dejo allí plantada y voy a mi habitación. Evito llorar, dejo la mente fría y analizo la situación. El origen de todo es Dan, él se lo ha contado todo. Pero, ahora que lo miro con perspectiva, me da pena. Melanie le ha utilizado para saber de mi y hacerme daño, pero se va a deshacer pronto de él, le tiene completamente manipulado.

-Tris, la directora quiere verte en su despacho- dice Lis, que acaba de entrar por la puerta de la habitación.

Hola hola. Sé que el capítulo es un tanto... Bueno, no sé definirlo. La verdad es que he tenido una semana horrible y un día pésimo. La fastidié con el chico que me gusta, he discutido con una petarda... y seguramente esto le da igual á todo el mundo y pasareis de esta nota, pero bueno, que más da? Hay veces que solo necesitas soltar las cosas y expresar tus sentimientos.

Espero que os haya gustado el capítulo, no os olvidéis de votar y comentar ;-)
Besos, M

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