En la casa de Joaquín celebraban a los nuevos Wicca, era de noche y el ambiente estaba muy alegre, todos los amigos estaban ahí, los padres de Emilia hablaban muy animadamente con los padres de Nella, Joaquin estaba con Andrew y los demás, Edgardo y Catalina andaban de un lado para otro como si fueran novios quinceañeros, los jardines estaban adornados con luces, mesas y demás, era una fiesta muy animada y todos felicitaban a Joaquin por ser tan buen anfitrión, Emilia estaba algo cansada así que se aparto un poco del resto y se apoyo en un árbol cercano, miraba el cielo estrellado y recordaba todo lo que experimento en el ritual, sentía las risas de todos a la distancia.
De pronto alguien tiraba de su vestido, se sobresalto un poco pero luego sonrió al ver George.
-Emilia ¿quieres bailar conmigo?.
Lo tomo de sus manos y comenzaron a bailar sin parar de reír, el viento sopló tan fuerte que los pétalos de las flores volaron por todas partes.
-Que hermoso - dijo George y en realidad los pétalos y el viento le daban una vista hermosa al lugar y a la fiesta, pero Emilia sabia que nada bueno se venia.
"LA HORA DECISIVA YA LLEGO...ERES UNA GUERRERA Y TIENES EL INSTINTO ASESINO..."
Su mirada se cruzo con la de Axcel...el asintió asustado y en un lapso de segundo la pesadilla comenzó. Las copas y vasos explotaron dejando vidrios quebrados por todas partes a algunos les quedaron las manos sangrando debido a que estaban bebiendo en ese momento. Las mesas salieron volando con una fuerza descomunal, a esas alturas ya todos estaban preparados para una batalla, algunas luces se apagaron y todos se reunieron. Emilia tomo al pequeño George de la mano y fueron corriendo hacia la casa, cuando llegaron Elena y las sirvientas estaban en la cocina asustadas por lo que ocurría apenas entraron la pequeña Michelle fue corriendo a abrazar a su hermano.
-Niña Emilia ¿Qué ocurre? - Elena estaba pálida - sentimos ruido y cuando íbamos a ver la señorita Nella llego con la pequeña y nos pidió que la cuidáramos y que no saliéramos de la casa.
Emilia subió al lugar que era su habitación y por suerte Joaquin no se llevo las herramientas a su departamento en la ciudad, también estaban las herramientas de todos ahí, en sus bolsos de terciopelo, los tomo todos y bajo rápido a la cocina, cuando la vieron entrar Emilia vio en sus caras el miedo que tenían, les escribió en un papel que por favor cuidasen a los niños.
-Así lo haremos - dijo la sirvienta mas joven de todas - protegeremos a los niños como sea.
-Si - respondieron todas a la vez.
Emilia salio por la puerta trasera y dejo todos los bolsos a un lado, se dio vuelta, cerro los ojos y entro en trance elevando los brazos hacia el cielo invocando la oración para proteger la casa en caso de que alguien quisiera entrar:
"Arcángel San Miguel a la derecha,
San Gabriel a la izquierda,
San Rafael por detrás,
para que con sus alas cubran mi hogar de todo mal,
arcángel Uriel al frente, para que la puerta siempre esté abierta al bien y cerrada al mal,
y sobre mi hogar, la protección y gloria del Universo Celestial.
Amen."
Tomo las herramientas de todos y fue sigilosamente donde estaban todos reunidos, no podía ver bien quienes estaban pero si podía distinguir dos grupos de gente y a medida que me acercaba vio a Sara, Massimo a un costado y detrás de ambos estaban los brujos, eran mas que la vez en que la tenían secuestrada en el bosque de las varas, pero faltaba Mariana...no estaba ahí o tal vez se ubicaba en otra parte, pero Emilia sabia que estaría ahí si o si.
- Lo lograste Edgardo - dijo Sara reprimiendo la rabia que tenia dentro - tu circulo se completo y tu heredero sobrevivió y esta aquí...pero nosotros no permitiremos que sigan unidos...la muerte ronda nuevamente el lugar.
- Vete Sara...no queremos pelear con ustedes, nosotros luchamos por la armonía del universo.
- El universo no sirve para nada - dijo Mariana apareciendo al otro costado de Sara - nunca conspira a nuestro favor cuando deseamos algo y tu lo sabes muy bien Edgardo.
-Tu pudiste ser la mejor hechicera, pero tu ambición pudo mas que tu deseos de ser mejor cada día.
-¡Cállate! yo debí ser la heredera, sin embargo preferiste a esa estúpida de Michelle...pero en fin...pudimos deshacernos de ella así que será fácil matar al que sigue - miró a Axcel y soltó una carcajada siniestra.
-¡Maldita asesina! - grito Andrew y fue directo a atacarla.
-¡Mariana detente!- Emilia volteo la mirada hacia Joaquín, pero lo perdió inmediatamente cuando vi a Mariana encima de ella arrastrándola varios metros por el pasto húmedo.
-Ahora si que no volverás - le dijo en el oído, la tomó del cuello y acercó su boca hacia la suya nuevamente Emilia comenzo a sentirse débil, cerro los ojos y la tiro al suelo como si fuera una muñeca de trapo.
-¿Es que nunca aprendes imbécil?...sabia que eras estúpida pero no creí que fuera tanto - dijo en un tono triunfal.
Mariana se dio media vuelta y se fue hacia donde estaban los demás. Emilia se puso de pie y vio algunos brujos en el suelo, busco con la mirada a Joaquin, veía a sus padres luchar contra tres sujetos, a Wilson contra una mujer mayor, Edgardo y Catalina se enfrentaban a Sara, se sentía como una extranjera en un mundo diferente, todos hablaban idiomas distintos tanto para atacar como para defenderse, Axcel había aprendido mucho ya que los brujos que lo atacaban no podían contra el.
Seguía buscando a Joaquin, cuando por fin lo encontró estaba luchando contra Massimo, Mariana fue corriendo por detrás de el cuando con sus manos golpeo su espalda arrastrándolo varios metros como lo había hecho con ella.
Massimo tomo del cuello a Joaquin, Emilia se asusto por que sabia lo que iba a pasar, ¿Por qué Joaquin no usaba su don?¿pero cual era? ¡mierda! en todo este tiempo conocía el don de todos a su alrededor menos el de Joaquin pero no era momento de pensar en eso, Massimo acerco su boca ala de Joaquin y comenzo a succionar su alma...
