¿Hemos roto?

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CAPÍTULO 15

Cuando se ha ido Matt me miro al espejo de la sala. Tengo todo el maquillaje corrido. Me seco las lágrimas y observo lo que ha quedado de mí. Ya se me ha pasado el llanto inicial y ahora paso por la típica fase de cabreo. ¿Cómo pude ser tan tonta? No soporto a la gente ingenua y yo soy la primera que se tira a los pies de su mejor amigo. Suelto un grito de frustración y me pongo a tocar el piano. No sé qué toco, simplemente improviso. Las notas salen de mí, mis dedos saben qué tecla tocar exactamente, no dudan en ningún momento. "La música expresa aquello que no puede decirse con palabras pero no puede permanecer en silencio " (Víctor Hugo).

Vuelvo tarde a mi habitación, Lis y Claire ya están dormidas, me quito el maquillaje lo más silenciosamente que puedo y cuelgo el vestido en una percha. Me meto en la cama y cierro los ojos con el deseo de que todo esto pase.

****

Narra Daniel

Despierto por el frío. Busco la sábana y no la encuentro. Me giro y me encuentro un cuerpo en mi cama, un momento, esta no es mi cama. De pronto todo lo que pasó ayer en el baile viene a mí. Tras el increíble beso de Melanie nos fuimos a su habitación, que es individual. Anoche no pasó nada más que una sesión de besos y manoseo. Me levanto y me dirijo al baño en bóxer. Me lavo la cara y me visto. No es temprano, aunque no se escucha un alma ya que todos estarán con resaca. Le doy un beso corto en los labios a Melanie, no quiero despertarla. Tengo que hablar con Astrid y aclarar las cosas. Ya que estoy en la residencia femenina, me dirijo a su habitación. Llamo a la puerta y no me abre nadie. Vuelvo a llamar, espero que no estén desayunando. Por fin se abre la puerta y veo a una desaliñada Astrid.

-Tenemos que hablar.-digo.

-No quiero hablar contigo.

-Vale, lo entiendo, no hace falta que hables, solo necesito que me escuches.

-Okey.

-Lo siento, no tendría que haberla besado, pero eso me ha servido para darme cuenta de que me gusta Melanie y lo siento de verdad porque eres mi mejor amiga y no quiero que eso cambie.

-Yo también lo siento, porque no te quiero volver a ver. Me da verdadera pena que alguien tan importante para mí como lo eras tú me acabe dando igual de esta forma.

-¿Entonces hemos roto?

-¿Enserio lo preguntas? -Dice y me cierra la puerta en las narices.

Salgo de la residencia femenina y voy a mi habitación.

-Daniel, ¿dónde estabas? - Me pregunta Matt.

-En la residencia femenina. - Me mira con cara interrogante.- he dormido allí.

-¿Te has tirado a Melanie?-dice Luke- Muy buena jugada, give me five.

-Solo dormí con ella.

-¿No tenías condones, verdad?

-Cállate, Luke. ¿Has hablado con Astrid?

-Sí. Hemos roto. No hay más que hablar. Vamos a desayunar.

Una vez allí veo a las chicas en nuestra mesa habitual y a Melanie saludandome desde otra. Me dirijo a ella que está junto con su amiga Sarah y unos chicos mayores. La saludo con un beso y me siento a su lado.

-Siento no haber estado esta mañana cuando despertaste,- le susurro al oído- tenía que resolver unos asuntos con mi ex.

-Tranquilo, amor. Lo entiendo, sé lo manipuladora que puede llegar a ser, la conozco desde antes que tú y puedo afirmar que la gente no cambia. Siento que te haya utilizado de esa manera y todo para saber tus secretos.

-Bueno, ella también me contaba los suyos.

-¿Si? También hacía eso conmigo. Sabes, antes éramos amigas. ¿A ti que mentiras te contó?

***

Narra Astrid

Tras la visita de Daniel me volví a romper. Me derrumbé, no recuerdo haber llorado tanto desde lo de mi hermano... Ahora estamos en el comedor. Claire y Lis intentan distraerme hablando de cualquier tontería. Entran los chicos en el comedor. Dan va hacia la mesa de Melanie y la saluda con un beso, que rápido me ha sustituido. Luego llegan Luke y Matt y se sientan cada uno a mi lado.

-Será gilipollas- dice Matt mirando a Dan. -Wow-dice ahora mirándomea mí. Sé que me veo mal, pero ¿Tanto?

-Ya se va comentando por ahí que anoche acabaron en la habitación de Melanie. -Dice Luke.

-¿Podemos hablar de otra cosa? Sinceramente lo que menos me apetece ahora es escuchar todos los cotilleos.

-Sabes que nos tienes aquí para cualquier cosa -dice Lis.

-Somos tus amigos, te vamos a apoyar con cualquier cosa. -Dice Claire.

-Lo sé. Me voy, no soy tan masoquista como para quedarme a ver este espectáculo. - He de decir que Dan y Melanie habían empezado a darse el lote delante de todos. Me levanto y me voy. No quiero sentir, no quiero ser yo.

Voy a la terraza del edificio de música. Este sitio me trae muchos recuerdos: nuestros besos, abrazos, conversaciones... Él sabe todo de mí. Era mi mejor amigo, le confiaría mi vida, pero, como siempre, acabo confiando en las personas equivocadas. Cojo el cuaderno de pentagramas y me pongo a escribir, necesito desahogarme de alguna forma, no puedo guardar todo esto. Al fin y al cabo, los sentimientos crearon el arte, ¿no?

Hola amores. Espero que os haya gustado el capítulo. Votad y comentad, me haríais muy feliz .
Besos, M

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